One Nation, One Team - USWNT

Una inocente broma

Pov. Lindsey Horan

Aqui vamos de nuevo, 5AM, un clima bastante esperanzador en la cálida Australia y mucha energia, parece buen momento para ir a despertar a todas ya que tenemos que estar desayunadas y listas en una hora. Me estiré y me dí una ducha rápida antes de ir de habitación en habitación, sabía quién sería mi primera víctima... Mi roommate favorita, Megan.

Cuando estuve lista me dirigí hacia su lado de la habitación y después de asegurarme de que estaba profundamente dormida tomé una confiable corneta que compré para hacerles esta broma y la hice sonar tan fuerte como pude haciendo saltar a Megan.

— Lindsey... Te odio — La oí decir con un gesto poco amable en su cara.

— Me amas, buenos días loser — le sonreí y no esperé a recibir respuesta de ella cuando salí de la habitación para jugarles la misma broma a las demás, o al menos a las que no haya despertado con el ruido.

— Buenos días Alex — saludé a la ojiazul que me veía lista desde su puerta con una taza de lo que parecía ser chocolate.

— Hey, buena broma para empezar el día — dijo ella con una sonrisa mientras movía el contenido de su taza con una cuchara, asentí y me dirigí a la siguiente habitación, podía oler el amor en el aire... Era la habitación Preath, decidí entrar y sorprenderlas, no sabía que luego me iba a arrepentir de eso.

— ¡Buenos días Losers! — saludé con mucha emoción cuando entre intempestivamente a la habitación de Tobs y Chris, la cual compartía conmigo originalmente pero Press fué muy astuta y negociamos un cambio de habitación, no tuve problema porque adoro hacerle bromas pesadas a Megan, no obstante, no encontré a mis amigas... No, encontré a un par de monstruos que se comían las bocas mutuamente sin pudor alguno mientras se movian sospechosamente bajo la colcha.

Quise moverme y huir pero no pude, cuando notaron mi presencia, Chris se cubrió totalmente con la colcha para que no viera su rostro y Tobs me miró con disgusto.

— Debí saber que harías esto y asegurar la puerta, te diré algo... — Ella se levantó, llevaba una camiseta que cubría parte de sus muslos, tuve miedo y cerré los ojos cuando se acercó para tocar mi hombro. — No me enojaré contigo si te vas ahora y si olvidas esto, jamás pasó — asentí silenciosamente y me dirigí afuera de la habitación, en ese momento supe que las bromas habían acabado por hoy o al menos las bromas para Preath si.

Pasó un momento y luego de procesar lo sucedido me dirigí a la habitación de Alyssa, era nueva en el equipo y creo que tratarla como a las demás miembros la hará sentir parte del equipo no solo en el campo, este será su primer mundial con la selección y tenemos que estár más unidas que nunca.

Abrí la puerta intempestivamente y me acerqué a la cama donde se encontraba durmiendo plácidamente, completamente cubierta con su colcha de balones de Soccer, muy linda, lástima que no seguiría así por mucho tiempo, tomé la corneta y la hice sonar tan fuerte cómo pude una vez más pero Alyssa no sé despertó, luego de intentar un par de veces más decidí quitarle la colcha y me llevé una gran sorpresa, eso no era Alyssa eran almohadas acomodadas de forma engañosa.

— El estafador resultó estafado, buenos días Lindsey — escuché su voz detrás de mi y ahí estaba, parada en la puerta del baño que había en su habitación.

— Espera... ¿Quién te dijo? — pregunté entrecerrado los ojos de forma juguetona mientras me acercaba a ella.

— Morgan, al parecer tenía razón, buena suerte la próxima vez — ambas reímos y salimos de la habitación rumbo al desayuno.

