Marcetty "Un contraataque"

Capítulo 7

Las risas escandalosas no se hicieron esperar al día siguiente, obviamente, todo el cuartel estaba tratando de que Betty hablara sobre su cita con su "novio".

Claro, que a Betty le incomodaba, ella no estaba acostumbrada a mentir tanto, pero al solo ver a Don Armando viéndolas con una cara de furia total, empezó a hablar maravillas que habían pasado la noche anterior, claro cosas que no eran ciertas.

Marcela solo estaba recargada en la puerta de su oficina viendo la escena, se le hacía gracioso todo lo que estaba diciendo Betty, pero cuando vio a Armando su sonrisa se desvanecio.

-Ejem...- Está simple acción hizo que todas voltearan a verlo nerviosas, pidiendo perdón y llendo inmediatamente a trabajar- Beatriz, necesito su ayuda en algo.

Escalofríos sintieron ambas mujeres, la que veía a lo lejos y la que estaba metida en la situación, a regañadientes asientio llendo a presidencia junto con Armando.

Marcela solo salió cruzándose de brazos, viéndolos cómo se iban a la oficina, Patricia llegó enseguida a su lado para empezar a criticar a la pobre de Betty.

-¿Puedes creerlo Marce? El monstruito con novio- una risa sarcástica salió de sus labios- ver para creer Marce.

Marcela solo se quedó parada viendo la entrada de presidencia algo preocupada, Patricia confundída por no recibir respuesta, se acercó a su amiga.

-Marce ¿que tienes? ¿Te sientes bien?- le puso el dorso de la mano en la frente para ver si tenía fiebre, para solo ser apartada bruscamente por Marcela.

Al darse cuenta de como estaba actuando simplemente se escuso que efectivamente se sentía mal para ir al baño de inmediato, dejando a su amiga peliteñida confundida en su puesto de trabajo.

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-¿Me está pidiendo maquillar el balance para la siguiente junta directiva?- Decía Betty mientras fingía sorpresa, claro que Marcela y Betty sabían que Armando le pediría algo como esto, pero no pensó que fuera tan cínico para pedírselo así.

-Si Betty, Vera, si quiero solucionar esto debo seguir como presidente de Ecomoda, por lo que debemos maquillar los balances para que todos crean que todo está bien hasta que usted y yo encontramos la solución a todo esto- "debemos" "usted y yo" tal vez en un pasado le hubiera dado ternura y emoción escuchar esas simples palabras, pero ahora solo sentía un tremendo asco y repudió.

Tomo la posición más serena y tranquila que pudo, y miro a Don Armando con una sonrisa "calida".

-por supuesto don Armando, deje todo en mis manos- ante esto, Armando sintió un gran alivio, y Betty se dirigió directamente a su oficina, cerrando la puerta.

-Pir sipisti din Irmindi- dio un suspiro, burlándose de sus propias palabras, le hervía la sangre tanto asi que podría destrozar la oficina entera en ese momento, pero logro controlarse.

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Nueva Jornada laboral terminada, una pesada para nuestras 2 protagonistas, una aguantando los coqueteos incesantes de Don Armando y la otra tratando de no vomitar por sus "muestras de afecto"

Se aseguraron que estaban solas, así poder platicar más a gusto sobre lo que estaba ocurriendo, pero al parecer no se aseguraron del todo, ya que una peliteñida se estaba ocultando viendo al par platicar tan amenamente sobre temas que nisiquiera ella entendía.

Patricia ya estaba sospechando mucho sobre los comportamientos de su amiga, era tonta, pero no tan imbécil como para no darse cuenta.

Al principio pensó que su amiga tenía un amante, algún novio por ahí que estaba ocultando, pero al verla salir tan tarde de la empresa y ser medianamente buena con Betty la hacían dudar demasiado.