Una Nueva Oportunidad

Capítulo 1

La brisa golpeaba casi furiosa mi cara, mire la puesta de sol, como aquel desaparecía, escondiéndose en lo profundo del hermoso lago, había sido un gran día, casi parecido a los anteriores. 10 perfectos años, no podía pedir más, tenía una vida de ensueño.

Sintió una mano en su espalda, era su hermoso esposo, tomó la pequeña taza de porcelana que le ofrecía.

- No me canso de ver ese bello acto. - dije mirando al horizonte, y la pequeña franja de sol qué de el salía.
-  Sino te conociera lo suficiente diría que es el acto que mayor disfrutas. - dijo entre risas, haciéndome reír.

- Jason, Jason, supongo que por eso no pude encontrar mejor pareja.- paro de reír y me miro, para dejar un beso corto en mi mejilla.- Entremos, la cena se enfría. - dijo tomando mi mano y guiándome al comedor.

Mire a Jason comer, realmente no tenía apetito, tome mi teléfono, me alertaba un nuevo mensaje.

"Puedes decirle a Jason que tome las llamadas, es urgente, un beso linda"

Levante la mirada y él me observaba atento. - Tu padre, que tomes las llamadas, es urgente.- buscaba en sus bolsillos, y nego.- Lo dejé abajo, ya vuelvo.- se levantó e hice lo mismo, camine a la habitación dedicada a nuestra área de trabajo.

Abrí mi computadora y comencé a trabajar, me encantaba, aunque muchos lo encontraba aburrido, o complicado, ahora mismo me encontraba actualizando un par de aplicaciones para desarrollo de software, fácil, no?

- No comiste nada.- sin mirarlo seguí tecleando.- No tengo apetito, pero agradezco que hayas realizado la cena, comeré algo más tarde, tengo que terminar esto. - dije aún sin mirarlo, siempre estaba atenta a mi trabajo, nada absolutamente nada, me distraía cuando comenzaba a trabajar. 

Lo vi salir de la habitación, él volvería, siempre lo hace,aunque nunca logre nada. - Oye, que te parece una copa de vino, hay razones para celebrar. - tenía razón en dos cosas, él volvería y si, había razones para celebrar.

Estábamos cumpliendo todo lo que soñamos, teníamos un trabajo estable, y bastante bien pagado, estábamos solos en medio de la nada, eso fue lo que me emparejó a Jason, éramos iguales, nos gustaba la soledad, tranquilidad, el vino, entre algunas otras cosas.

Seguí trabajando, aún sin mirarlo. - Ahora no cariño, tengo trabajo.- dije.- Entonces no bajaras conmigo, Lauren?.-  pregunto, deje de escribir un segundo.
-  No, ya me divertí lo suficiente.- solté sonriendo, y continue en lo que estaba. - Jason, acaba con eso hoy, odio cuando no me dejan dormir. - solté.

Escuché la puerta cerrarse, y unos segundos después algunos golpes provenientes del sótano.
Negué sonriendo, me coloque audífonos, y al ritmo de Serguéi Rajmáninov, me dispuse a terminar mi trabajo, que solo era el primero de muchos más, que me llegaron el día de hoy.

Me gustaba la vida que tenía, no puede haber creado una mejor, estaba casi segura de eso.