Capítulo 24: Resiliencia

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—Y mi padre está en prisión por ello...

Aquellas ocho palabras tardaron en registrarse en la mente de Hal, para cuando reacciono, Barry cubría su rostro con sus manos, no como un acto de vergüenza, más bien para evitar mirar la reacción de desconcierto por parte de su pareja

Los labios de Hal fueron los primeros en reaccionar

—Lo lamen... —comenzó Hal, antes de ser cortado abruptamente por Barry
—¡Él no lo hizo! —exclamó el rubio, descubriendo su rostro, mirándole desafiantemente
—Pero me acabas de decir que tu padre está en prisión por ello
—Y–Yo recuerdo esa noche, mi mamá, yo...

Eso era todo, su boca era un balbuceo sin sentido incapaz de darle orden a sus palabras

—Era una tormenta y yo, no les tenía miedo en ese entonces, tome mi linterna y baje a la sala, quería seguir leyendo mis cómics de superhéroes. Claro que mi madre me escuchó y bajo a ver que sucedía, creí que esta en problemas cuando me encontró acurrucado en el sofá con mi manta y mi linterna; pero mi madre, ella eran tan dulce y amable, me dijo que subiera a mi recamara y que me llevaría una taza de chocolate caliente para que volviera a dormir...

Lo que sea sucedió después, Hal comprendió que era el recuerdo más doloroso, la estrangulada forma en que la voz de Barry se quebraba, como si el aire no entrara en sus pulmones, sus manos temblaban y en sus ojos, vivía la amarga distancia, él ya no estaba en su hogar, con Hal y los gemelos; estaba en aquella noche en casa a punto de ver morir a su madre.

El castaño envolvió en sus brazos a Barry y lo recostó en su pecho, repartió reconfortantes caricias en su espalda para que Barry sintiera el calor de su contacto

—Shhh —le calmo— estás aquí Barry, estas conmigo en casa, estás a salvo

Eso pareció calmar al rubio, que tras varias dificultosas respiraciones, continuo

—A penas iba a mitad de las escaleras cuando escuche a mi madre gritar, mi padre salió de su alcoba y corrió tras de mí, cuando llegue a la cocina, alguien apagó las luces pero pude ver la silueta de un hombre, escuche la puerta trasera ser abierta y de pronto, silencio, mi padre pasó a mi lado y auxilio a mi madre, que estaba tendida en el suelo, la sangre se arremolinaba a su alrededor, y en su pe–pecho estaba clavado un cuchillo —Barry se alejó de Hal para mirarle directamente a sus ojos— lo siguiente que sé, es que la policía se lleva a mi padre, los forenses y paramédicos hacen un desastre en la escena y por mas que les digo lo que sucedió, que mi padre no asesinó a mi madre, no me creen, nadie toma declaraciones, informes o hacen su maldito trabajo. El tío Jay me recogió en la estación de policía, el no dudo de mi palabra, pero solo él, no los forenses, policías, el jurado o el juez, para ellos solo era sólo un pequeño niño manipulable encubriendo a su padre

Lo perdió todo en una noche y no pudo hacer nada para impedirlo. Frustrado se talló con los, en un vago intento para borrar las lágrimas, Hal permaneció en silencio, viendo el lío tembloroso que era Barry

—Se lo que estás pensando —hablo Barry— es lo que todos pensaron... ¡Por Dios Hal! ¡Solo di algo! ¡Cualquier cosa!, ¡Di lo ingenuo que soy por creer en un ase...
—Te creo

El silencio cayó sobre la habitación, cualquier sonido del exterior se perdió y el universo dejó de expandirse, solo para convertirse momentáneamente en ellos, como la única existencia real que lo componía.

Tomo el rostro de Barry entre sus manos, limpiando el amargo rastro de lágrimas que caían con pesar

—Podrías decirme que el cielo es rojo y te creería
—Hal...
—Podrías decirme que el mar es dulce y los ríos salados; que el sol sale de noche y la luna de día; desde que te conocí, incluso como un niño molesto, —le dio una suave sonrisa, recordando sus momentos de niñez— sabía que eras alguien amable, dulce y sincero, y es esa honestidad una de tus mayores cualidades, tomas la más cruda de las verdades y lo conviertes en una soplo de aire fresco, incluso liberador
—¿Lo dices solo porqué soy tu novio? —su voz temblorosa delató su angustia
—Lo digo porque te amo —dieciséis, diecisiete latidos...— y tengo fe en ti, creo en tu palabra
—Mi palabra, ¿Solo eso?
—Es lo único que necesito

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⏰ Última actualización: Oct 08, 2022 ⏰

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