𝐓𝐡𝐞 𝐀𝐝𝐝𝐚𝐦𝐬 [TAEKOOK]

Paseo

Aquella mañana de sábado sería diferente a las demás, Jungkook se levantó antes de la alarma que había puesto, buscaba entre su ropa algo que lo hiciese verse bien, pero a la vez que no fuese tan formal, después de todo estaría paseando por el centro de Seúl hoy.

Pues resulta que el tener un grupo de tres y que uno no tenga celular hacía bastante difícil que pudiesen ponerse de acuerdo con la actividad, y más cuando el que no tenía celular insistía en poner su casa como el tema de la presentación—. ¿Hijo? ¿Qué haces levantado tan temprano?

—Saldré con unos amigos—se arreglaba con algo de torpeza el corta viento que aún no le convencía del todo.

—...pero los fines de semana Hoseok se va a la casa de su abuela ¿Con quien saldrás?—cierto, olvidaba que a su madre no la podía engrupir con esa excusa.

—Son...Lisa y-...

—Oh ¿La chica que me contaste?—parece que con sólo escuchar ese nombre su compañera recuperó toda la energía. Pronto sintió como las manos de su madre lo tomaban bruscamente por los hombros, luego de eso su trasero estaba sentado en su almohada—, no puedes ir así de roñoso, debe haber algo en tu armario que no sea tres veces tu talla y de un color más vivo, tienes que dar la primera impresión para tu cita.

¿Cita? ¿Cita con Lisa? ¿Cita con la chica más amable y linda que ha conocido? el color de sus mejillas no tardó en ser de un tono rojo—¡No dije que estaremos en una cita! Sólo es un proyecto de la escuela, además va a estar-...

—Sí, pero técnicamente siempre haces trabajos con ella y se hablan bastante, esto podría contar como una cita...cielos, ella es muy linda, su padres también me agradan—se dio una pausa para decir aquello último con una polera en sus manos, era de la talla de Jungkook pero seguía siendo de color negro—. Ponte esta y los jeans de ahí, veré si puedo encontrar alguna chaqueta linda.

—No no, no va a ser una cita.

—¿Por qué no? ¿Acaso no te gusta?—la mujer no se había tomado el tiempo de voltearse para ver a su hijo, de haberlo hecho se hubiese encontrado con un Jungkook algo consternado, ya que ni él sabía muy bien la respuesta.

—Sí... Me gusta—le gustaba que le sonriera y que se preocupase por él, le gustaba que siempre le guardase un asiento cuando habían presentaciones en la cancha, le gustaba que siempre oliese a jabón de fresa...lo hacía sentir calmado.

—¡Entonces deja de hacerte el difícil y ponte esta polera!— y antes de que pudiese decir otra cosa la bola de ropa se estrelló en su cara. Ya no podía retractarse, le había dado la razón a su progenitora así que ahora no podría sacarla de ahí hasta que se vistiese de la manera que ella quería.

...tenía la sensación de que se llevaría una que otra pregunta de sus compañeros sobre su ropa.

• • •

La chica ese día se levantó cómo todos los días, a las cinco de la mañana, ¿Por qué tan temprano? Bueno, usaba esas horas para poder hacerse su sesión de cuidado personal, ya se había acostumbrado a hacer aquel ritual los días de semana, los findes lo hacía un poco más tarde pero éste era un sábado especial.

—¿Hija?—la mujer se asomó por la puerta de la perfumada habitación, se notaba desordenada por obvias razones, se había despertado hace algunos segundos por el sonido del secador de pelo—¿Qué haces levantada tan temprano hoy? Despertarás a tu papá.

—Tengo que salir a las nueve con un compañero.

—¿Un compañero?

—Sí...bueno, son dos, pero estoy segura de que el segundo no vendrá—era lógico, se notaba que Tae no era mucho de salir y seguramente cuando fuesen a buscarlos este se negaría, o al menos eso quería creer ella.