New Father-Tober

Dia 3: Primer baño/Primera comida juntos

En caso de tratarse de un recién nacido el primer baño siempre es un caos y una aventura que algunos recordarán por mucho tiempo pero cuando se trata de un pequeñx un poco más grande la primer comida todos juntos puede resultar o muy bien o muy mal.

Porsche

(Aquí hare un poquito de trampa, ya que será una escrito de Porsche con un pequeño Porchay, sabemos que para Chay, Porsche es su figura paterna)

Porsche y Porchay se habían quedado solos a muy temprana edad, al ambos ser menores de edad quedaron a cargo de su tío, aunque este no fuera el más apto para cuidarlos.

Porsche acaba de llegar de la escuela, soltó un pequeño suspiro al no ver a su tío, casi nunca estaba en casa, pero lo que más le preocupa es no ver a su pequeño hermano de tres años, subió corriendo las escaleras, abrió la puerta que era la habitación de Porchay, su hermanito estaba totalmente dormido en la cuna.

La verdad era que Porchay era un bebé tranquilo, encendió el monitor de bebé como muchas veces su madre hizo y llevó el receptor, por si su hermanito despertaba mientras iba a la cocina, Chay tendría hambre cuando despertara. Con ayuda de una silla, Porsche sacó las cosas que necesitaría, como los biberones de Chay y la papilla.

Para el saco una comida congelada y con sumo cuidado la calentó. Cuando se aseguró de tener todo listo, agarró su mochila, el monitor y regresó a la habitación donde estaba Chay, ahí había una mesa donde se dedicó a terminar su tarea.

Pasaron dos horas hasta que se escuchó el llanto de su hermano, Porsche dejó sus cosas y fue con su hermano, primero le reviso de que no fuera el pañal, al ver que este está limpio intuyo que Chay quería comer.

Con cuidado lo cargo, así como su mamá le enseñó y bajó con él a la cocina, sentó a Chay en su sillita, agarró la papilla con una cuchara.

—Abre la boca Chay, comida —dijo Porsche.

Su hermano abrió su boquita para recibir la cucharada, soltó una risita batiendo así su ropa, Porsche le sonrío de regreso, era la primera vez que alimentaba a Chay solo. Después de darle de comida a Chay, él se comió la suya.

—Ven, vamos a darte un baño —dijo cargando otra vez a su hermano. Este tenía restos de comida en su ropita.

Dejó a Chay en el suelo un momento y fue al armario para sacar un conjunto nuevo, lo dejó en la cama y volvió con Chay, este estaba jugando en el suelo con unos juguetes.

Su hermanito se paró y caminó hacia él extendiendo el juguete, Porsche lo agarró y con la otra mano agarró la mano de Chay para ir al baño para tomar una ducha.

Fue una osadía para Porsche bañar a Chay, ya que esta igual era su primera vez, hizo un desastre, el piso quedo todo mojado de agua que Chay no dejaba de salpicar y casi le causa algo cuando el shampoo estuvo a punto de entrar en los ojitos de su hermano.

Porsche consideraba una hazaña haber bañado a su hermano, lo seco, le puso su pañal y su pijama, para luego dejarlo en la cuna con unos juguetes mientras el arreglaba sus cosas y se bañaba igual.

Porsche regresó y cargo a su hermano algo soñoliento, iban a dormir juntos en la habitación de Porsche, este puso almohadas al lado izquierdo de Chay y se subió colocándose en el lado derecho, con la sábana los topo a los dos listos para dormir.

—¿Dode esta mama o papa?.

La pregunto congeló a Porsche, no supo qué contestar así que solo abrazo a su hermanito, las lágrimas cayeron sin poder evitarlo, Porsche acarició los cabellos de Porchay, el cuidaría a su hermanito, sin importar que.