Mi reina {Sukuna y tú}

Capitulo 22

~{ATENCIÓN}~
Contiene un poco de spoiler del manga, recomiendo leerlo. Disfrutad <3

...

Sukuna se apoderó de su recipiente mientras el resto de personas no sabían que hacer. Entonces antes de que Gojo protegiera a sus alumnos soltó

S: se han llevado a ____- todos lo miraron sin esperarse eso

K: como podríamos saber que dices la ver- antes de que pudiera seguir, el la miro con aquella mirada, aquella que hicieron que todos menos Gojo, lógicamente, se asustarán

S: crees que mentiría hablando de ella?- su voz sonó grave mientras sus puños se volvían blancos al apretarlos.

Y desapareció al segundo, dejando boquiabiertos a todos.

El de tatuajes aprecio en el cuarto de ella y vio la ventana abierta

S: oh que ganas de matar a ese hijo de puta!!- río como loco mientras se subía a la ventana, para buscarlo. Quería matarlo, exterminar cada parte de su cuerpo, y maldecirlo por tocarla, por llevarse a su reina como si le perteneciera, solo el podía hacer eso

F: Sukuna!- el nombrado se paró en seco, girando un poco su cabeza y le miró de reojo con esa sonrisa escalofriante

F: te ayudaremos a encontrarla- se río de aquella forma de nuevo

S: solo yo puedo encontrarla- dijo subiendo su pelo, haciendo resaltar sus marcas

F: entonces sabes donde esta?- dijo y el río de nuevo, como si le hicieran la pregunta más estupida de todas

S: claro que lo se maldito Megumi, me ves tan estupido de no saber donde está ____?- dijo burlón

F: eso significa... con esas marcas también sabes donde se encuentra?!- el pelirosa se río al ver lo rápido que lo averiguo y de un salto salió de la habitación, buscándola mientras el pelinegro se iba con Gojo y Kugisaki para intentar salvar a ____, pero seguramente sería demasiado tarde ya que Sukuna lo haría mucho más rápido.

...

Mire a mi alrededor de nuevo, tenía miedo y no quería llorar. Porque verían lo débil que soy y eso me dejaría mucho más vulnerable.

Entonces apareció como un portal bastante grande. Desde donde salieron dos maldiciones. Una tenía un ojo enorme y parecía bastante enfadado, y la otra era como una especie de maldición echa de madera y con un solo brazo.

Me miraron al notar mi mirada sobre ellos y mi voz se apagó más de lo que estaba

M: mirad lo que traje!!- me señalo como si yo fuera un trofeo y note mi corazón latir rápido por el miedo de mis venas.

El de un solo ojo sonrio y el de madera empezó a hablar raro, pero yo no lo entienda aunque el resto parecía que si lo hacía.

El bajito se acerco a mi y yo retrocedí lo más que pude. Me miró y vi como humo salía de su cabeza, sin pensarlo susurre

_: te pareces al monte Fuji...- su ojo se llenaron de ira y otros dos agujeros de ambos lados de su cabeza sacaron humo

??: como?! Otra vez me comparan con el monte Fuji?!- antes de me pudiera tocar, Mahito intervino

M: no toques el juguete de Sukuna, porque se enfadará más- dijo burlón y se río de nuevo, trage saliva y se alejó de mí, volviendo a tapar los agujeros que acababan de destaparse.

Cuando se fueron de mi alrededor y se dirigieron hacia donde estaba el pelinegro echado en la hamaca, mire mejor donde estaba.

Mis ojos se sorprendieron al ver un pequeño pulpo rojo o lo que parecía un pulpo en el agua. Este también llevaba tatuajes negros, asique deduci que era otra maldición y suspire -como llegue hasta aquí?- me dije cerrando los ojos y agachando la cabeza, para que el sol no me molestase en los ojos.