Lost in The Maze // Thomas

Capítulo 34

—mierda, no no— exclamó Teresa cuando Thomas cayó al suelo terminando sentado a mi lado. —sostengan esto en sus heridas—

Nos dijo poniéndonos trapos para evitar que la sangre siguiera saliendo.

—Teresa— le hablé —debes irte—

—¿qué? No, no voy a dejarlos aquí—

—no podré aguantar mucho tiempo caminando y Thomas está igual, o incluso peor que yo—

—vete ahora que tienes tiempo, Teresa— le dijo Thomas

—no, no me iré sin ustedes—

Las puertas de la sala donde estábamos se abrieron y enseguida supimos que era Janson.

—quedense aquí y no hagan ruido— nos susurró ella y se fue gateando hacia el lado apuesto de donde estábamos nosotros.

—lo admito, Teresa, me engañaste, creí que éramos amigos— dijo Janson —quizá sea parte de tu naturaleza traicionar a los más cercanos a ti— de pronto se oyó un disparo —vamos, no prolonguemos esto, ambos sabemos que no hay salida, no lo hagamos más doloroso de lo necesario—

Me asomé un poco y en ese momento Janson encontró a Teresa. Desde donde Thomas y yo estábamos podíamos verlos. Pero él no nos veía, solo ella.

—creo que tienes algo mío— le dijo apuntándole con el arma. Teresa se levantó y le mostró la cura. —eso no ¿dónde está ella?—

—tómala y ya— le dijo ella —déjala en paz—

—¿ahora le tienes mucho cariño? Si no mal recuerdo odiabas que Thomas siempre fijara su atención más en ella que en ti, por eso hiciste todo eso de enviarles una nota diciendo que eran hermanos en el laberinto— le dijo —para ti es mucho mejor quitarla del camino, así Thomas estará a tu disposición—

—no— le dijo ella —sé lo que hice y porqué lo hice, pero Amy nació con un don, que gracias a Thomas evolucionó, es como si ellos estuvieran destinados a estar juntos y nunca quise darme cuenta de eso— miré a Thomas y el tomó mi mano, dándole un ligero apretón —ambos merecen vivir, no hay pareja más perfecta que ellos dos—

—¿qué dices tú Amylia?— habló Janson —después de todo lo que Teresa te hizo, a ti y a tus amigos ¿vas a perdonarla? Tal vez tú no le pudiste dispararle, pero yo sí—

Vi que junto a nosotros habían dos bancos de metal, si los lanzábamos con la suficiente fuerza podríamos romper el cristal de donde estaban los cranks y así atacarían a Janson.

—bien, si es lo que quieres— dijo Janson

Miré a Thomas y sin necesidad de decirle nada me entendió, tomamos los bancos y nos levantamos.

—Janson— grité y ambos los lanzamos con todas las fuerzas que nos quedaban.

Janson obviamente se agachó para que no le dieran los bancos y estos impactaron directamente al cristal.

—fallaron— nos dijo sonriendo orgulloso mientras dirigía su arma hacia nosotros

—¿estás seguro?— le dijo Thomas

El cristal detrás de él comenzó a quebrarse, hasta que se rompió por completo dejando salir a los cranks. Que se lanzaron directo a él. Teresa rápidamente se acercó a nosotros.

—vamos, tenemos que irnos—

—tienen que irse, no puedo correr con la pierna así— les dije

—Amy, no pude salvar a Newt y no pienso perderte a ti tampoco, así que no voy a dejarte aquí— me dijo Thomas acercándose a mi para cargarme en sus brazos.