En la sala de una casa se encontraba una pequeña niña de 10 años esperando a su primo para jugar como le prometió hacer, pero poco sabía que eso no iba a cumplirse porque un niño moreno apareció muy preocupado y alertando a la niña de ojos oscuros.
—¿Qué sucede Scotty?—preguntó la niña acercándose a su primo muy asustada por él, no podía correr por su asma y eso es algo de lo que la pequeña siempre tenía presente.
—Mi a...amigo...su mamá... él...—el niño jadeaba por aire haciendo que la pequeña fuera por su inhalador antes de ocurriera algo peor.
—Aqui tienes, respira lento y cálmate—La niña le sobaba la espalda con cariño— ¿Mejor?—preguntó cuando vio que su primo ya podía respirar normal
—Si...gracias
—De nada ¿Ahora me dirás por qué corriste así?—preguntó la niña curiosa
—La mamá de mi amigo Stiles murió—miró a su prima preocupado
—¿Quieres ir a verlo, verdad?—el pequeño asintió—bien...iremos—La pequeña le sonrió al pequeño Scott
...
En una sala de espera sentado en una de las sillas incómodas del hospital se encontraba un pequeño niño pecoso muy asustado con los ojos llenos de lágrimas y con indicios de un ataque de pánico. Por el pasillo a su derecha se escucharon pisadas muy leves de los dos primos acercándose al niño de lunares.
La niña era la que más cerca estaba cuando notó que el amigo de su primo tenía un poco de dificultad para respirar, la pequeña no sabía si el niño tenía lo mismo que su primo o era diferente, no lo tenía muy claro pero cuánto mas se acercaba un sentimiento de querer protegerlo aumentaba a niveles muy alto, no lo conocía de nada, pero algo le decía que tenía que parar lo que le pasaba antes de que algo malo ocurriera.
—Stiles...?—La niña se acercaba muy lentamente sin querer invadir su espacio personal—Debes seguir mi respiración ¿De acuerdo?—el niño no parecía escucharla así que se le ocurrió que podía cantarle algo para llamar su atención—Como me apena el verte llorar
Toma mi mano, siéntela
Yo te protejo de cualquier cosa
No llores más, aquí estoy—La voz angelical de la niña hizo que el niño dejara de llorar y volviera a respirar parando así su pequeño ataque, al ver que el pequeño subió su mirada para verla, siguió cantando para hacerle saber que estaba junto a él—Frágil te ves, dulce y sensual
Quiero abrazarte y te protegeré
Esta fusión es irrompible
No llores más, aquí estoy—No tenía idea del porqué fue la primera cosa que se le ocurrió hacer pero estaba funcionando.—¿Estás mejor?—preguntó la pequeña con una ligera sonrisa
El niño no podía dejar de ver a la niña que tenía en frente; era la más hermosa que había visto en su corta edad, ni siquiera Lydia pudo dejarlo tan embobado cómo lo hizo la castaña que tenía en frente, sonriéndole para calmarlo. Cuando giro su rostro levemente hacia la derecha logró ver a su amigo Scott detrás de la niña.
—Si...
—¡Genial! Mi nombre es Athena Delgado—Le extendió su mano para que pudieran estrecharla
—Mi nombre es Stiles—Le agarró la mano pero lo que no se esperaba era que lo jalará hacia ella para darle un abrazo, ahí Stiles no pudo aguantar mucho más tiempo y volvió a llorar ahora en los brazos de Athena.
—Llora todo lo que quieras mi pequeño Stiles, aquí estará Athena para salvarte—La niña lo atrajo más hacia ella con cariño mientras seguía cantando esa canción que había escuchado de una de sus películas favoritas.
Scott se acercó poco a poco y se quedó al lado de ellos como si de un guardián se tratase.
En ese preciso momento algo cambió en las vidas de Stiles y Athena, un brillo entre dorado y morado apareció enredándose desde sus brazos hasta llegar a sus manos conectandose por hilos brillantes para luego desaparecer tal y como vino, al ser tan jóvenes no entendían el sentimiento que les recorrió al abrazarse por primera vez, y si, ahí en medio de ese pasillo de hospital si historia comenzó... Stiles necesitaba a alguien con quién se sintiera querido y Athena llegó a su vida para cambiarlo todo.
Al final del pasillo se encontraba May Alexiou viendo la escena de los tres niños, la mujer no cabía en su asombro por el acto de su pequeña hija. Ella no esperaba que eso ocurriera tan pronto.
—Está pasando...—susurró con un brillo en los ojos.
Su pequeña lo había encontrado...
Jai papá, debo admitir que esto no estaba planeado pero se me ocurrió gracias a la inspiración que me dió un libro, aunque el romance no es lo principal aquí pero meh, debía hacer una pequeña a lo que verán de la relación de esos dos jajhjajaja ahora sí, sin más preámbulo me voy.
Grecia out
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ᴀ ꜱᴘᴀʀᴋ ᴏꜰ ᴘᴏᴡᴇʀ - ᴛᴇᴇɴ ᴡᴏʟғ
FanfictionUna venezolana en Beacon Hills...¿Qué problemas podría causar? Más fácil es no haber dicho eso; Alfas sangrientos, Un demonio bromista, Caza masiva de criaturas sobrenaturales. Mi estadía fue todo menos tranquila, Beacon, el imán de l...