Te he visto. En mís sueños.
Me vigilabas desde una ventana, desde la de mi corazón.
Te he visto. Andando por las calles de mís recuerdos.
Escondida tras árboles de hoja caduca, como yo.
Te he visto. En el cielo, desde el infierno.
Y de repente he mirado a un lado y sí, te he visto, agarrada de mi mano.
Y he visto como se iba la tormenta y se ponía el arcoiris y la luz del sol.
Me he quedado llena por sonrisas tuyas de aquellos labios que cicatrizan hasta las heridas más profundas de mi corazón.
Te he entregado mi corazón y he visto como has sido la primera persona que lo ha tratado con cariño.
Me he vuelto frágil e invencible al mísmo tiempo por tenerte.
Te he visto y te he querido.
¿Y después? Después he despertado otra vez.
Y puede que ya no te viese, pero te sigo queriendo como siempre o incluso más fuerte.
ESTÁS LEYENDO
Poemas a un ángel
PoesiaTan sólo unos cuantos versos, de ti. Tan sólo algo de poesía, como tú. Tan sólo para ti. Tan sólo tú.
