unidos por la sangre

capitulo 1: muerto el padre el heredero toma su lugar

-¡busca a mi hijo, donde quiera que esté debe cumplir con su responsabilidad!-.

Anuncia la actual presidenta de la empresa de comunicaciones "hunycay", desde su oficina de cristal tiene una maravillosa vista de todo Santiago, pero ni la vista, ni la atractiva decoración modernista de su oficina pueden disminuir su disgusto, a pocos segundos tocaron a su puerta, su mano derecha Lauren abre para hacer pasar a una muchacha de unos veinte con el cabello recogido en una coleta, con traje de dos piezas lleva su café, luego en completo silencio le entrega los informes que deja sobre el escrito, asiente con la cabeza y se retira, Lauren decide retirarse sin antes mencionar:

-que lindo pañuelo usa tu nueva secretaria-.

el comentario le sentó incomodo a la presidenta que se acomoda la blusa, Luaren ataca con sus palabras afiladas:

-¿ella es consiente de lo que haces?-.

su mirada perspicaz deja fuera de juego a la presidenta, tantos años, a su lado, ambos se conocían bien, Lauren no solo es su mano derecha y su defensor ante sus enemigos, si no que es un amigo incondicional, se conocieron en los 50 cuando ella pasaba por su etapa más rebelde después de que su padre le confesase que ella era un demonio y que llegado el momento ella debía matar el ansias de un forma violenta, en aquel entonces Isabella no quería aceptar su naturaleza, llevada por sus ideas revolucionarias juntos a otras mujeres se encaminó a la idea del voto femenino, todas se reunieron una noche en una bodega abandonada, todas estaban dispuesta a marchar y celebraron el nuevo movimiento liberal hasta que llegó la fuerza publica, a muchas las detuvieron, Isabella y Georgina lograron escapar, escabulléndose por un corredor que daba a un estrecho cobertizo, ambas eran amigas del colegio, se querían y juntas compartieron vivencias de la misma juventud, hasta que Isabella empezó a sentir una fuerte punzada en el estomago, en susurros su amiga le pregunta:

-¿que te pasa?

pero Isabella no es capaz de explicar, pronto un sudor frío la recorre y sus oídos se afinan lo suficiente como para sentir unos tambores, se cubre los oídos molesta, su amiga la abraza, pensando que aquella simple muestra de afecto detendría lo inevitable, es en el calor de su cuerpo que Isabella siente que los dientes le pican, su lengua recorre la dentadura con disimulo hasta que siente el roce de lo que parece tener colmillos puntiagudos, una sensación de sequedad la descoloca, hasta el punto de enloquecerla, levantó la mirada a su amiga, Georgina sorprendida dice:

-¡¿usas lentes de contacto?!-

no lo había notado, los ojos de Isabella cambiaban al igual que ella misma, su cuerpo había madurado y finalmente se había transformado en lo que su padre le había dicho, no supo que decir solo contempla a su amiga Georgina sus ojos caen de golpe a su cuello puede notar como una vena más que otra sobre sale, los tambores se aceleran y previene que no es lo que pensaba no es un ruido proveniente de la calle, es el pecho de su amiga, es su respiración, la necesidad de saciarse es interrumpida por Georgina que mirándola a los ojos:

-me gustas-.

dijo Georgina a secas, sin darle tiempo a reaccionar la toma del rostro y la besa, sus bocas se unen de una manera perpetua, Georgina introduce su lengua, Isabella la deja entrar, se deja llevar por el beso, una vez se apartan el rostro de Georgina se llena de ilusión pero isabella apenas puede sosegar su demonio y sin aviso la toma de la cintura apegándola a su cuerpo y en cuestión de segundos clava los colmillos en su cuello, su amiga  intenta apartar, pero la succión es fuerte, desmesurada, en pocos segundos Georgina deja de resistirse, sus brazos caen a cada lado, Isabella no deja ni un poco de sangre en el cuerpo, la consume completa, ya saciada sus ojos vuelven a ser verdosos, su boca esta manchada por la sangre, el deseo se apagó, apartó las manos que tenía sujeta a su amiga la cual se desplomó a sus pies, la miró caer confundida, se arrodilló junto al cadaver, intentó moverla.

-Georgina despierta...tu me gustas-.

pero la muchacha no respondía, inmóvil quedó, sus labios se tornaron azulados, entonces Isabella lo entendió, su amiga estaba muerta, los ojos se le llenaron de lágrimas, no podía creer lo que había hecho a alguien que amaba, era un demonio como su padre le había dicho, maldita por la sangre, con la amargura de su corazón roto llamó a su padre.

-no lo sabe-.

dijo la presidenta Isabella, en la actualidad, a sus casi 100 años de aparentes 30 ya podía controlar la necesidad, la mordida, después de esa fatídica noche, no volvió alimentarse, su padre preocupado pidió la ayuda de los Boinas negras, cazadores profesionales, quienes se dedican a disminuir el crecimiento o la expansión de las razas, ya en sus últimas etapas antes de estar completamente seca, agonizante Isabella recibió sangre, en especifico de Lauren, acompañado de la instrucción necesaria para que no le volviera a pasar con el amor de su adolescencia.

Lauren asintió y sin decir nada salió de la oficina, camina con paso firme hacia el ascensor, al salir del inmenso edificio sube a su auto y se pone en marcha de buscar al heredero, bien sabe por sus años de servicio a la familia que aquel muchacho no podía estar en otra parte más que en la cabaña en el sur, arrancó el auto, puso las manos en el volante se observa con disimulo las cicatrices de antiguas peleas, como aquella tan memorable que lo llevó a la guarida del zorro.

fue de niño, nacido de padres adictos siempre fue independiente, de las calles nació como perro de peleas callejeras y fue en una de ellas, ya siendo un adolescente que conoció al que todos los señores de la mafia llamaban con respeto el Zorro, su contrincante no es más de un chico que ha tenido todo lo que él le ha faltado, una buena educación, padres amorosos y amigos influyentes, sin embargo, jamás tendrá lo que Lauren posee, esos ojos asesinos, ese brillo gélido que no te permite dormir en las noches, atormenta en los deseos de venganza, el muchacho los vio segundos antes de recibir el nocaut,  el griterío de la turba de gente a lo que todos llamarían publico, vitoreaban al ganador, que con rasguños y heridas leves se llevaba el premio de la noche, un fajo de billetes al bolsillo.

La luz roja de un semáforo lo regresó a la realidad, de guardaespaldas de la familia Darckcangel, dinastía de vampiros por siglos, que se han mantenido a la vanguardia de las circunstancias, sus compañeros le han informado que el objetivo sigue en la cabaña del lago en el sur de chile, guarida de tribus de los trinos, hombres lobo, volvió a sus recuerdos al girar a la derecha y salir por la carretera fuera de la ciudad.

Estaba limpiando sus heridas en el nauseabundo baño de aquel gimnasio abandonado, unos pasos lo hicieron ponerse alerta, su músculos se tensaron al instante.

-buena pelea, haz dado muchacho...sin embargo, ambos sabemos que ese chico no tenía oportunidad-.

es primera vez que alguien le descubre, se giró lentamente al hombre de su espalda, le analizó de pies a cabeza, lo ve insignificante, un hombre robusto, alto de mirada dura, ojos tan fríos que congelarían el infierno, pero lo que llamó su atención es el anillo en su mano derecha, en el dedo anular, un anillo de oro con la imagen de un Zorro con incrustaciones de diamantes color rojo en los ojos.

-¿que es lo que quieres?-.

preguntó Lauren, a lo que el Zorro esboza una amplia sonrisa para decir.

-tu-.