¿Simple? No. Es amor ➵ Larry's Version

14.

04 de Septiembre de 2019

Probablemente Harry ha perdido la razón.

Es una buena posibilidad, piensa él mismo. Es miércoles por al medio día y ha faltado al trabajo con la excusa de que se ha enfermado.

Arthur puede esperar un poco más, canta la voz en su cabeza, lo que realmente no puede esperar es la emoción que recorre el cuerpo de Harry al saber que está a punto de ver a Louis.

Claro que el chico de azules ojos no sabe nada de esto, eso arruinaría la sorpresa por completo.

Entonces si, tal vez si perdió la razón creyendo que hacer un picnic a mitad de la semana durante el horario de trabajo de ambos, sin ni siquiera una advertencia y con la factible posibilidad de que Louis se enoje mucho por esto era una muy buena idea.

Pero si puede defenderse un poco, aquel peculiar pensamiento apareció durante la madrugada mientras leía una novela romántica de época con la esperanza de conciliar el sueño rápidamente. Eso no sucedió cuando se retrató a Louis y a él mismo en una situación similar.

Así que no, no pueden culparlo por ser un auténtico romántico empedernido.

Harry camina por la acera con alegres pasos, audífonos puestos y una melodía que hace que se sienta muy feliz de estar vivo.

Puede incluso parecer ridículo ahora pero poco le importa. Supone que el amor a veces hace a la gente ser un poco demasiado ridícula.

Se dirige hasta el edificio de la editorial en donde su amigo trabaja. Harry piensa que está en buena hora como para interceptar a Louis durante el almuerzo y luego tratar de convencerlo de no volver. Él incluso compro dos boletos de autobús y dos más para una pequeña feria de circo en los alrededores de Londres, así que la vara esta elevada esta vez.

Sabe que será difícil, considerando que Louis es alguien responsable y muy minucioso para la organización, pero está bien, Harry sabe que puede ser muy persuasivo algunas veces, lo lograra.

Y si él no lo hace, tal vez las mini-pizzas y los emparedados de pavo que trajo sirvan un poco.

Unos minutos más de caminata bastan para que Harry este frente al umbral del lugar. Abre la puerta para darse paso en la recepción. Carol está ahí, lleva una coleta alta esta vez y mira su teléfono con un ceño aburrido.

Harry se acerca hasta el escritorio, deja la bolsa suavemente en el suelo intentando no romper nada.

-Alguien me dijo que aquí podría encontrar a la recepcionista más bonita de todo Londres.

Carol por fin alza la mirada.

- ¡Harry! -exclama con emoción.

La chica se levanta de su lugar y salta un poco para poder rodear a Harry en un abrazo por sobre el mueble que los separa.

Harry corresponde riendo.

-No sabía que vendrías, Louis no me dijo nada al respecto -comenta Carol, con su voz sonando ligeramente alta. Mientras se separa.

-En realidad, no lo sabe -ríe.

-Siempre estas sorprendiéndolo ¿no? -comenta feliz-. Eso es muy dulce, ojala Denis hiciera algo así por mí.

La mujer dice, una mueca triste apareciendo en su rostro. Harry se sorprende un poco abriendo los ojos.

- ¿Tú y Denis están saliendo?

Carol chilla de emoción -Quiero decir, tal vez. Me llevo a cenar la otra noche y saldremos de nuevo el próximo viernes. Supongo que estamos viendo si fluye, ¿me entiendes?