♡♡♡ Fluff Batarou One-shots ♡♡♡

Día 11. ¿Cómo se conocieron?

Para el amor no existe condición

Hoy era un grandioso día, los primeros rayos de sol se asomaban desde las ventana traspasando las cortinas blancas de la pequeñita que dormía, arropada con sus edredones color rosa, cuando el sol dio en su carita la volteó del otro lado para seguir durmiendo y así hubiera seguido la pequeña hasta que sus padres melosos, hicieron uso de su autoridad y sin tocar entraron a la habitación:

-Estas son las mañanitas que cantábamos a ti...- coreaban las mañanitas Garou y Bad a la pequeña Momo quien por el ruido de la puerta se giró a ver quien entró - Hoy por su tu cumpleaños te las cantamos a ti... - la pequeñita se incorporó de la cama, frotándose los ojos cansados – Despierta Momo, despierta, mira que ya amaneció – y una vez que pudo ver con claridad vio el mini pastel de fondant rosa, letras color naranja con la leyenda HBD Momo y una pequeña velita – Ya los pajarillos cantan, la luna ya...se...metió.-

La pequeña sonrió y de un soplido apagó la velita, seguido de los aplausos de sus eufóricos padres que, una vez dejando el pastelito en la cama comenzaron a aplaudir alegremente:

-Feliz cumpleaños princesita – primero felicitó Bad a su hija dándole un besito en la frente – diez añitos mi amor, ojalá ya no siguieras creciendo tan rápido.- después le acaricio el cabello negro.

-Quien es la niña grande de papá?- ahora se acercó Garou a su pequeña quien dejó el pastelito a un lado y alzó los brazos para que la cargara – Mira nada más, ya estás más alta, en unos dos años ya estarás de la altura de papá Bad.- y los dos comenzaron a reírse por el chiste de papá Garou.

-Cariño...- contestó Bad, llevándose las manos a la cadera, lanzándole una mirada a su esposo por la broma.

-Perdón amor, solo es un chiste.- dijo Garou apenado por eso y después se inclinó para darle un besito en los labios a su esposo.

-Eww... no se den besos cuando estoy aquí, puaj.- exclamó la menor sacando la lengua y viendo hacia otro lado.

-Está bien mi cielo, ya tienes tú disfraz para tu fiesta al rato?- dijo Garou mientras bajaba a la pequeña de sus brazos

-Si papi... - y se dirigió al armario de madera color blanco para sacar el pequeño cosplay de Shinobu Kocho – Qué tal, apoco no está bonito? – dijo enseñándole el disfraz de la hashira a sus padres.

-Les dijiste a tus amigos de la escuela que vengan al rato?- se inclinó un poco Bad para estar del tamaño de la pequeña.

-Sí, todos dijeron que iban a venir y mi prima Geany-chan, dijo que tío Genos también le compró un traje de Kimetsu, obvio le dije que el de Shinobu no, porque ese era para mí.- contestó la pequeña Momo a su papá, dejando el traje en la cama.

-Esa es mi niña, demuestra quien manda...- exclamó Garou llevando su puño a la altura del hombro y Bad le dio un leve codazo – Bueno, pero no mandes a tus primas porque se tienen que llevar bien.- dijo cruzando los brazos para que su esposo no lo regañara.

-Bueno ya, vamos a arreglarte para la escuela o se nos va a hacer tarde y yo tengo que ir a la Agencia de rápido, ya cuando llegue me pondré a decorar y a tú papá, que espero si haya pedido permiso, salga temprano también de la oficina y ponga las mesas.- dijo el pelinegro juntando ambas palmas para apurarlos y extendiéndole la mano a su pequeña la llevó al baño  a arreglarla.

Bad le cepilló los dientes a la menor, la peino en una coleta su cabello negro largo, le puso el uniforme escolar, las calcetas y los zapatos para que bajara a desayunar.  Le sirvieron panqueques que le había preparado papá Garou por el día de su cumpleaños ya que Bad todos los días procuraba que comiera algo nutritivo en la mañana, pero como hoy era un día especial, pues era hora de consentir en lo que quisiera la pequeña Momo.