Reina pirata

¡Intruso en el Sunny!

Otro día normal en el Thousand Sunny Go.

Cada quién hacia lo que quería, esta vez Luffy estaba acostado en el nido del cuervo mientras admiraba el cielo despejado.

Luffy pensaba en ese extraño sentimiento que lo había atacado el día anterior y previo a ese día.

Se asomó al borde de la circunferencia que era el nido del cuervo, miró desde lo alto como Yumiko escapaba de un enojado Usopp con una copa de postre entre sus manos y una cuchara en su boca.

—¡Dijiste que me darías una probadita! — le gritó Usopp a Yumiko, quién solo se burlaba del nariz larga.

Yumiko nuevamente escapó de el enojado tirador, alzó la vista encontrándose con la marrón mirada de su capitán. Le saludó con la mano desde abajo, con una sonrisa sincera en sus labios.

Luffy retrocedió en su lugar rápida y nerviosamente, sintió como sus mejillas se calentaban y su corazón latía a un trillon por hora.

¿¡Que le pasaba!? ¿¡Por qué se sentía así!? ¿¡Estaba enfermo o algo para que se sintiese tan malditamente extraño!?

Ya era hora de preguntarle a Robin sobre aquel sentimiento, ¡Ella lo sabría y se lo explicaría!

Tan pronto Luffy se decidió a bajar del nido del cuervo, una cosa extraña de forma ovalada caía desde el cielo.

Aquella cosa ovalada quería caer sobre la cubierta de Sunny, y así lo hizo. Yumiko corría libremente por la cubierta sin enterarse de que algo quería caer sobre Sunny.

Desde la perspectiva de Luffy, desde lo alto del barco, se veía como si esa cosa rara cayese sobre la cabeza de Yumiko, quién solo se había quedado mirando fijamente a la cosa.

—¡Yumiko! — gritó Luffy asustado, sin percatarse de que su cuerpo actuaba de forma propia, insitandolo a saltar desde lo alto y verificar si Yumiko se encontraba bien.

Bajó del punto más alto del Sunny lo más rápido que su cuerpo de goma le permitió, por cosas del destino Yumiko estaba perfectamente; tirada en el suelo, con esa rara cosa ovalada a unos centímetros de su cuerpo, pero bien.

—¿Estás bien? — Luffy se agachó a la altura de Yumiko y colocó una mano en su hombro, la pobre chica casi no se podía mover por el shock provocado.

—E-eso creo — balbuceó mirando fijamente a la cosa ovalada, pronto todos los tripulantes se acercaron hacia ellos.

—¿Qué es eso? — cuestionó Chopper confundido.

—Parece ser una cápsula — sentenció Franky bajo la atenta mirada de la tripulación.

Se sentía como un deja vu, como cuando Luffy había subido el bote de Yumiko a la cubierta.

Antes de que alguien más dijese cualquier cosa, una compuerta se abrió en la "cápsula", dejando salir demasiado humo.

—No salió como quería, de nuevo — se escuchó una voz masculina desde dentro de la cápsula, seguida de un profundo suspiro.

Entre el nubarrón de humo se pudo divisar una alta silueta. Se disipó el humo dejando ver a un hombre, o bueno, la espalda del mismo.

—¿Quién eres? — pregunto Zoro, desenvainando sus katanas.

—¿Huh? — la silueta estaba de espaldas a los mugiwara, ante la pregunta del marimo se giró lento y salió de la cápsula, con ambas manos levantadas —. No me ataquen, por favor — pidió el hombre —, no vengo a causar ningún problema — todos pudieron observar mejor al tipo ya que había salido hacia el exterior: