Lost in The Maze // Thomas

Capítulo 4

-¿a donde me llevas, Tommy?- le pregunté

-solo sigueme- me dijo -escúchame, antes de entrar quiero que sepas que siempre te voy a amar, pase lo que pase, siempre estaré contigo, cuidaré de ti hasta él último día de mi vida-

-Thomas ¿por qué me dices todo eso?- le dije confusa

Cerró los ojos y suspiró, tomó mi cara entre sus manos y unió sus labios con los míos en un apasionado beso.

Después de unos segundos nos separamos y me tomó de la mano.

Llegamos a un laboratorio donde había algunos jóvenes acostados en camillas, amarrados de las manos y los pies,  y había doctores de Cruel con inyecciones en sus manos

-Thomas- le dije

-lo siento, Amy- me dijo

-¿que...-

De pronto sentí como me agarraron de los brazos, inmovilizándome

-¡Thomas!- le grité -¿¡Por qué haces esto!?-

-Thomas siempre ha sabido que es lo correcto- dijo Janson entrando a la sala y poniéndose junto a Thomas

-¿lo correcto?- dije confundida

-tienes que ir a las pruebas del laberinto, tú eres muy valiosa y tenemos que ponerte ahí para explorar tu zona letal- dijo Janson

-pero, después de todo lo que pase, todo lo que me hicieron pasar, creí que ya era parte de ustedes- les dije

-siempre serás parte de nosotros, pero por ahora- dijo e hizo una seña con su mano, de pronto sentí como me inyectaron algo en el cuello -tendrás que sufrir un poco-

-Thomas- lo miré

-lo siento mucho, Amy- me dijo -esto es por el bien de todos-

-no..¡No! Thomas ¡No dejes que me metan ahí!- le grité -tú sabes los horrores que hay en el laberinto, no quiero pasar por todo eso ¡Ayudame! ¡Thomas!-

Mis gritos eran en vano, ya que Thomas solo tenía la miraba agachada, estaba empezando a perder la noción de lo que sucedía a mi alrededor y miré por última vez a Thomas

-Te Amo, Amylia- me dijo mirándome

-¡No! ¡Thomas!-

-¡No!- grité mientras despertaba muy angustiada

-¿Amy? ¿estás bien?- me preguntó Thomas mirándome preocupado

-sí, solo fue un sueño- le dije -o eso creo...-

-¿quieres hablar de ello?- me preguntó

-no entendí muy bien que estaba pasando- le dije confundida -estabas tú y me llevabas a un lugar en donde me inyectaban algo para después meterme a lo que otro hombre llamo, las pruebas del laberinto-

-¿yo ayudaba a alguien a meterte a este lugar?- me dijo algo confundido

-algo así, creo que ambos éramos parte de las persona que nos metieron aquí- le dije

-¿y qué hicimos para que nos metieran aquí si éramos parte de ellos?- me preguntó

-no lo sé- le dije. Me miró fijamente y me abrazó

-¿crees que solo fue un sueño? ¿o realmente pasó?- dijo y me miró -yo nunca ayudaría a nadie para meterte aquí-

Unió su frente con la mía y ambos cerramos los ojos. Nos separamos y él sonrió