Nuestros sentimientos son mutuos...

De visita

Ella cuando él se separa, le mira sonriendo y apoyando su frente en el hombro de Serkan.

La mano de Serkan está en el pecho de Eda. La de Eda viaja al corazón de Serkan.

¿Vuelve a su ritmo normal en algún momento?— pregunta ella.

Serkan sonríe y le besa la nariz — debería....

No saben el tiempo que han estado así hasta que Eda bosteza. Él le acaricia la mejilla con cariño

Tengo que levantarme Eda... — le dice apartándola de su regazo.

Eda suspira cuando sus cuerpos dejan de tocarse y se acurruca en la cama.

Cuando Serkan vuelve del baño, después de una ducha rápida y un cambio de pijama, ella no se ha movido. Está solo con las braguitas hecha un ovillo en medio de la cama.

Serkan coge el camisón anteriormente descartado y se lo pone sin que ella mueva una pestaña. Y se coloca él con su mano atrapando sus latidos y se duerme sin siquiera contar el primero.

Cuando se despierta Eda está sola en la cama y lleva el camisón puesto, sonríe y se va a la ducha.

Cuando baja, Serkan está acabando de poner cosas en la mesa.

Pensé que dormirías hasta mañana...— sonríe desde la mesa.

Ella se sienta en la mesa, pero no le mira.— podrías haberme despertado y podríamos haber hecho el desayuno juntos...— dice ella picando una ciruela de la mesa.

Estabas cansada... y dormías plácidamente...— dice Serkan mirándola pero ella no le devuelve la mirada.— ¿café?

Si por favor — dice ella mirando la ciruela.

Cuando Serkan le pone el café en la mesa y se sienta, coge una rodaja de pan para quitarle la corteza, cuando se la alarga a Eda, ella la coge sin mirarle. Él no la suelta y ella al romperse la rebanada si le mira.

¿Que pasa?— pregunta Serkan 

Nada, ¿que tiene que pasar?— dice ella apartando de nuevo la mirada.

Eda... ¡Mírame! Eh... — le dice él levantándose y apartando la silla para ponerse de cuclillas ante ella— dime que pasa....

Nada— dice ella tímida.

¿Nada? Tu no eres de las que apartan la mirada... dijimos que no iba a cambiar nuestra amistad... ¿que pasa? Podemos dejarlo como si no hubiera pasado nada.... — dice Serkan.

¿Eso el lo que tu quieres? Pensé que habías disfrutado — dice Serkan.

Lo disfruté y pensé que tu también.... Por eso no entiendo tu actitud de ahora... dijimos que lo hablaríamos todo... que no nos quedaríamos nada dentro.... ¿Que pasa?— dice Serkan con miedo.

Bueno... digamos que .... — empieza cuando nota que se está poniendo colorada de vergüenza.— yo, Argh Serkan, no se como explicarlo.... Si te miro no te quitaría las manos de encima.... Y no se hasta donde.... No se lo que tu sientes... y....

Serkan la besa en la boca no dejándola acabar — me gustas Eda Bolat, puede que mas de lo que me gustaría. Me gusta todo lo que hago contigo, si fuera por mi hoy, ahora, no pondría fecha de caducidad a esto... me olvidaría de los dos años para poder sentir esto cada día hasta el día en que me muera. No se ponerle nombre... te dije que no quería querer, pero eres muy importante para mi... solo tu haces que mi corazón de volteretas de pensarte. No puedo decirte mas... solo que respetaré lo que tu quieras hacer... creo que he vuelto dependiente de ti en mis noches... pero podré volver a mi rutina anterior si decides que es demasiada responsabilidad...no quiero forzarte a nada... no quiero que pienses que tienes una obligación conmigo por haber pagado tus deudas... quiero que estes conmigo porque quieres estar... yo te cuido y tu me cuidas... — le dice poniéndole el pelo tras la oreja y le acaricia la mejilla.