Transporte | SunKi

Graduación

Paso número trece y último: 

Una semana antes de la graduación y los de último año estaban nerviosos y emocionados.

Unos ya estaba completamente listos para esta; traje, maquillaje, transporte, mientras que otros estaban volviéndose locos por encontrar a tiempo un traje decente.

Kim Sunoo era de esos.

– ¡Chaewon! — Grito por tercera vez mientras caminaba de un lado a otro por su clóset rezando por encontrar algo.

– Deja de gritar, estoy a lado — Paso molesta percatandose al instante del raro comportamiento de su hermano menor — ¿Qué haces?

– Necesito tu ayuda. No tengo un traje, si no tengo traje no iré a la graduación y si no voy a la graduación...

Chae tomo los hombros de Sunoo para detenerlo mirandolo sorprendida por la rapidez con la que había hablado y más por lo nervioso que se encontraba. No dijo nada más y se dedicó a ayudarlo en la búsqueda del traje o al menos algo que sea útil y lindo para llevarse al último día.

Sunoo nunca había ido a una graduación, siempre decía que era ridículo ir un día más al colegio solo para "festejar" que habían logrado salir de ahí para pasar a un nivel superior cómo es la secundaria, preparatoria y, en este caso, la universidad.

Las únicas fiestas a las que había ido en toda su vida fueron aquellas que organizaba la familia por un día especial: bodas, bautizos, cumpleaños, aniversarios, etcétera, las cuales habían dejado de realizar poco después de cumplir sus diez años.

Ahora sabía porque odiaba ir a estos eventos.

Su hermana llegó corriendo a su habitación de nuevo después de avisar que iría a la habitación de sus padres a buscar una solución, la cuál encontró exitosamente.

– Me debes cinco salidas al cine — Sonrió con una bolsa negra en manos la cuál aventó a la cama del contrario.

Primer problema resuelto.

•••

Dos horas antes de la ceremonia de graduación de los de último año.

La parejita esperaba pacientemente a su mejor amigo en su sala de estar, habían decidido quedarse una noche antes en la casa de este para que el camino al colegio al día siguiente fuera más corto para quien los llevaba y así evitar que llegarán tarde.

– ¡Kim, no tenemos todo el día! — Jungwon comenzó a apurarlo, odiaba la impuntualidad y el hecho que hicieran todo un minuto antes.

– ¿Podrías dejar de gritar? — Salió de su habitación molesto, aún con el cabello desordenado pero vestido completamente.

Ambos chicos miraron sorprendidos al castañito, nunca la habían visto vestido de esta forma. Siempre vestía suéteres grandes, camisas largas y pantalones para nada pegados, y ni mencionemos el maquillaje que cargaba, lo hacía ver cómo un príncipe realmente.

– ¿Qué? ¿Vieron un fantasma o...? — Cruzo sus brazos por la repentina reacción de sus amigos.

– ¿Quien eres y donde dejaste a mi loquito del centro? — Pregunto Jay recibiendo un cojin en la cara haciendo que cayera.

Sunoo rodo los ojos y regreso al baño a peinarse, viendo cómo la parejita caminaba detrás de él quedandose justo frente a la puerta.

– Me acabas de humillar ¿Estás conciente de eso? — Dijo Jay rompiendo el silencio para nada incómodo que se había formado.