first time;

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la manera en la que el cielo nublado te seguía a todos lados era un tanto infantil para ti.
caminabas por los pasillos de la universidad de yonsei, llevando una gran cantidad de libros entre ambos brazos (aproximadamente unos 4 o 5), pasando entre los pasillos de la construcción. tu mirada recorría cada esquina y cada cimiento que se te atravesaba, aprovechando que casi todos los estudiantes estaban en sus aulas tomando clase y que se podía sentir la soledad, cosa que era muy tú.

un golpe en tu cuerpo te hizo reaccionar, y el frío pavimento te hizo por un momento tratar de recordar en dónde estabas. los libros estaban tirados, y habías caído de trasero. tu mochila colgaba débilmente de un hombro mientras lograbas ver con quién o qué habías chocado.
un hombre alto, de aproximadamente 1.77 estaba enfrente de ti con la cara en pánico, una O que se formaba en su boca, cabello rubio teñido, una marca en su ceja que por alguna razón te pareció sexy. sus libros igual estaban tirados, pero se mantuvo de pie.

— dios santo, perdóname, no te había visto.— su ceño fruncido se convirtió en un ceño de preocupación, directamente recogiendo los libros que se te habían caído.

— no, no. perdóname tú, venía distraída, literalmente.

su mano enfrente de tu rostro fue lo que te hizo levantar la mirada, la tomaste y se sentía grande y suave. el chico te devolvió tus libros mientras ahora sonreía levemente, ahora tomando sus libros segundos después.

— no te he visto por aquí.. ¿eres nuevo? — la curiosidad invadió tu cabeza.

— sí. hace tres días entré, creo que me he perdido de las primeras dos semanas de clases, ¿no es así?

una risa leve escapó de tus labios.

— algo. igualmente no es mucho lo que hemos visto.

un silencio incómodo se hizo presente, y ahora te dabas cuenta de que tenías que ir a la biblioteca para entregar los libros que llevabas contigo.

— oh, ya es tarde. tengo que ir a la biblioteca para dejar esto.. — señalaste los libros con la barbilla.

el chico te dedicó una sonrisa más amplia. por un momento la frase "un ángel" se repetía por tu cabeza.

— yo voy al salón 34-D.. así que supongo que nos veremos por estos rumbos todos los días.

su confianza que transmitía te hacía sentir miedosa, pero a la vez, era algo cálido. frunciste la nariz en señal de un "oh, está bien".

— entonces... creo que nos despedimos por esta ocasión. procura fijarte por dónde vas, no quiero que la próxima vez que te vea sea con una venda en la cabeza. — dice, tocándome la frente con la punta de su dedo índice. río nerviosamente.

— lo mismo digo, no quiero que un matón te agarre como su conejillo de indias.

sus mirada chocan por unos segundos.

— soy san. — dice extendiendo su mano.

— soy joo, un gusto.

sus manos chocan en un saludo occidental, y por un momento ambos sientes una sensación extraña, pero más positiva que negativa.
quien diría que apartir de ese momento, ambos tendrían mucho por delante.













n/a: i'm back (⁠◔⁠‿⁠◔⁠)

san reactionsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora