Al final Izuku hizo un trato con Aizawa, dando como garantía su vida ya que no quería causarle problemas a su mamá si es que no llegaba a completar el pago, el pelinegro estaba sorprendido pues por lo general los deudores ponían un tercero como garantía nunca su propia persona pero antes de firmar el contrato.
- solo una ultima cosa, quiero que mi muerte pase como un accidente- dijo el peliverde.
- ¿ por que?.
- no quiero que mi madre se quede con el remordimiento de que este trato se llevo acabo por su culpa, señor Aizawa esa es mi única petición - murmuro bajo mientras firmaba aquel trozo de papel. y con eso ambos omegas se marcharon, cada uno con pensamientos diferentes con respecto a esta noche.
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Para su buena suerte la producción de arroz y sandia fueron buenas y por algún motivo una empresa pequeña compro mucho de su producto, ahora lo único que faltaba era dar los primeros dos pagos por que era mejor ir adelantando que esperar a la fecha. Los próximos 5 meses fueron relativamente tranquilos, su madre estaba estable si bien el tratamiento de quimio cambio mucho su apariencia sabia que seria momentáneo y con los cuidados correctos volvería hacer la mujer llena de vida que tanto admiraba pero quien diría que muy pronto los problemas volverían a parecer.
Izuku estaba que se arrancaba sus cabellos ya tenia 3 cuotas que no pagaba, no sabia que hacer, el pequeño negocio que le compraba por mayoreo quebró y sumándole que debido a los celos de los otros productores estos arruinaron sus cosechas, solo esperaba que su buen historial de pagos le ayudara a que el cobrador le diera mas tiempo.
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No sabia donde estaba lo único que recuerda es que estaba en el cuarto de hotel pensando en como pagar lo atrasado, luego de eso escucho como llamaban a su puerta y después de abrirla sintió un pinchazo en su cuello y después de ahí todo se volvió borroso, hasta ahora que ya despertó, estaba en el frío suelo de mármol rodeado de personas armadas mirando hacia el frente.
- hasta que por fin despiertas, estúpido Omega- se escuchó una voz ronca e imponente, izuku asustado se levantó de su sitio y empezó a buscar con la mirada a quién le había hablado hasta que sus ojos enfocaron de frente y pudo ver una silla estaba donde estaba sentado un hombre de cabellera ceniza con unos hermosos ojos rojos. - ya debes tres cuotas de atraso, ¿ Cuándo vas a pagarlas?- pregunto.
- y-yo b-ueno se que debo dinero pero juro que lo pagaré!, he tenido mala producción en estos meses y lo poco que he ganado no alcanza ni siquiera cubrir la mitad de las cuotas. -
- me importa una mierda tus estúpidas excusas yo quiero que me pagues ese dinero si no quieres que tú y tu amada madre desaparezcan de la faz de la Tierra- dijo enojado mirando fijamente al Omega frente suyo y antes de agregar algo, la puerta del cuarto se abrió de manera estrepitosa y por ella entró un cansado Omega de cabellos negros con una gran barriga.
- Aizawa sabes bien qué no puedes estar aquí, así que retírate- habló el alfa de cabello cenizos.
- me importa una mierda lo que tú quieras ya les he dicho que estoy en perfectas condiciones de hacer todavía mi trabajo y solo yo tengo derecho de interrogar a nuestros deudores, así que te voy a pedir que levantes tu culo de mi silla y te retires este es MI trabajo- dijo enojado mirando fijamente a quién consideraba un hijo.
-¿ Dónde mierdas están tus esposos?, Ellos deben estar cuidándote.-
- ellos están dormidos, escuché a uno de los trabajadores qué te estabas haciendo cargo de mi trabajo y que en estos momentos estabas en un interrogatorio con un brócoli parlante según sus palabras, así que vine cerciorarme si era cierto lo que habían dicho y por lo que veo estaba en lo correcto, además no puedes hablarle de esa manera a la persona que me dijo que estaba en cinta- hablo tranquilo y un poco cansado y es que debían comprenderlo estar embarazado de un par de mellizos no era fácil y mas si sabías que tu jefe estaba amenazando a la persona que te lo hizo saber.
- ohh con que esté brócoli con patas es la persona que te dijo que estaba encinta, bueno no importa ya que estará 3 metros bajo tierra después de que salgas- hablo con gracia.
- bueno eso será por encima de mi cadáver bakugo, ahora dime niño ¿ Por qué no has pagado?- dijo dirigiéndose al pelíverde.
- lo que pasa es que estos meses mis cosechas no han rendido y lo poco que he juntado no alcanzaba a cubrir las mitades de las deudas por eso no he pagado- dijo nervioso.
- bueno niño como te lo dije antes si no pagabas a tiempo abra consecuencias- dijo mientras se sobaba la punta de la nariz - y dime tienes otra cosa con pagar las deudas atrasadas.- dijo ya que bakugo no sabia del todo el contrato del peliverde.
- la verdad es que no- dijo desanimado el Omega rezando internamente que su mamá perdonará la tontería que hizo.
- bueno... bakugo el chef principal ha renunciado cierto?.-
-si, ¿ Porque preguntas? -
- bueno tengo una solución curiosa para que pague lo que debe, sería que trabaje en la cocina- dijo como si fuera lo más normal del mundo.
- ¡no permitiré que trabaje en mi cocina!- grito.
- bueno entonces tú cocinaras o morirán de hambre- exclamó mientras salía de la habitación.
Sin decir nada más bakugo analizo lo dicho por su mentor y la verdad sonaba descabellado pero no quería perder el tiempo cocinando y mucho menos quería perder aun mas el tiempo en encontrar un nuevo cocinero, así que haciendo caso a su "padre" contrato al peliverde como nuevo cocinero.
- bien- dijo después de un rato - escucha Omega trabajarás en la cocina, estarás a prueba una semana y si fallas pues ya sabes tendrás una bala en la cabeza- comento, el pobre omega nervioso solo asintió dando a entender que estaba de acuerdo con lo anterior.
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