°•Picante•° [DekuKatsu]

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El tiempo pasa volando, cuando se da cuenta ya son las 9pm. Decide ir a su cuarto y cambiarse, no sabe si en verdad arreglarse o ponerse su pijama, ya que no estaba seguro de que lo saquen de su casa sin llamar la atención. Aunque sea de las sirvientas qué cuidan que este durmiendo bien por la noche.

Se podría decir que esta preparado ahora, después de todo se puso lo que usualmente usaría para salir y arriba el pijama por si vienen a visitarle alguna sirvienta.

Se acuesta en la cama y espera un rato. La espera es tan aburrida, mira la hora en él reloj de su mesita de luz. Ya son pasadas las 10 de la noche, tal vez sus amigos se rindieron, así que decide dormir.

Inconscientemente se había  ilusionado, salir de esa mansión escapándose hubiera sido muy divertido, aun si lo atrapaban.

Escucha la puerta abrirse, finge estar durmiendo, sabe que una de las sirvientas que le supervisaba vino a visitarle. Espera un rato hasta que siente como la puerta de su cuarto es cerrada lentamente hasta que la luz del pasillo ya no entra más.

Suelta el aire que inconscientemente estuvo conteniendo, casi le daba un paro al darse cuenta de su estupidez. Por que se ilusionaba tanto por salir si ya sabia qué ninguno de sus amigos eran tan buenos como para sacarlo con una estrategia divina.

Y es qué, sabia bien que nadie podía traspasar los muros, estaban tan llenos de protección por el simple hecho de cuidarlo, como si fuera una mercancía de oro la cual tenia que ser protegida.

Que equivocado estaba.

ㅡ Es allí, en la ventana de allá...ㅡ Apunta en un susurro.

ㅡ Bien.ㅡ

Izuku se encontraba ya algo adormilado, aunque los pensamientos negativos de todo lo que estaba viviendo eran más fuertes, manteniéndolo despierto, pero eso no duraría tanto tiempo, sus ojos ya se estaban cansando del aburrimiento que sentía de mirar solo el techo.

Sus ojos se van cerrando, hasta tal punto de dormitar, claro que se hubiera ido al 5to sueño si no fuera por el suave ruido proveniente de la ventana. Se asusto mucho, y es que el había cerrado la ventana con seguro! Y era imposible, según él que se abriera así sin más.