ODNOLIUB {DEKUBAKU} [18+] ⏸️

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Heridas y un llamado silencioso.

Izuku.

—Maldicion... — camine a pso lento a la entrada de mi casa sosteniendo mi abdomen.

El conflicto se torno agresivo y terminó en una lluvia de balas donde de milagro salí solo con la herida de bala en mi abdomen y los roces de otras en mis brazos, ingrese la contraseña para entrar al patio y de ahí caminar a la entrada de mi hogar, saque las llaves como pude ingresandolas en la cerradura y abriéndola, camine unos cuantos pasos antes de que mis piernas fallarán y cayera de rodillas, no podria atenderme yo solo.

—Mierda — musite mientras buscaba el arma en mi muslo —Kacchan te necesito — coloque mi dedo en el gatillo — Despierta —dispare hacia un jarrón que se quebró al instante en el que la bala impacto en el.

Escuché pasos apresurados desde las habitación hasta donde me encontraba, ya no tenía fuerzas ni para alzar la mirada y ver su la expresión de Kacchan, se quedó quieto unos segundos al verme tirado y lleno de heridas pero reaccionó rápido y corrió ayudarme a levantarme.

—¡Maldición Deku! — dijo en cuanto llegó a mi —Tengo que llevarte a la habitación será más fácil tratarte ahí — asenti antes de sentir como tironeo mi brazo y me obligó a levantarme.

Por el movimiento me queje pero lo dejé ayudarme a levantarme y camine como pude a la habitación, al entrar me dejo en la cama.

—Trata de quitarte la camisa en lo que voy por las cosas — ordenó antes de salir corriendo.

Hice lo que ordenó como pude y me recosté de nuevo esperando a Kacchan, no deje de hacer presión en la herida para evitar que me desangrara, escuchaba a Kacchan llendo de un lado a otro y tirando algunas cosas al cabo de unos minutos regresó con el botiquín, una aguja y un recipiente.

Vacío un poco de alcohol en el recipiente y metió a aguja dentro para que se desinfectara, se coloco unos guantes y tomó un algodón con una pinzas para luego mojarlo de alcohol y pasarlo por la herida más grande  con el cuidado de no lastimarme, al sentir el alcohol en mis heridas me queje por el ardor, me pidió presionar con una gaza.

—¿Tienes aun la bala? — asentí así que volteo buscando una nuevas pinzas y se preparo para sacarla — ¿Listo? — asentí.

Metió las pinzas y removió la carne buscando sacarla, volví a quejarme pero no hice más que dejarlo curarme, al fin la había pescado y la sacó dejándola en una charola que no habia visto traía, procedió a preparar la aguja, comenzó a coser la herida sacándome nuevamente unos nuevos quejidos, al cabo de unos minutos había cerrado la herida más grave, me hizo sentarme un momento y cubrió la herida con vendas, después procedió a cerrar las otras heridas más pequeñas y solamente desinfectarlas.

—Lo siento manche las sábanas — dije tratando de alivianar el denso silencio.

—Eso no importa idiota — contestó guardando las cosas — Será mejor que duermas en un momento vuelvo.