Amor entre cámaras

Ellas

POV Elizabeth

Aarón conduce mi auto con unos lentes puestos para evitar el rayo solar. Yo voy recostada en el asiento del copiloto. La música de OneRepublic qué pasa en la estación de radio. Recuesto mi cabeza en la ventana sacando mis manos.

-¿Qué haces?-pregunta desconcertado.

-Tomando un poco de aire.

-¿Por qué?

-Porque si no lo tomo me muero.

-No seas idiota-reí-¿Qué te tiene de buenas?

-Ni yo lo sé en realidad. Solo desperté y me sentía mejor, aunque siempre hay cosas que lo arruinan, o estúpidos.-me recompongo-¿Vamos por un gelato?

-¿Segura?

-Si. Vamos.

...

-¡Mamá!-rio al detectar a la pequeña saltamontes correr hacia mi-Hoda.

-Hola, enana. Mira, te traje uno-entrego el pequeño bote-Es de chocolate.

-Mami, mila-grita hacia atrás.

Scarlett llevaba un vestido floreado, blanco con flores azules, su cabello corto peinado hacia atrás. Llega a nosotros con una sonrisa hermosa.  ¿Por qué hoy lucia mucho mejor que antes?

-Ya lo veo. Da las gracias.

-Ga-gacias-me encojo de hombros.

-No es nada. He traído uno para ti también, es de almendras-ofrezco el suyo-Son muy buenos, he comido unos con Aaron.

-Gracias, no debiste molestarte.

-Ah, eso bo fue nada. ¿Tienes rodaje?

-Si, en una hora, apenas iré a vestuario.

-Bien, ¿Rose?-la niña me voltea a ver manchada de la boca y mejillas-Vamos a jugar con Aaron.

-¡Si!-grita emocionada.

-¿Segura? No quiero molestarte más.-niego alegre-Perfecto, y gracias por cuidarla.

-¿La has oído? Soy su mamá de grabación-Ella sonríe divinamente-Vámonos, saltamontes.

-Portate bien, cariño-dice alto Scarlett-Lizzie, cuídala mucho.

-Como siempre-me detengo observándola de pies a cabeza-Bonito vestido.

Se sonroja y antes de que diga cualquier cosa, Rose y yo corremos rumbo al camerino de Aaron. Al entrar el gira viéndome confundido.

-Cuidaremos de ella, ¿tienes ese videojuego?

-Si, está aquí. ¿Vamos a jugar?

-No, tú no. Ella y yo-señalo a mi pequeña cómplice.

-Rubia, siéntate ahí y traeré el juego-Rose obedece a Aaron-¿Otra vez?

-Esta vez me he ofrecido yo-alza una ceja-No digas nada.

-No puedes prohibir que lo piense.

-Solo soy amable.

-Extraño, ¿no? No te gustan los niños y de la nada eres mejor amiga de la niña-levanta la comisura sacando el videojuego-Te gusta la mamá y es distinto-golpeó su cabeza-¿Te gusta?

-Por supuesto que no. Te he dicho que no muchas veces-recalco-Solo me ha caído bien.

-Como digas. ¿Sabes qué pasó anoche?-niego-Bien, anoche en el bar me encontré a una chica, Laurent.

-¿Uhum?-pregunto sin importancia prendiendo el aparato.

-Bueno, pues resulta que yo intente coquetear con ella, pero me mando lejos-rio buscando unas toallitas húmedas.