Violencia en el noviazgo

2.- Chantajear

Mantengo una animada conversación con Ochako e Iida, estamos en la puerta de la escuela hablando de anécdotas, más específicamente, lo que hicimos ayer.
Ellos me hacen compañía mientras yo espero a los chicos en uno de los raros días en los que asisten a la escuela.

—Y eso me paso ayer—concluyó Ochako con una sonrisa adornandole la cara.

—Es algo irreal que te hayas peleado contra un perro por 5 dólares—le digo, en cierto tono divertido.

—Solo podía comer uno de los dos—afirmó determinadamente mientras movía la cabeza.

Ambos soltamos una carcajada.

—¿Y que hiciste tu después de la escuela, Iida?—le pregunto, al notar que no ha participado y tampoco ha mostrado alguna señal de prestar atención al tema.

Mi amigo no respondió mientras miraba a la nada, como en trance.

—¿Iida?

—Creo que es importante que sepas algo de Todoroki y Bakugou...—suelta de pronto, volteandome a ver.

Le iba a preguntar el que, cuando sentí mi celular vibrar, me están llamando.

—Un momento—pido y saco mi celular—hablando del rey de Roma, son ellos—dije y respondí, alejándome unos pasos de mis amigos para poder hablar.

—¿Hola?

—Ya salimos, estamos en la otra entrada—dice la voz de Katsuki.

—Oh, okay, ahora voy.

Cuelgo el teléfono y lo guardo en mi bolsillo.

—Ya me voy chicos, hablamos luego—aviso en cuanto vuelvo a su lado.

—Pero...

—No importa, Iida. Lo que se que me quieras decir estoy seguro que puede esperar.

—No lo creo...

—Me lo cuentas luego, adiós— me despedí y eché a correr a la otra entrada.

Cuando llegue encontré a los chicos de brazos cruzados, esperando por mi para poder irnos.

—Hasta que llegas, ¿Muy pesado el camino o qué?

—No, solo estaba hablando con mis amigos.

—Bueno, pues larguémonos de una vez, ya tengo hambre.

Asiento con la cabeza y empezamos a caminar en total silencio.
Al final nos terminamos deteniendo en un restaurante—muy frecuentado por nosotrosーde comida rápida, pues moríamos de hambre y no alcanzaríamos a llegar al departamento para luego tener que preparar algo.

—Parece que hay falta de empleados, entonces tendremos que pedirlo desde allí—les informo, apuntando a una fila muy larga.

—Tú ve a ordenar la comida y nosotros apartamos una mesa en lo mientras—sugiere Todoroki.

—La última vez que vinimos quedamos que ustedes ordenarían la comida para la próxima—respondí, frunciendo el ceño.

—Pero, la última vez había meseros.

—¿Y eso qué?

—¿De que o qué?—respondió Bakugou—¿Acaso eres tan importante como para no poder ir?

—Claro que no, si puedo, pero...

—¿O acaso necesitas que alguien pida por ti solo por que tienes vergüenza de formarte y hablar con un desconocido?

—Que no, pero...

—Entonces ve a pedir y deja de hacerte el especial—dijo y fue en busca de una mesa, sin dejarme rechistar si quiera.

Suspire y mire la larga y lenta fila, solo quería pasar un rato agradable con al menos una de mis parejas y luego comer.

—Tu tranquilo—dijo Shoto—si no quieres puedo ir yo.

—Gracias, Sho...

—Pero, recuerda que no te lo pediríamos si no fuese totalmente necesario.

¿Por qué me hace esto siempre? Me abre una salida y luego la cierra con comentarios de ese tipo, luego si no cedo sentiré remordimiento, pero si cedo... No lo se.

—No me importa, de verdad—le digo—tu quédate con Kacchan, yo ahora voy con ustedes.

—Si no tienes problema está bien—me dijo para darme un beso en la frente y luego irse a sentar.

En cuánto se fue volví a mirar la fila, desanimado.

No importa, lo hago por ellos.

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Ceder al chantaje no hizo mas que dejarles claro a Katsuki y Todoroki que podían seguir usándolo, y con propósitos más grandes que ir a pedir una comida.

En fin, espero que les haya gustado.

Tomen agua, duerman temprano y coman bien, los quiero ❤.

Frase random;;

Es extraña la ligereza con la que los malvados creen que todo les saldrá bien
Víctor Hugo

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