El Ángel de JunHui - JuNo (3)

Capítulo 6: Semana Ideal

–Ya está dormido, puedes salir. -escuchó que dijo MinGyu.

Jun salió de su escondite, su mirada fija en su pequeño omega dormido en los brazos de su amigo.
Se sentó en el sofá del frente.

–Te ves como la mierda.

–Así es como me siento.

MinGyu suspiró negando con la cabeza.

–¿Qué pasó?

–Tzuyu me dijo que no me esfuerzo lo suficiente con Chan. Dice que necesito pasar más tiempo con él y no solo llevarlo al trabajo y luego volver a casa a dormir. Que trabajo demasiado. Que Chan intenta adaptarse a mi vida pero no puedo adaptarme a la suya. Yo si quiero pasar tiempo con Chan, MinGyu, pero tengo un trabajo.

–Por dios Jun, eres más inteligente que esto. Que llegues tarde un día o faltes al trabajo no te matará, y es Chan de quién hablamos, tu único compañero. Creo que vale la pena tomarse un descanso, no seas obtuso. ¿Acaso crees que puedes formar una relación con Chan teniéndolo en caja todo el día mientras te pierdes en tu mente trabajando? ¡Salgan y disfruten! Vayan al centro, invitalo a comer, a bailar, o quédense en casa como un par de vagos, durmiendo, viendo televisión, teniendo sexo, pero dediquense tiempo. Chan será quien esté muy ocupado después y lamentarás no haber aprovechado el tiempo que estuvo aquí.

Los labios de JunHui temblaron y se cubrió el rostro con las manos.

–Soy un novio horrible. Le transmití emociones negativas a mi compañero y lo lastimé, ahora piensa que yo no lo quiero.

–Fue un accidente, Jun, pero me alegra que Tzuyu te haya hecho esa observación. Creo que tarde o temprano cualquiera de nosotros te lo hubiese dicho.

–¿Qué hago, Gyu?

–Descansar. Has trabajado duro y sin parar desde los dieciséis, es hora de darte un respiro. Tu cuerpo, mente y corazón te lo agradecerá.

–Hay... mucho que me gustaría enseñarle antes de que se vaya.

Podrían pasar meses antes de verlo en persona de nuevo y quiso golpearse a si mismo por ser tan idiota y echar a perder dos días enteros en los que pudo compartir con Chan.

–Estoy seguro de que tienes suficiente dinero para darles un pequeño gusto. Y aún tienes que convencerlo de hacerse ese piercing.

JunHui rió entre dientes.

–Espero que la demostración con Bae no lo haya traumatizado.

–Por favor.

Jun de repente se tornó serio.

–MinGyu, ¿recuerdas ayer al omega que salió detrás de Chan en el baño?

–Si. Lo ví.

–¿No te parece familiar?

–A decir verdad si, tiene un poco de parecido con Chan, incluso tienen el mismo tipo de cuerpo.

–¿Tipo de cuerpo? No sé tú, pero yo no me fijo en el cuerpo de otros omegas.

–Tienen el mismo porte, cintura pequeña, espalda ancha, un poco de músculo en los brazos, incluso miden lo mismo. Aunque Chan tiene los muslos más gruesos.

–No le mires las piernas a mi omega o te golpearé.

–Soy un futuro chef, debo ser detallista. Pero también tiene un aire de Alpha igual al de Chan.

–Lo noté. Chan dijo que se llamaba San.

–Chan y San, que gracioso. Tómalo, ya están por ser las seis. Quédate con él, apaga tu alarma, yo les haré el desayuno y comen cuando despierte. Yo les explicaré a los chicos. Claro, sin tanto detalle.