Pov. Alex Morgan

Luego de haber desayunado y charlado un poco por la mañana, estábamos en el autobús rumbo al entrenamiento del día, extrañamente había más silencio de lo habitual, Tobin parecía distraída igual que Press, Megan llevaba puestos sus audífonos, Kristie se veía diferente hoy, cómo si hubiera llorado, Sammy estaba consolando a su hermana, Rose estaba durmiendo y Lindsey solo veía la ventana fijamente, luego de pensarlo unos segundos decidí obviar eso o al menos intentarlo, después de todo, sabíamos que el entrenamiento sería algo extremo ya que teníamos nuestro primer juego cerca y nuestro contrincante era uno de los fuertes, se trataba de Australia, una vez más tendríamos que enfrentarnos en el campo y era crucial que saliéramos victoriosas de ahí.

Al bajar del autobús caminé junto a Kelley hacía las bancas, nuevamente todo estaba en silencio hasta que Megan me habló.

— ¿Soy yo o están demasiado calmadas? — asentí de acuerdo y miré a Kelley para saber su opinión.

— Puede que yo haya visto y oído algo pero no deben decirle a nadie si preguntan quién se los dijo — ambas asentimos ante las condiciones de O'Hara y nos sentamos las tres en la banca para que nos contara mientras nos poníamos los botines.

— Bien, hablé con Press esta mañana justo antes de salir del hotel, dijo que Lindsey entró a su habitación para hacerles una broma y que ella y Tobs estaban a punto de tener... — dejó de atar sus cordones un segundo para vernos los ojos — ya saben — se encogió de hombros y prosiguió a colocarse el otro botín — entonces se avergonzaron y al parecer no están de buen humor ahora.

Ambas asentimos aún sin procesar la información que nos dieron, es decir, sabíamos que Christen y Tobs eran más que amigas o eso parecía pero creo que no estaba lista para oír eso. No me importaba que Tobin saliera con alguien más, es decir, ya estoy casada... ¿Por qué me molestaría? Pero tengo otra pregunta... ¿Por qué se enamoró de Christen?

— Alex... ¿Todo en orden? — suspiré, asentí y esbocé la mejor sonrisa que pude para darles tranquilidad a mis amigas, quienes no creyeron mi gesto del todo,  solo creo que en mi mente y en mi corazón no todo estaba en orden.

Cuando finalmente estuvimos en el campo, Vlatko se acercó a nosotras junto a su equipo técnico.

— Buenos días señoritas, nuevamente estamos en un mundial. — todas aplaudimos y sonreímos cómo si todo volviera a ser normal por un momento al oír eso. — De nuevo quiero felicitarlas por cada esfuerzo, a todas ustedes, tengo que decirles que para el partido que tenemos en dos días necesitamos que todas estén al máximo, el grupo que nos tocó es bastante fuerte pero nosotros también lo somos, así que vamos a hacer que este mundial sea nuestro, yo creo que ganaremos si trabajamos duro. — Era agradable escuchar las palabras de Vlatko, al igual que él yo también creo que podemos ganar, solo necesitamos esforzarnos y superarnos  a nosotras mismas.

Luego de haber hecho algunos ejercicios terminamos el entrenamiento con un pequeño juego, nos dividimos en 2 equipos y jugamos entre nosotras, usualmente el equipo perdedor compraría la cena pero en esta ocasión decidimos que el equipo perdedor haría un turno de servicio social en los próximos días libres, obviamente sería documentado y muy divertido.

— ¿Offside? — preguntó Pugh mientras suspiraba con frustración luego del sonido del silbato.

— Lo siento Mallory, tenemos que estar alertas, estas cosas no deben suceder en el campo de juego — Dijo Vlatko tratando de animarla.

El juego reanudó y una vez más me encontraba esperando el pase de Megan, ella acababa de pasar la defensa de Lindsey y luego a Tobin, entonces supe que era mi momento, corrí lo más rápido que pude hacia el balón, un solo cabezazo haría que el gol fuera nuestro, salté lo más alto que mis piernas me permitían pero antes de tocar el balón sentí un impacto que me dejó en el suelo, instantáneamente el silbato se escuchó en todo el campo.

— Lo siento. ¿Te encuentras bien? — me encontraba con los ojos cerrados ya que sentía un horroroso dolor en la espalda y mi hombro pero no fué necesario verla para reconocer esa voz que me preguntaba irónicamente como me encontraba... Era Christen Press.