¿Crazy together? (Byler)

Capítulo 13

Mike.

Me sentía nervioso. Oh Dios, me sentía muy nervioso.

Ya era lunes y tenia que ir a la preparatoria, por algún motivo me sentía demasiado nervioso al pensar en ver a Will otra vez.

Después de lo que paso...

No había dejado de pensar en eso durante el resto del fin de semana, imaginaba a Will besándome nuevamente... ¡Se me aceleraba el corazón cada vez que lo pensaba!

–Creo que me estoy obsesionado con eso– dije para mi mismo.

–¿Obsesionado con qué?

Nancy estaba parada en la puerta de mi habitación, ni siquiera había tocado antes de entrar, menuda sorpresa...

–Nada, mi futuro, y eso...

–Tú futuro...

–Sí.

–¿Estas seguro que es eso?

–Ve al grano, Nancy.

Ella me observo por unos segundos, dudando de si terminar de entrar a mi habitación o no. Al final termina entrando de todos modos, y se acomodo en mi cama.

–El día de la fiesta de Will, te desapareciste un rato.

Me quedo callado al escuchar eso, pero puedo sentir como mi corazón se acelero al escuchar aquello. Oh no ¿Nancy lo sabrá?

–Aja...

–Casualmente Will también desapareció.

–¿Y?

–¿Estaban juntos?

Pensé en mentirle por unos segundos, pensé en negar todo, pero realmente no podía ocultarle algo a Nancy, ella siempre se enteraba de todo.

Pero tampoco iba a decirle toda la verdad.

–Sí, estuvimos juntos.

–¿Por qué se alejaron de todos?

–Bueno, discutimos un poco, quise disculparme con el, no quería arruinar su fiesta de cumpleaños. Luego estuvimos... charlando un rato.

–Oh, fue eso.

–¿Qué más sería?– trate de sonar indignado.

–Oh nada, solo pensé que... ejem, nada.

–¿Sabes algo curioso?

Ella no respondió, solo se quedó mirándome esperando a que terminara de hablar.

–Tú también te desapareciste un rato.

Nancy no dijo nada, pero parecía sorprendida.

–Y Jonathan también.

–Mike...

–Luego pase por los baños y escuche algunos ruidos...

–¡Mike!

Nancy enrojecio al instante.

–Esta bien, déjalo, me voy de tu habitación.

–Una muy sabia decisión.

Ella salio de la habitación dejándome solo nuevamente, volví a girarme hacía el espejo, y mis nervios volvieron a aparecer, casi deseaba que Nancy volviera, casi...

–¡Michael Wheeler, tenemos que irnos ya!– me grito Nancy desde la planta baja.

–¡Ahora bajo!

Me doy una última ojeada en el espejo antes de ir por mi mochila y salir de mi habitación. Nancy ya esta en la puerta de la casa, cuando salgo la cierra tras de nosotros.