Vueles a ser tú.

capitulo 3

"Re Mayor"

El descubrimiento de esta mañana había sido abrumador, doloroso y cruel. 

Estaba en mi hora de descanso, en la sala de los profesores corrigiendo los exámenes de Bachillerato, cuando mi móvil comenzó ha sonar. Mire extrañada el nombre de la pantalla, nunca me había llamado antes, la tenia guardada por tenerlo más que otra cosa. 

- ¿Leah?- pregunté una vez descolgué el teléfono. 

- Si Bella, soy yo.- sabia que no le caya bien, nunca lo he echo y no sé la razón aparente, Jacob dice que es por haber estado con un vampiro, pero siempre he intuido que hay algo más.

- ¿Sucede algo? No me esperaba esta llamada si te soy sincera- Una pequeña risa se me escapó, Leah me daba miedo y me ponía nerviosa solo imaginar su seca voz-. 

- Hace semanas que lo sabe la manada y no han querido decírtelo, tanto machos que dicen que son y son incapaces de tener cojones a decirte la verdad. Encima dicen que son tus amigos...

- ¿Leah, qué estas diciendo? ¿Qué pasa con la manada?- no entendía nada de lo que decía, pero enseguida me arrepentí de preguntar.

- Bella, Jacob se ha imprimado de una chica, se llama Mia,- Noté como su un balde de agua fría me recorriese por la espalda, como mi mundo empezaba a perder consistencia, la imagen de una bola de acero perfecta siendo derretida vino a mi cabeza.

Me quede quieta. Sin respirar. Intentando procesar la nueva información. Tenia que ser una broma, una de muy mal gusto. Jack seria incapaz de hacerme daño, estaba locamente enamorado de mí. No podía... Leah cortó mis pensamientos, supongo que al no recibir respuesta decidió hablar.

- En este momento creo que soy la que más te entiende, sé el dolor que estas sintiendo... Pensaras que es cruel que te lo haya dicho, pero no podía quedarme quieta, callada, como el resto de la manada. ¡Estas embarazada! ¡De él! Mereces poder decidir que hacer, ahora que puedes... El no sabe que te lo he dicho, estoy en pelea con Seth, piensa que no es de mi importancia, pero a mi me gustaría que me lo dijesen .He vivido en la misma situación, Bella. 

- ¿Desde hace cuanto tiempo?-  necesitaba saberlo, saber cuantas veces ha estado mintiéndome a la cara. 

- Hace cuatro semanas se imprimió, la semana pasada comenzó a salir con ella...

- Hace dos semanas le dije que estaba embarazada, una después comenzó a salir con ella...

- Lo sé. Esta feliz de la noticia, quiere al niño, no te ha mentido en ese aspecto Bella...

- A la que no quiere es a la madre ,no?- Esa propia afirmación me dolió, generó una presión en el pecho, podía respirar, pero era dolorosa. 

- Bella...

No quería seguir esta conversación, por suerte el timbre de inicio de clases retumbó en todo el centro, lo que me trajo a comenzar a recoger las cosas con el móvil pegado al hombro. 

- Lo siento, me tengo que ir, tengo clase. 

- Bella... Estoy para todo lo que quieras... Sé que es doloroso, pero confió que harás todo bien, eres fuerte...- No quería que siguiera hablando, el discurso me lo sabia de memoria de otras situaciones.

- Gracias. Te tengo que dejar, adiós.

Antes que contestase apreté el botón rojo. Fui directamente a clase, hice las explicaciones necesarias y les puse  a leer un texto con la excusa de un mal comportamiento. No me gustaba este comportamiento en los profesores, pero en este momento el miedo de no poder seguir hablando era demasiado fuerte como para ser una buena profesora. El pensamiento de que era última clase y que a estos adolescentes del daba igual, con tal de no tener deberes para el fin de semana, me consoló.