Capítulo 2

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- Señora Bakugou, lamento mucho tener que entregarle esta clase de noticias, pero es mi deber hacerlo como doctor y como representante del equipo médico que atendió a Bakugou-san...

- Por favor, sensei, deme un poco de esperanza...

- Lo siento mucho, de verdad... pero los nervios del brazo derecho de Bakugou-san, se dañaron irreparablemente debido a la mordida y a la fractura por compresión de su hombro... lo cual hace imposible contemplar la posibilidad de una prótesis ni ahora, ni en un futuro...

- ... - En aquel instante pudo sentir cómo su corazón se partía en pequeños pedazos... el sueño por el cual tanto había trabajado su Katsuki, se había acabado... - ¿Y su otro brazo...? - Preguntó con temor.

- Su otro brazo le será útil para llevar una vida normal, no tardará demasiado en sanar y estoy seguro que él aprenderá a usarlo como...

- No le estoy preguntando eso, sensei...

- Lo lamento, si bien su brazo izquierdo no le fue arrancado en medio de la batalla; al igual que su hombro derecho, sufrió graves fracturas, y el nervio Ulnar de este fue comprimido debido a uno o varios de los ataques recibidos de RiverStone, y si bien el daño no es comparable a su derecha, la pérdida parcial de su sensibilidad motora, no le hará posible en un futuro ser útil en una pelea...

- ¿Perdió su quirk...

- Su quirk sigue ahí, él acumulará nitroglicerina como lo ha hecho siempre, el problema es que... es muy probable que el daño le impida realizar ciertas acciones... desde tomar un lápiz o cerrar correctamente su puño para lanzar un puñetazo, hasta... lograr hacer detonar su palma para activar su peculiaridad...

- ...

Aquellas palabras eran quizás la forma más elegante que tenía el doctor de decirle que su esposo estaba acabado...

No tenía idea de como iba a reaccionar Katsuki cuando despertara y se diera cuenta de que su brazo no estaba más ahí y mucho menos cuando le tuviera que explicar todo esto... que nunca más iba a poder portar su traje de héroe, ni sus muñequeras, ni sus granadas... que la patrulla que hizo el martes de la semana pasada fue la última... que quizás tardaría semanas o meses en lograr ser capaz de tomar un lápiz y escribir su nombre... que nunca más podría atarse las agujetas o abotonar sus camisas sin ayuda...

Katsuki...

Sentía tanta pena y por sobre todo culpa... culpa por no haber sido más capaz, más fuerte para defenderse por su cuenta y arrestar al villano... si ella hubiera hecho su trabajo como correspondía, él jamás se hubiera involucrado estando en su maldito día libre... sin su equipo de apoyo, sin su traje, sin protección...

Se sentía tan miserable, tan nada... no podía abandonar aquella repulsiva idea de que la carrera y mayor sueño de su esposo había terminado por culpa suya...

¿Pero qué esperaba? A veces olvidaba que su Katsuki era así... ella no tenía idea de qué demonios hacía él aquel día en ese lugar... pero apenas la vio allí a punto de ser asesinada por ese bastardo... no lo pensó dos veces antes de abalanzarse encima, sin saber de detalles, ni de quién era el villano, ni de su poder, ni de nada... él solo la cubrió con su cuerpo y ya, y le dio la pelea de su vida a ese miserable a pesar de que casi era del doble del tamaño de él... Aquel día él esperaba darle una gran sorpresa una vez llegara a casa... y en aquel momento en donde estuvo a punto de perderla... todo le importó un carajo... no se hizo preguntas, ni cuestionamientos, su cuerpo simplemente se movió... haciendo honor a aquella promesa que hizo frente al altar hace 15 años atrás...

Cuidados Especiales - KacchakoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora