...
Me siento de golpe en la cama y observo asustada mi alrededor ¿Acaso todo fue un sueño? Acaricio mi cuello en busca de algún dolor terrible, pero me sorprendo al no sentir nada.
Me levanto de golpe de la cama y el piso frio no me detiene, corro descalza hacia el baño, sin asearme ni nada reviso mi cuello, extrañamente no tengo mis acostumbrados moretones y solo hay una pequeña marca apenas visible.
Aterrada y confundida busco mi móvil y llamo a mi doctor.
Al tercer tono atiende.
-Hola mi paciente favorita.- me saluda.-¿Alguna novedad?- lo escucho, con su acostumbrada tranquilidad.
-¡Doctor Finen ayúdeme!-grito
-¿Estás bien?- me pregunta.
-Si.- me relajo.- Es que estoy aterrada, mis marcas... casi no se ven.
Observo mi reflejo en el espejo sin poder creerlo aún.
-¡En hora buena!-dice emocionado
-No doctor, usted no entiende, casi no se ven, ayer estaban horrible y hoy están...
-¿Te estas tomando la medicina que te recete?
-Si señor- musito.
-Entonces tranquila, es normal que algunos medicamentos actúen así. Seguramente estaba reduciendo la hinchazón y tú con tus complejos absurdos veías esa herida grave y ahora te estás dando cuenta de los cambios.
»Puede ser«
-Supongo que... tiene razón disculpe la molestia.
-¡No es molestia! Llama cuando gustes hablamos luego estoy por entrar a cirugía, cuídate.
-Usted igual.
Termino la llamada y me siento sobre el retrete a pensar.
¿Será posible tanto cambio? ¿De verdad estoy tan mal? No definitivamente algo más está pasando aquí, ese sueño fue demasiado real para mi gusto, pero la verdad es que no pudo ser algo más, tuvo que ser un sueño, mi jefe no es ningún vampiro ni nada que se le parezca, todo lo contrario parece un completo ángel por lo bondadoso que es conmigo.
***
Termino de aplicar la última capa de rímel y al verme en el espejo sonrío satisfecha, no llevo demasiado maquillaje, apenas cubrí las marcas. Esta mañana luzco más pálida que de costumbre así que antes de maquillarme, tome un desayuno muy delicioso, tanto que no recuerdo la última vez que hice algo igual.
Me levanto y busco el vestido que usaré esta noche, Draven me escribió para avisar el cambio de hora así que opte por mi vestido rojo de gala. Fue un regalo de mi madre, se suponía que lo usaría el día de mi graduación, pero creo que es demasiado perfecto para darle tan mal uso, en un día que sinceramente no espero con ansias como imaginé.
El vestido es rojo con un escote entre mis pechos y una hermosos cristales brillantes a su alrededor.
Lo deslizo por mi cuerpo y siento la suave tela acariciar mi piel, al terminar escucho la puerta y sé que es el. Así que me aplico un poco más de perfume, tomo mi bolso y salgo caminando erguida moviendo mis caderas con mis altos tacones plateados.
Al abrir la puerta lo veo con un hermoso traje de color negro, luce tan impecable y huele de maravilla al verme hace una mueca y siento mi ego caer al suelo.
-Hola- musito avergonzada.
»¿Tan mal me veo?«
-Hola- dice seco.
-¿Nos vamos?- le pregunto tímida y el asiente.
»Maldición, te dije que escogieras el azul, siempre te opones y mira seguramente cree que eres una zorra.
¡Cállate me veo genial!
»Eso no piensa él. «
Decido ignorar a mi yo interno y me doy cuenta de que estamos frente a un hermoso auto negro.
-Te gusta el negro- pienso en voz alta.
-Es mi color favorito- dice serio.
La verdad sí el no me lo dice, ni cuenta me doy de ello, casi todos los días viste el mismo color, hasta su auto es negro .
-¿Estás molesto?- le pregunto tímida.
-Para nada- contesta, me ayuda a entrar en el auto y luego lo rodea.
Cuando ambos estamos en dirección al lugar que iremos, él está callado y hay una gran tensión en él aire.
-Draven - llamo su atención y el me observa de reojo.
-¿Qué pasa?- pregunta.
-Me veo tan mal.- susurro y el detiene el auto de golpe.
Se quita el cinturón y se acerca a mi amenazante, estamos tan cerca el uno del otro que estoy inmóvil viendo sus ojos azules.
-Eres la mujer más hermosa que jamás he visto ________, ese vestido te queda perfecto y no estoy molesto, esperaba que fueras menos arreglada y ahora tendré que estar más pendiente de ti para que nadie te hinque el colmillo.- su voz sensual me deja sin palabras.
Con su mano fría acaricia mi brazo desnudo y un escalofrió recorre mi piel.- Te ves tan apetitosa, quiero morder cada parte de tu cuerpo- dice cerca de mis labios.
La boca se me seca y humedezco mis labios con la lengua, él me observa atento y se aleja.
Esconde su cara entre sus manos y suspira.-Me volverás loco Elly- dice y lo observo confundida.
Mis pensamientos son un caos, no tengo la menor idea de que decir o hacer. Permanezco en silencio hasta llegar a un hermoso restaurante, supongo enseguida que aquí será la reunión.
Bajo del auto con ayuda de Draven y me observa serio. ¿Cómo alguien puede ser tan inexpresivo en un momento y luego ser otro?
ESTÁS LEYENDO
Marcada por un vampiro : El amor nace
RomanceElly Hensel , una chica de 26 años es perseguida por un misterioso vampiro llamado Draven. - ¿Q-Qué quieres de mí? - Se mía otra vez.... ¿ Que pasará ? ¿ porque un vampiro la quiere ?