Capítulo 6

88 3 11
                                    

La princesa, Alerie Stark, era una mezcla perfecta de todos los miembros de la familia Stark: Tenía la rudeza de su tía Arya, el liderazgo de su tía Sansa, y la paciencia de su padre Brandon. Lo único Tyrell que había heredado de su madre, según todos los que la conocían, era su belleza: la nariz respingada, los labios carnosos y rosados, y su elegancia al dar cada paso.

Le acababan de informar que partiría a Invernalia acompañada por Tyrion Lannister, y no podía estar más contenta. Odiaba la capital, y siempre prefirió el clima frío y los abrigos a los adornados vestidos que le daban comezón y la hacían sentir incómodamente expuesta, porque no quería mostrar mucho su piel.

Armaba su equipaje cuando tocaron a su puerta.

—¡Adelante!

—Disculpe, su alteza –Ingresaba, Ser Podrick -. Lord Tyrion, ya está listo y la espera en la entrada.

—Gracias, Podrick, no me tardo.

No sólo Tyrion la esperaba, también se encontraban Ser Brienne, sus hermanas Olenna, Cath y Lyan y, por supuesto, sus padres.

—Cielito mío –Dijo Gwendolyn y tomó a su hija de los brazos para fundirla en un fuerte abrazo.

—Mamá, por favor –Refunfuñaba hasta que por fin pudo zafarse de su agarre -. No me iré para siempre.

—Pero te echaremos tanto de menos.

—¿Puedo ir contigo? –Preguntó Cath.

—Cuando lo peor pase podrás venir –Le respondió su hermana para luego abrazarla como despedida. Saludó a Lyanna también para que no se sintiera excluida.

—Te deseo lo mejor –Le dice Olenna -, me aseguraré de enviarte cartas desde Altojardín.

—Saluda al abuelo de mi parte.

—Y tú a la tía Sansa.

Las dos se abrazaron mientras el resto intercambiaba miradas de ternura, era increíble como las hermanas, pese a vivir todo el tiempo discutiendo, tenían un vínculo especial imposible de romper.

—¿Me ves volviendo en algún momento? –Le pregunta a su padre.

—Prefiero no decirte.

Ella asintió, comprendía su difícil situación y sin más lo abrazó.

—Usa la navaja –Le susurró Bran al oído. Le había obsequiado una navaja hacía años para que pudiera defenderse, pero hasta el momento sólo la usó para abrir algunos sobres o cortar listones -. Por si necesitas reparar algún vestido.

Alerie se lo quedó mirando con cierto dejo de duda. Sin embargo, no lo cuestionó, él lo sabía todo y debía obedecerlo.


En El Cruce, los que también se preparaban para marcharse hacia Invernalia eran los hermanos Elinor y Sandor. Pensaron enviar a Eddard también, pero él insistió en que su lugar estaba en Los Gemelos y nunca iba a abandonar su hogar.

—Salió a ti –Le dice Elmar a Arya tras las declaraciones de su hijo mayor.

—Mis señores –Irrumpe Berta, mientras estos observaban como las pertenencias de sus hijos eran cargadas en la carroza -, siento interrumpir, pero los niños están haciendo muchas preguntas y exigen respuestas de sus padres.

Las preguntas a las que Berta se refería tenían que ver con la inminente guerra familiar, Elinor consideraba que sus tíos eran unos tontos y, por lo tanto, no los veía como personas que planificaran una guerra, a su vez, Sandor siempre los ignoró y la situación lo tenía intrigado, tan intrigado que comenzaba a replantearse ir a Invernalia o quedarse.

Cacería de Reyes {Got Fanfic}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora