─ ❝🍓:: 𝐀𝐁𝐂 ; ℍ𝕒𝕣𝕦𝕟𝕠 𝕊𝕒𝕜𝕦𝕣𝕒 ִֶָ

❛❛❲🍨- 𝕭 ⨾⨾ 𝑲𝒂𝒌𝒂𝒔𝒉𝒊 𝑯 ִֶָ

ˑ

ˑ
ˑ
- ̗̀ 𝑩𝒂𝒏̃𝒐 ִֶָ ִֶָ ִֶָ ⸙

«Me lleva la...»

Kakashi no había tenido un buen día, por decir lo menos.

Su día se compuso de quejas, papeleo, informes, permisos, reuniones y más papeleo. Inclusive trajo el trabajo de su oficina para poder adelantar un poco. El estrés lo consumía como el fuego a un papel.

Sakura escuchó suspirar cansinamente al sexto Hokage tras ella más de una vez. Se detuvo de su actividad un segundo y lo miró por encima del hombro con preocupación.

Apenas terminaban de cenar, pero aun así Kakashi no demoró en retomar su trabajo. Se preguntó qué podría hacer para mejorar el estado de humor del adverso, y entonces su foco se iluminó.

Kakashi no prestó atención cuando Sakura se retiró de la cocina camino a los aposentos que compartían, ni tampoco cuando escuchó el agua de la ducha abrirse. Lógicamente, creyó que la chica se estaba por dar un baño para relajarse, después de todo Sakura seguía trabajando en el hospital y seguro también tuvo una larga jornada. Tomó nota de hacer lo mismo una vez terminara este... asunto —por no decir ninguna palabra mal sonante—.

Lo que captó su atención fue escuchar pisadas descalzas a su alrededor cuando aun la ducha estaba encendida. Antes de que pudiera seguir pensando, unos brazos lo rodearon por detrás. Sintió a Sakura acurrucarse en su cuello a la vez que repartía besos en el mismo. El peli-plata dejó el bolígrafo a un lado y toda su atención se dirigió a su amante, dejándola que hiciera con él lo que quisiera (le encanta que ella lo mime).

Los besos de Sakura ascendieron hasta llegar al oído del hombre.

— Acompáñame... 

Kakashi sentía que se derretía ante el todo seductor de la oji-jade. Pocas veces ella usaba esa arma mortal. Sus ojos le echan una mirada rápida a los informes una última vez.

¿Continuar con el papeleo o sumergirse en los mimos de Sakura? Ja, era como elegir entre la vida y la muerte.

Él no protestó cuando Sakura tomó su mano y comenzó a guiarlo hacia el baño.

Miró con intriga la tina ya preparada. Una sonrisa traviesa surcó sus labios al darse una idea de lo que Sakura tenía planeado.

Entre besos y caricias, Sakura despojó todas las prendas de Kakashi. Al llegar a su máscara delineó los contornos de la misma antes de deshacerse de ella. No importa cuantas veces mirará el rostro del hombre, ella siempre quedaba embelesada por su belleza. Maldición, si buscaba la palabra sensualidad en un diccionario, estaba segura de que habría una foto de Kakashi acompañando la definición.

El más grande sonrió con arrogancia antes de atrapar los labios contrarios en una suave y apasionado beso. Sus manos serpentearon situándose en su cintura y acaricia la piel de ella debajo de su camisa.

Sakura enrolla las manos de él con las suyas y las aparta de su cuerpo. Kakashi la mira, confundido por su rechazo, pero una sonrisa de Sakura le hace saber que no es por él.

Adquiriendo un tono autoritario y dulce, le indica al Hatake que entre en la tina. Él arquea una ceja, pero obedece.

— ¿No vas a entrar conmigo, linda? — inquirió. La chica menea la cabeza suavemente.

— Nop, hoy solo voy a cuidar de mi amado.

Kakashi se destensa en el agua y sonríe, dejándose a merced de la oji-jade.

Ella comienza colocando champú en la cabeza, teniendo sumo cuidado de que no descienda más allá de la frente. Masajea el cuero cabelludo dando suaves caricias ahí mismo. A este punto Kakashi comienza a escapar suspiros y gruñidos gustosos, la chica estaba haciendo un gran trabajo. Sakura retira el jabón con agua tibia, repitiendo los masajes en todas las áreas para asegurarse de que no sobre ni una burbuja.

Lo siguiente fue el cuerpo. Kakashi piensa que si se muriera ahí mismo no le molestaría en lo absoluto. La chica esparcía el jabón en todas partes; pecho, cuello, brazos, abdomen, nuca, espalda...

La kunoichi no pierde la oportunidad de tocar y acariciar todo lo que se le cruce, grabando en su memoria el cuerpo masculino a detalle. Pasó las yemas de los dedos por la mandíbula marcada del Hatake y siguiendo un sendero se dirigió hacia los labios repitiendo la acción.

Kakashi acortó la distancia entre ambos y la besó como si fuera el último día de su vida. La batalla de dominio pronto involucró a sus lenguas, en donde Kakashi salió victorioso. Con una sonrisa juguetona tomó por la cintura a Sakura, y apegó hacia él en una gran maniobra. Por consecuencia la chica se mojó provocando un jadeo de sorpresa.

— Es mi turno. — anunció el peli-plata.

— Pero aún no termino... — intentó replicar.

— Mi cuerpo ya está perfectamente bien. — tomó la mano femenina y la llevó hacia sus labios, depositando un gentil beso en los nudillos. — Ahora yo cuidaré de tu cuerpo...