32 𝐒𝐫𝐚.𝐖𝐚𝐲𝐧𝐞

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𝐏𝐎𝐕: 𝐁𝐑𝐔𝐂𝐄

El cálido cuerpo de Emily yacía a lado mío. Su rostro reflejaba tranquilidad y relajación. Me preguntó en qué sueña. Ella tiene la capacidad de reflejar un rostro en el que guarda cosas infinitas pero de las cuales no podrías adivinar. Ella es fuerte y reservada en sus pensamientos, no deja que nadie los toque, pero ¿por qué?. Tal vez sea como yo, evitó demostrar pensamientos y sentimientos por miedo a ser herido después, deseo que nadie lo sepa para evitar enfrentarme a mi mismo. A mis recuerdos.

Quisiera abrir su corazón y ver todo lo que oculta, todo lo que pesa, todo lo que duele. Se que en el fondo Emily esta perdida, a la deriva, lo sé porque a veces la veo estar muy pensativa con una mirada vacía, como yo. Creó que es algo en lo que nos parecemos. El estar profundamente rotos. Y el día que nos encontramos en el callejón y en la oficina vi algo especial en ella, algo que nunca había visto. Cuando empecé a conocerla, vi que sus rasgos físicos no eran similares a otras. La mitad de su belleza era su extraña forma de pensar. Y cuando la vi a fondo pensé « mierda, me voy a enamorar »

Quité mi brazo de su suave cintura y me levanté para poder ponerme una camiseta negra antes de que despertará y supiera que dormí sin una, pues tenía un poco de calor. Caminé al baño y me lave la cara y dientes. Al regresar ya Emily estaba despertando mientras talla sus ojos. Decidí acercarme y entrar adentro de la colcha blanca , me acerqué a ella por debajo y salí a la superficie ya enfrente de su rostro, sonreía ampliamente mirándome con detalle, yo hice lo mismo.

- Hola - me acerqué y uní nuestros labios en un beso corto en el cual podía sentir como sonreía sobre mis labios delgados.

- Hola sr. Wayne - acarició mi rostro, recorriendo con sus dedos cada facción, lunar y rasgo que tenga con tanta delicadeza, lo examinaba como si temiera olvidar cada detalle.

Nos quedamos un rato más acostados hasta que decidimos bajar a desayunar. En el comedor se encontraba Alfred bebiendo té mientras leía un periódico y aparte tenía la televisión encendida en el canal de las noticias.

- buen día amo Bruce, sra. Emily

- Buenos días Alfred

- el desayuno está servido - informó mientras quitaba los platos de una mesita con ruedas y los ponía en la mesa - espero y les gusté.

Ambos agradecimos y nos pusimos a comer mientras teníamos una pequeña charla. El sonido de un teléfono se percató dentro del comedor y Emily lo tomó para contestar.

- Hola Tía ¿como van las cosas por allá?... Enserio? Que bien! Me alegra mucho... No tía Nancy, ella ya quedó en el pasado... Si de acuerdo, por la noche te llamaré para poder platicar con ellos. Te quiero, adiós.

Hubo un silencio incómodo, Emily no me platicaba mucho sobre su familia y tenía curiosidad pero no me metería en ese tipo de asuntos.

- La extrañas? - cuestione para aligerar el ambiente.

- si, bastante. Espero ir en algunos meses más - habló recogiendo su plato y se dirigió a la cocina para lavarlo lo cual era una costumbre en la mansión, en vez de que Dorys o Alfred los lavaran, ella decidió poner la regla de que estando ella cada quien limpiará su plato. Miré por unos segundos al mayor y él devolvió la mirada pensativo.

- amo Bruce, creo que debería hacer algo por Emily. Puede que invité a su familia a venir a cenar.

- no viven aquí en Gótica

Never Forget Me - Bruce WayneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora