Ataque Mortal - NicoMaki

Capítulo 4

Chika cayó al suelo asustada, mientras que Nico y Maki se quedaron congeladas en su lugar sin saber que harían para poder escapar, era como si de alguna manera se hubieran rendido y decidido terminar con todo apesar de que eso no era lo que realmente querían.

Pero antes de que pudieran siquiera pensar en algo, una mujer con lo que parecía el palo afilado de una escoba salió de detrás de las sillas y mesas junto a dos niñas, una a cada lado de la mujer también con armas improvisadas hechas apartir de utensilios de limpieza.

Tanto Maki, Chika y Nico como la mujer y las niñas soltaron un suspiro de alivio dejándose caer al suelo completamente aliviadas.

—¿No están infectadas verdad?— preguntó la mujer con un poco de desconfianza, apesar de que podía ver que las tres chicas estaban bien.

—No, ustedes tampoco lo están ¿verdad?— Nico fue la que respondió.

—No, estamos bien.— aclaró.

—¿Son las únicas personas aquí?— preguntó Maki.

—Si. En teoría deberíamos de serlo.—

—¿A que se refiere?— inquirió Nico, acercándose a Chika quien aún estaba en el suelo para ver si estaba bien.

—Hoy había un evento escolar fuera de la escuela dónde sólo asistirían unos pocos alumnos sobresalientes en diferentes áreas, cada profesor se haría cargo de dos alumnos por lo que las clases para los demás estudiantes se cancelaron por la falta de personal docente el día hoy. Estas dos pequeñas estaban a mi cargo el día de hoy, pero debido a unos problemas nosotras tres volvimos antes que todos los demás, a medio camino fuimos atacadas por esas cosas, así que nos quedamos aquí esperando que la policía nos rescatara.— relató la mujer que parecía ser una profesora de primaria.

—No creo que venga nadie.— dijo Maki de manera pesimista.—Lo mejor será que nosotras mismas vayamos a un lugar seguro, esto no es como en las películas, la policía no se arriesgara a morir en manos de esas cosas para salvar a simples civiles, ya debieron haberse resguardado en algún lugar hace mucho tiempo.—

Un incómodo y lúgubre silencio se apoderó del lugar antes las duras pero muy probablemente ciertas palabras de la pelirroja.

—Disculpe...— el silencio fue roto por una de las pequeñas niñas, quién tenía sus mejillas sonrosadas, acercándose a Nico.

—¿Que sucede, pequeña?— Nico intentó sonreír apesar de que le resultaba muy difícil, pero no quería que las niñas se asustaran por las palabras de Maki.

—Usted es Yazawa Nico ¿verdad?— inquirió acomodándose los lentes intentando cubrir un poco su ya muy sonrojado rostro.

—¿Me conoces?— Nico se impresionó un poco ante la situación.

—¡Si, soy una gran fan!— exclamó sin poder evitar verse muy emocionada.—¿Podría darme su autógrafo?—

El ambiente se tornó menos tenso gracias a la pequeña, algo que internamente todas agradecieron.

—Pero Kayo-chin, no hay papel ni plumones para que pueda darte un autógrafo.— le recordó la otra pequeña.

—Tu amiga tiene razón, ¿que te parece si te doy mi autógrafo una vez que todo vuelva a la normalidad? Incluso te daré entradas gratis para uno de mis conciertos de mi próxima gira.— le sonrió dulcemente aunque no sabía si realmente seguirían vivas mañana.

—¿Lo promete?— la pequeña de lentes levantó su dedo meñique para hacer una promesa.

—Lo prometo.— enlazó su meñique con el de la pequeña firmando una promesa que no estaba segura de cumplir.