Capitulo 5

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El ambiente seguía siendo tenso. Me encontraba en la cama, aún sentada, con el edredón en las piernas. Seguía pensando sobre el verdadero por que de su visita. Algo no cuadraba.

La voz de Jasper me sorprendió y su comentario me avergonzó. 

- Te queda bien la ropa de Edward. Un poco grande... Pero bien.

Estaba segura que parecía un tomate. Con esta luz por fin puede ver como eran las prendas que llevaba. La camiseta era de un azul claro, más bien pálido,  sabia que se la había visto puesta, en que momento era difícil de decir. Mientras que el chándal era blanco, Estaba segura que nunca lo había visto. Demasiado blanco. 

- Tienes suerte que no te quede mal. Te haría cambiarte en ese caso. Sé que no tienes intenciones de hacerlo.- Dijo Alice con su voz aguda.  

Era cierto... no me apetecía ponerme la ropa usada de la otra noche. Estaba sucia. Esa era la escusa que pensaba usar. Obviamente no tiene que ver nada con cierto olor que seguía en las telas que tenia sobre mi desnudo cuerpo... o el simple hecho que sean suyas. Claro que no.

- Hemos traido comida!- su chillido me sobresalto. No había sido hasta este momento que me había percatado de mi hambre. Por lo tanto asentí con la cabeza y le agradecí el detalle. 

Bajamos a la planta inferior, no sin antes casi caerme en las escaleras de caracol y desequilibrándome. Por suerte Alice sujetó mi codo haciendo que no acabase rodando por la escalera y con una visita poco agradable al hospital...

Al llegar a la cocina me tendieron una bolsa que contenía mi comida. Mientras buscaba un plato, un baso o algún utensilio para comer, iniciaron una charla informándome sobre todas las nuevas noticias: 

- Carlisle, como era de esperar con su gran reputación, encontró un trabajo en el hospital de la zona donde nos encontramos, ya sabes. Esme esta encantada con la nueva casa, era uno de sus proyectos que no acababa de tener claro, pero ahora no se arrepiente ninguna línea del plano. Emmett sigue indignado por tu ausencia... Dice que eras un centro de apuestas muy bueno, todo y que siempre perdiese...- Esta ultima información me generó un sentimiento de dolor. El hermano preferido de mi antigua pareja, aquel amigo que siempre me había cuidado... Que estaba dispuesto a aceptarme dentro de la familia en un cerrar de ojos... me sentí culpable de haberme ido después de defenderme tantas veces...-.

-Alice...- Jasper pronunció su nombre como si me estuviera dando una señal.- Creo que deberíamos hablar de otra cosa, no crees?

Supongo que intentar hacer cara de póker con un vampiro capaz de sentir tus sentimientos era inútil. Pero estaba agradecida de este desviamiento del tema, agradecí silenciosamente a Jasper mientras abría la bolsa de comida. El olor de queso fundido inundó mis nariz. Siempre me había gustado el queso, pero mi estomago se contrajo creándome una arcada. Volví a inhalar el olor. Esta vez la arcada fue mucho mayor. Se me cayo la bolsa de las manos y corrí hacia el baño. Daba gracias que pudiera abrir la taza del baño antes de expulsar el vomito por mi boca. En unos segundos Alice (que había chillado mi nombre desde la cocina) estaba a mi lado.

- ¿Qué ha pasado? No he visto venir eso...

Apoyé mi cabeza en el inodoro sabiendo que no estaba sucio. El frio era agradable y me ayudaba a luchar contra las nuevas arcadas. 

- El olor... No sé lo que ha pasado Alice... Es la primera vez que vomito por eso.- Era cierto. No había estado vomitando hasta el momento. Cuando sospeche de el embarazo fue por culta del periodo y los mareos.

- No he visto que esto sucediera, que el bebe estuviera, es raro, siempre que has estado legos de el chucho he podido verte...- Dijo en voz alta, todo y que parecía que pensase en voz alta. No me lo decía a mi.

Vueles a ser tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora