Pues es sobre nuestros personajes (Oc's o de algún shipp de su gusto) siendo padres primerizos y batallando con todo lo que esto es desde que lo tienen por primera vez hasta la adultez, todas las primeras veces que nuestros personajes tendrán a lo l...
Primera noche en casa: Sea como sea la primera vez en casa no siempre es fácil, cuando se trata de un recién nacido son noches de desvelo que parecen interminables (La mayor parte de los casos) y cuando alguien un poco más grande es quien llega a sus vidas tampoco es fácil esto va dependiendo en que circunstancias llego al hogar.
Pareja: VegasPete
Si alguien le hubiera dicho que estaría a mitad de la noche en una tienda de 24 horas comprando fórmula de bebé, Vegas le hubiera disparado sin dudarlo. El joven de la caja lo miro.
—Primera vez —le pregunto al ver como llevaba varias marcas de fórmula.
Vegas asintió. La verdad es que Vegas se estaba arrepintiendo de su decisión, desde hace dos horas Venice no paraba de llorar, Pete había revisado que todo estuviera en orden, fue cuando concluyó que lo que él bebe pedía era comida, solo había un detalle, no habían comprado formula al regresar del hospital. Por eso ahí estaba comprando la dichosa fórmula para bebés.
—Las primeras veces siempre son difíciles —habló el joven —A veces las cosas más obvias suelen ser las que necesitan —le extendió la bolsa con las fórmulas —La de lacta blanca es excelente para recién nacidos.
Vegas le agradeció y salió de ahí, condujo hasta la casa de la segunda familia y entró, desde la sala se podía escuchar el llanto, se acercó a la cocina donde provenía el llanto. Pete estaba parado caminando de un lado a otro mientras mecía a Venice, el ex guardaespaldas vestía unos pantalones de chándal y una camisa de Vegas. Venice vestía un entero de color vino.
Había una olla en la estufa.
—Aquí está —habló y sacó la lata blanca que le había dicho el muchacho de la tienda.
Pete corrió a la barra donde había dejado la lata. Con algo de dificultad la abrió, ya que seguía cargando a Venice. Me miró y yo lo miré, abrí mis ojos con asombro al ver cómo me daba al bebe que seguía llorando.
—Agárralo así —Pete acomodo al bebé en mis brazos poniendo una de mis manos en su cabeza.
—Pete no.
—Solo serán unos momentos —dijo.
Mire al bebé en mis brazos que seguía llorando, dios, ¿no se cansaba de llorar?, que buenos pulmones tenía el mocoso.
—Ya, ya, deja de llorar demonio.
—Vegas no lo llames así
Solté una risa, Pete se movía por la cocina, sacó un biberón de la olla y lo dejó en la barra, Macao apareció en la estancia, estaba soñoliento, el llanto del bebé lo había despertado.
Agarró al bebé y lo meció mientras esperaba el biberón, luego de minutos y que Pete derramara un poco de leche en su muñeca, le hizo un ademan a Macao de que le diera a Venice. Lo acostó en sus brazos y le dio el biberón haciendo que por fin dejara de llorar.
Los tres suspiramos aliviados, Venice acabó el biberón, Pete lo puso erguido y con la cabeza en su hombro y le dio unas palmaditas en la espalda para liberar los gases. Macao regresó a su habitación luego de ayudar a Pete a hacer más biberones por si Venice tenía hambre luego.
Con Pete regresamos a la habitación, Venice estaba profundamente dormido, como si no hubiera hecho un escándalo hace unas horas despertando a todo el vecindario, Pete lo recostó en medio de la cama con la mayoría de las almohadas alrededor.
—Mañana saldremos a comprarle una cuna —dijo Vegas.
Pete asintió y se acomodó al lado derecho mientras que Vegas al lado izquierdo, y solo bastó que sus cabezas tocaran la almohada para que ambos cayeran dormidos luego de horas despiertos, y así fue cómo sobrevivieron a la primera de muchas noches de desvelo que les esperaban.
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En algunos escritos Venice será hijo biológico del VegasPete y en otros seguiremos el origen de la novela.
