Capítulo 6

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Vio como Camila bajaba del auto, que mierda estaba haciendo, ella no tenía porque irse.
Ella ya era suya, no es la primera vez que lo hacía.

Sus manos sudaban, su corazón se aceleraba que apenas podía escuchar sus propios pensamientos, no lo entendía, ya que en su primera vez, eso no le ocurrió, fue bastante sencillo, respiro hondo, saco el arma que escondía detrás de su espalda, metió el dedo en el disparador, fue bajando la mano hasta dejarla completamente extendida a su costado.

Antes de que pudiera apuntarle, Camila se giro y la abrazo, Lauren sintió por un segundo qué su corazón se había detenido, apretaba con fuerza el arma, que comenzaban a darle ligeros calambres, mientras que su mano libre como si mente propia tuviera, acariciaba la cabeza de Camila.

Poco a poco Camila se alejo mientras sonreía, acomodo el cabello de Lauren detrás de su oreja y le dio un beso en la mejilla.
Y tal acto hizo que Lauren lentamente volviera a guardar el arma, tan cuidadosamente para que Camila no se diera cuenta.

- No se que hubiese hecho sin ti, te debo la vida, te juro que no se como agradecértelo.- Lauren solo negó energéticamente, solo ella podía saber lo que pensaba en ese momento, pero lo que si se podía asegurar es que eso la había hecho sentir viva, como si eso tuviera sentido.

Camila subió los cuatro escalones de la cabaña y volteo. - Que te parece si mañana te invito una copa de vino, algo así como un trago por agradecimiento. - Camila la observó, estaba atenta a cualquier movimiento de Lauren.

- No es necesario. - dijo la ojiverde. - Por favor Lauren, es lo menos que puedo hacer, aparte también estas sola. - soltó Camila, la otra chica lo pensó un segundo. - Tengo mucho trabajo, ya tengo fechas de entrega, no puedo retrasarme. - dijo, Camila le sonrió.

-Programadora, puedes trabajar desde cualquier parte del mundo, no me dijiste, anda, no te molestare, también tengo que empezar a escribir, no me haría mal tu compañía . - la mujer se había quedado sin excusas, como resultaría eso, pensó, si pasó más tiempo con ella, podía tener más posibilidades de completar su caza, negó, Camila ya no era más una presa, esa mujer había provocado tantas cosas en Lauren que tenía curiosidad.

- Que dices?. - pregunto Camila. - Está bien, me gusta trabajar en silencio, te aviso, me pongo de muy mal humor. - la morena levanto la mano derecha con la palma extendida. - Seré silenciosa, lo prometo..- después de eso le lanzó un beso a la ojiverde y entró rápidamente.

Lauren miró unos segundos la puerta, esa mujer es una en millones, pensó, subió a su auto y se marchó, pensando en cómo una frágil y torpe mujer había logrado escurrirse entre sus manos.

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Lauren me tenía, como decirlo, atrapada, intrigada, pensaba mientras me quedaba dormida, había sido un día demasiado largo, pero de los más interesantes.

Me despertó un golpeteo constante en la puerta, me levanté y mire por la ventana, sonreí al ver el vehículo de Lauren, bajé corriendo, casi, apenas podía, me percate del ligero dolor en las costillas, arregle un poco mi cabello y abrí.

- Sueles trabajar tan temprano. - hizo una mueca. - Es la 1 de la tarde, Camila, creí que tenías que dormir más, pero no tanto. - dijo y la abracé, saludandola. - Bueno, dormí mucho, se cumplió el objetivo, no.- ella solo asintió, mientras me miraba las piernas, negué, solo traía puesta una camiseta larga.

- Pero pasa, iré a ponerme un pantalón. - dije. - Sobre eso, esta bien si vamos a mi casa, yo estaría más cómoda, algunas veces necesito otras cosas y bueno, tengo todo a la mano allá, aparte no creo que tengas servicio de Internet, o sí?. - tenía razón.

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