Capitulo 1

93 5 4
                                    

Cada vez que tengo miedo de tomar una decisión o de probar algo nuevo mi madre me dice que nuestra vida es como una avenida con muchos caminos diferentes por delante y que gracias a los errores que cometemos llegaremos a casa. No se entiendo muy bien esa frase, tal vez soy muy tonto todavía pero confío en mi madre, ella es muy sabia, por ahora solo debo preocuparme por la preparatoria.

- Odio este clima. Dije al mismo tiempo que me limpie el sudor con mi brazo.

- Aunque es mucho mejor que el frío, odio odio el frío.

Seguí caminando por la calle, subí a la banqueta y escuche alguien gritar. Así que me quite los audífonos y mire alrededor.

- Scott!, espera por favor.

- ¿Que pasa?

- Pff!, ¿que ya no puedo tomarme el tiempo para saludar a un viejo amigo?

- Jajajaja, cierto perdóname Alex, aunque lo tendrías sino estuviéramos llegando tarde a clase jajaja.

- Aun así hola!. Dijo mientras estrechaba mi mano.

- Hola!, vamos que no debemos llegar tarde.

Corrimos hasta llegar a la entrada donde saludamos al guardia y seguimos caminando, subimos las escaleras hasta el tercer piso lo mas rápido que pudimos y abrimos la puerta.

- Llegan tarde.

-(No me diga), lo sentimos profesor.

- Esta bien pero que no vuelva a ocurrir.

Encontramos asientos y sacamos nuestras libretas de apuntes y escribimos lo del pizarron.

-Pensé que no nos iba a dejar entrar.

- Por dios Alex solo fueron 5 minutos de retraso.

- Hasta me estaba comiendo las uñas, sabes como es este profesor.

- Si lose, por eso es mejor que nos callemos ahora.

Mire hacia mi izquierda y vi que estaba justo a lado mio ese chico raro y solitario, no lo conozco mucho pero pienso que me puede llegar a agradar. Cuando al fin se acabo la clase espere a Alex para salir.

- Esa clase me pareció eterna!. Dijo una compañera de nuestro salón.

- Ella tiene razón amigo, fue eterna y muy aburrida.

- Am no mucho Alex, pero para mi fue interesante.

Y así pasaron las horas y las clases seguían y cuando por fin se acabaron, decidimos ir a la cafetería .

-Oye! Que bonito reloj.

- Gracias, fue un regalo de mi padre aunque el problema es que no puede ajustar bien la hora ni la f.......

- Shhh!, tengo que irme.

- ¿Que? ¿por que?

- Mira! . Señalando a hacia su izquierda

- ¿Que cosa?

- Lo siento adiós amigo. Dijo mientras tomaba su mochila

- Esta bien..... Adiós, creo. Dije preocupado.

Me levante de la mesa y mire como corría Alejandro, cuando se detuvo saludo a una chica pero como mi vista es muy mala me puse mis lentes. Fue entonces cuando me di cuenta que esa chica era Mariana. Salí de la cafetería y me dirigí a la salida, me despedí del guardia y seguí caminando cuando........la vi. Y en ese instante me puse demasiado nervioso, me temblaban un poco las piernas. Era ella no lo podía creer, la chica que con solo ver la me hacia tan feliz,  desgraciadamente ella es mayor que yo, estudia en la universidad . Aun así nunca pierdo las esperanzas de que algún día podríamos salir y caminar juntos de la mano. Llegue y mientras esperaba vi como una docena de patrullas de policía de dirigían a la estación del metro, a toda velocidad. Me sorprendí ya que no es usual ver tantas patrullas así pero decidí no prestar atención a eso y camine hasta mi parada de camión. Cuando este al fin llego solo vi un asiento disponible y cuando me dirigí a el me di cuenta de que en el lado de la ventana estaba ese chico raro de mi salón y decidí hablarle.

- Oye! Te conozco estas en mi salón...... Am encargaron tarea ?. Fue tonto pero era lo único que se me había ocurrido en ese momento.

- Am si.

- Rayos, bueno investigare llegando a casa.

- ok. Respondió

Mire hacia la ventana y pude notar como un grupo de policías intentaban controlar a una persona que los atacaba con violencia.

- ¿Que crees que este pasando?

- No lose pero debe ser una persona muy fuerte como para que esos policías no la puedan controlar. Dije mientras me tocaba la barbilla.

- Tienes razón aunque yo ya le hubiera disparado con una pistola, no perdería mi tiempo en el.

-Oye no!, tu como sabes que esa persona no padece de sus facultades mentales, tal vez esta pasando por un momento difícil.

- Am tal vez pero aun así le hubiera volado los sesos.

-Que sádico eres. Respondí con un tono de burla.

-Lose me gusta ser así. Dijo con una mirada fija hacia delante.

-Esta bien solo aléjate de mi, nah es broma. Sonreí y reí un poco.

-Me agradas, eres un idiota con un buen sentido del humor.

-Tu también me agradas.
.. Ma....?.

-Marshalle, pero sabes algo, es extraño que no hablemos.

De repente el camión frenó de manera salvaje causando que Marshalle y yo nos diéramos un gran golpe con los asientos delanteros.

-Auchhh!

- Dios! Maneja mas despacio tonto!. Dije furioso

-Lo siento lo siento se me atravesó esa patrulla. Gritó el chófer

- vaya golpe que recibimos no marsha....

Entonces cuando aun no terminaba de decir esas palabras,  mire a Marshalle quien tenia una  mirada  terror  hacia la ventana cuando....

- Scott, cuidado!!.

La futura realidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora