-No tengo nada que decir en mi defensa-
Fueron las palabras de aquel hombre al finalizar el juicio, no se defendió, no objetó, no ofreció ninguna razón, no respondió a ninguna pregunta...
Era como sí, su alma hacía mucho que hubiera abandonado su cuerpo, ya solo quedaba un cascarón vacío, algo que no tenía ni un atisbo de humanidad, no había luz en sus ojos, solo obscuridad, su mirada perdida y su falta de interés por lo que le rodeaba... para todos en la corte aquello era interpretado como una señal de su falta de empatía, pero para mí era completamente distinto.
Yo sabía por lo que pasó cuando estuvimos en Estrabas, yo pude comprender que aquella manera de actuar no era más que la respuesta de una mente que se había visto perdida y consumida por los traumas, por todas las atrocidades por las que tuvo que pasar mientras estuvimos en aquel planeta. Sabía que eso era lo que ocurría y aun así permití que abrieran aquella caja donde tenía encerrados esos recuerdos dolorosos.
- Señor Kim Ashim, ¿recuerda lo ocurrido en el planeta SO2-CH4-CN– ? ¿Recuerda lo que hizo?, debían evacuar, ¿Recuerda? ¿Podría intentar explicarnos lo que pasó en aquel momento?-
No había ninguna respuesta por su parte hasta que tuve que subir yo a declarar.
- No puedo decir con exactitud qué fue lo que ocurrió, debíamos evacuar y teníamos que asegurar los anclajes de nuestros compañeros, solo recuerdo que, caía, sentía que perdía el equilibrio cuando comenzó a despegar la nave, pero era normal, siempre pasaba al inicio de los despegues, por eso tenemos los anclajes, porque no estamos seguros sin ellos hasta que se cierren por completo las compuertas. Lo que recuerdo después es estar cayendo y no ver ningún cable de conexión conectado a mi traje, posteriormente como un golpe muy fuerte y me desmayé, creo, y estaba de nuevo en Estrabas, pero, estaba solo-
Al oír la palabra Estrabas, por fin se pudo ver algo en su rostro, era miedo, un muy profundo miedo, comenzó a sollozar, era como si de pronto todo le estuviera viniendo a la cabeza, se cayó de su silla y comenzó a gritar pidiendo ayuda, con la mirada perdida, gritaba y de pronto comenzó a convulsionar, sus ojos se pusieron en blanco junto con su piel que comenzaba a tornarse de color pálido.
Entraron hombres vestidos de blanco para intentar reanimarlo, pero era, al parecer, imposible y se tuvo que suspender la sesión. Lo llevaron al hospital, pero no respondía. Al final, se declaró que sufrió de muerte cerebral, su corazón seguía latiendo, pero su cerebro ya no respondía a ninguna clase de estímulo.
Sigo compadeciéndome de él, aunque sé que no debería, pero no puedo evitar sentir lástima, supongo que algunos llevamos mejor las experiencias traumáticas que otras personas, él no supo cómo lidiar con todo lo que vivimos, y eso terminó llevándolo a un camino muy obscuro, tanto así que esa misma obscuridad invadió todo su ser hasta tragárselo entero. Deseo de todo corazón que esta vez podamos completar la misión que se nos ha encomendado sin que vuelvan a ocurrir tantas desgracias.
No me queda mucho más que decir sobre lo ocurrido este día... es tarde ya, creo que iré a mirar las estrellas antes de cenar.
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Estrabas
Science FictionSe trata de un cuento corto que relata un capítulo de la vida de Trinidad Florencio, astronauta cuya vida se verá comprometida debido a un terrible accidente durante el despegue de su nave en un planeta hostil y repleto de monstruos de pesadillas. S...