CAPITULO XXXIII

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Cuando Jungkook volvió a despertar ya no estaba abrazado a Tae por lo que su instinto entro en pánico en menos de un segundo haciendo que se sentara en la cama como un resorte soltando un gemido de dolor cuando sintió que su cuerpo parecía a punto de partirse en dos,

-Joder -jadeo ante ese dolor,

- Jungkook-ah? -la voz de Tae proveniente del piso de abajo le hizo alzar la cabeza y cuando escucho que estaba subiendo las escaleras, su corazón se acelero, notando sus mejillas arder ligeramente, no sabiendo de repente ni siquiera como mirarle -estas despierto?

Jungkook se abrazo al edredón cuando vio aparecer a Tae vistiendo una sudadera blanca y un pantalón negro de chándal a juego, Tae le miro sin ocultar cierta ansiedad.

-Eyy precioso, que tal estas? -le dijo acercándose lentamente como si temiera asustarle y Jungkook se sonrojo aun mas, por lo que bajo la mirada.

-No estabas... -susurro y el suspiro de Tae resonó en la habitación.

-Lo se, lo siento, me desperté con el sonido del móvil y no quería que te despertara a ti, ademas de que necesitaba saber si era algo urgente por eso me levante -le explico y fue suficiente para que Jungkook levantara la cabeza y le mirara asustado,

-No volviste a la cama... y te has vestido... vas a marcharte -le dijo y por el gesto que hizo Tae supo que había acertado, por lo que bajo la cabeza, la desilusión apoderándose de él...

-Se a convocado una reunión de ultima hora -le confirmo y Jungkook bajo aun mas la cabeza.

-Vamos mirame -le pidió Tae sentándose en la cama cara a él, pero Jungkook aparto la mirada hacia el otro lado, intentando cubrirse con el edredón, ya de por si, siendo esa situación lo suficientemente incomoda, como para añadirle que aun iba desnudo, Tae suspiro y se movió lo justo para sentarse mas cerca de él y a si poder cogerle ambas manos y tirar de ellas para que soltara el edredón.

-Ey precioso... mirame -insistió Tae tirando de sus manos con suavidad y al ver que no conseguía su objetivo las alzo hasta llevarlas a sus labios.

-Aunque me tenga que ir, no he olvidado nada de lo que paso anoche y tampoco que tenemos una conversación pendiente -susurro mientras le besaba los nudillos de la mano, haciendo que Jungkook se encogiera ligeramente con el solo roce de sus labios, sintiéndose demasiado desilusionado y confundido como para decirle nada, de verdad que esperaba poder tener esa conversación con él, pasar el día juntos y ahora se daba cuenta de que nada había cambiado.

-De verdad no vas a mirarme? -le pregunto Tae soltando una de sus manos para cogerle del mentón con toda la ternura del mundo girando su cabeza hasta tenerle de cara, obligandole a si a que le mirase, cuando lo consiguió le sonrió con suavidad antes de volver a hablar -me hubiera encantado despertarte con un increíble y dulce sexo matutino y poder retozar el resto del día en la cama, susurrarte entre besos lo feliz que me siento después de pasar la noche contigo como la pase... pero tengo que irme y no quiero que eso haga que te sientas mal, ni triste ni mucho menos que tu cabecita piense cosas que no son... así que por que no te quedas en la cama y duermes un poco mas, cuando regrese te prometo que apagare el móvil y tendremos esa conversación, después podemos hacer lo que quieras, podrás patearme el culo o volver a la cama y tener ese sexo que no tuvimos ahora... si?

Jungkook le miro mientras hablaba, suavizando muchísimo la voz, mirándole directamente a los ojos, como si con eso quisiera que Jungkook viese que lo que le estaba diciendo era la verdad, aun así soltó un bufido de fastidio, que hizo que Tae sonriera de lado y le soltara el mentón para resbalar la mano por su cuello, por su hombro hasta meter la mano dentro del edredón para buscar su cintura, Jungkook se estremeció visiblemente, pero no se quejo.

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