♡♡♡ Fluff Batarou One-shots ♡♡♡

Día 10. Reencuentro

Still loving you

¿Quién no ha escuchado la famosa creencia del hilo rojo del amor? Aquel que conecta a quienes están destinados a reencontrarse, así haya pasado el tiempo, sea cual sea la circunstancia y/o el lugar. A veces, tendremos metas distintas, nuestros caminos avanzaran en diferente rumbo o un habrá un propósito en la vida que nos impida avanzar en complemento, parecerá que simplemente no va bastar todo el amor o tal vez no sea el momento, sin embargo, se tiene la creencia de que este hilo rojo del destino, puede llegar a tensarse o enredarse, más si la conexión es fuerte, nunca pondrá llegar a romperse.

*****

-Es una lástima que tengas que irte, siento que nos faltó mucho por hacer y no nos graduaremos de la prepa juntos como decíamos desde la secundaria.- susurro el joven peliblanco al oído de su amigo, lo sostenía fuerte en brazos al parecer era una despedida.

-Lamento mucho que sea tan repentino, yo también quisiera que fuera diferente y no te preocupes te apoyaré desde el otro lado del mundo en tus competencias de artes marciales.- contestó el más bajito recargando su mentón en el hombro de su amigo, rodeando fuertemente su cintura, no quería irse.

-Ojalá nos volvamos a ver... No importa el lugar, si es en otro continente o aquí mismo tenemos que volver a vernos.- dijo Garou y separó el abrazo para tomar a Bad de los hombros para que lo viera directamente a los ojos y prometiera regresar.

-Si seguro, así será.- contestó el pelinegro, tomándolo también de los hombros.

-Prométemelo.- exclamó, sus ojos amarillos estaban brillantes, avisando que en cualquier momento soltaría sus lágrimas.

-Te lo prometo.- contestó con la voz quebrada Bad, bajando su rostro para evitar el mismo sentimiento.

De nuevo su padre, ya terminando de documentar su equipaje apresuró a Bad para que se dirigieran a la terminal de vuelos internacionales y esperar su avión con destino a Norteamérica. Los padres de Bad, se habían separado por circunstancias irreparables, como aún era menor de edad se dividieron la guardia y custodia para que su padre se quedara a su cuidado y ahora el hombre mayor, le habían hecho una propuesta de trabajar en el extranjero y a su hijo, le habían dado una beca para estudiar en una buena preparatoria, por destacar en el béisbol, ya que en Estados Unidos el deporte era algo primordial para la nación. Si tenía suerte, lo becarían también para una buena Universidad.

Considerando las oportunidades, era una opción viable pero lo que dejaba atrás, era algo que fácilmente no se podría remplazar, aunque estuviera en el país de las mejores oportunidades. La otra parte de su vida su madre y hermanita a quien tanto amaba, su mejor amigo Garou y demás compañeros de la prepa que lo apreciaban, la gente amable de su vecindario, hasta los maestros con quien congenió en la escuela y demás gente que lo apreciaba. No quería que fuera así y no había nada que hacer al respecto, la decisión ya estaba tomada.

Se dirigió de nuevo a su único mejor amigo, quien llegó de pronto al aeropuerto para despedirse de él, ya se habían despedido anteriormente junto con su familia y amigos pero, Garou tenía que prometerle que tenía que regresar.

-Me voy... Cuida mucho a Zenko hee, no dejes que ningún idiota se le acerque mientras no estoy.- le dijo aún con la voz quebrada y separándose de él.

-Lo haré, pero también quisiera que tú volvieras para cuidarla juntos.-

-Volveré, no te preocupes amigo...-

No había más palabras, no sabían que más decir, las despedidas eran evidentes, aunque sentían que tenían que decirse algo, más bien, tantas cosas antes de separarse pero no sabían que... De nuevo el padre de Bad volvió a llamarlo, esta vez ya con el equipaje documentado y se siguió derecho a la terminal.