DxD Overlord: la búsqueda de Momonga para no morir en ero-world (Hiatus)

Capítulo 92: Presione el botón 'nombre aleatorio' en su lugar

Lady Phenix se tambaleó un poco en el acto.

Se llevó una taza de porcelana a los labios y tomó un pequeño sorbo.

En el lado opuesto de una mesa de cocina, Miki Hyoudou hizo lo mismo.

"..." Lady Phenix dejó escapar un pequeño sonido que fue como un suspiro y un sollozo en uno.

Miki Hyoudou cerró los ojos, pensó en algo, sacudió la cabeza y bajó la taza de porcelana. "Esposo, querido, levántate del suelo ..."

Gorou Hyoudou estaba actualmente en cuclillas en el piso de la cocina, debajo de una encimera de cocina en lo que era el lugar óptimo para mantenerse a salvo durante un terremoto, teniendo en cuenta la robustez del mostrador hecho de piedra y el hecho de que el resto de la casa estaba más o menos nivelada y, por lo tanto, no era adecuada como cubierta. Los ojos del hombre estaban vidriosos y su rostro estaba pálido, y no parecía que hubiera escuchado a su esposa.

Lady Phenix tomó otro sorbo de su té que tenía una fina capa de polvo gracias a las explosiones que habían devastado la casa y roto el yeso del techo. Sin embargo, la mujer no pareció notar nada de eso.

Miki suspiró, se abofeteó las mejillas para concentrarse y dejó su taza de té. "Entonces ... ¿Eres responsable de secuestrar a nuestro hijo, hacer que cambie su nombre y luego hacer que se involucre con tu hija?"

"... Supongo". Los ojos de Lady Phenix estaban vidriosos y sin vida.

"... Me gustaría recordarles que el secuestro es contra la ley".

"No contra la ley del Inframundo, cuando se hace a los no demonios ..." Lady Phenix seguía mirando por la ventana parcialmente destrozada y la batalla que se libraba afuera, aunque cuánto de ella veía era otro asunto por completo, ya que parecía mirar sólidamente más allá de la lucha y la guerra.

"¡Pero contra la ley japonesa!" Miki puso su dedo contra la mesa. "Además, si de alguna manera adoptas a nuestro hijo por la fuerza y lo haces casar con tu hija, ¡eso sería incesto! Y-"

Lady Phenix se desconectó de la explicación molesta e indignada de Miki sobre cómo exactamente sus acciones estaban en contra de la ley, el sentido común, el comportamiento honorable, etc.

Un cuerpo voló contra la ventana parcialmente rota y golpeó, dejando un desorden sangriento en el piso de la cocina y causando que se formara espuma blanca y rabiosa de las comisuras de la boca de Gorou cuando el asalariado japonés comenzaba a romperse bajo la embestida del horror y el gore.

Miki miró el cadáver, aunque sus ojos se habían vuelto tan vidriosos como los de Lady Phenix. "Por favor, quítate los zapatos cuando entres en un edificio".

El cadáver no pudo cumplir, por lo que Miki suspiró. "Los jóvenes en estos días ... ¿Oh?"

La puerta de la cocina se abrió, o más bien una criada levantó la puerta de su marco agrietado y puso la puerta de madera a un lado.

"Por favor, discúlpeme, señora Hyoudou". Una sirvienta alta de cabello blanco con un número 'tres' tatuado a un lado de su cabeza se curtió un poco hacia los ocupantes de la habitación antes de caminar hacia el cadáver, produjo un recogedor y una escoba, y deslizó el desorden gorey en el recogedor antes de retirarse de la habitación y colocar la puerta rota de nuevo en sus bisagras.

"Ah, esas chicas están creciendo tan lindas ..." Miki asintió, orgullosa del crecimiento de las extrañas sirvientas que había estado dando clases particulares. "Pronto se graduarán como amas de casa adecuadas ..."

"... ¿Estás enseñando a los ángeles a ser amas de casa?" Lady Phenix preguntó a medias mientras bebía distraídamente el té de la taza que se había quedado sin ella y estaba llena de polvo de yeso.