𝗖𝗨𝗘𝗡𝗧𝗢𝗦 𝗗𝗘 𝗛𝗔𝗟𝗟𝗢𝗪𝗘𝗘𝗡

MOLESTO CABALLERO DE ARMADURA DORADA

OCTUBRE 31 de 1999

"Aaaaaaahg". Haibara acababa de levantarse, un poco agotada había estado la noche anterior leyendo un libro así que se consumió en la lectura.

"Bueno días Ai-kun". dijo el profesor al ver que la chica caminaba con algo de torpeza hacia la cocina.

"Buenos días profesor". ella se trepo a la silla más cercana a la cafetera para servirse un poco y justo en ese momento...

"¡Buuu!". grito alguien saliendo debajo de la mesa con una máscara de esqueleto.

"...". Haibara lo miro por unos segundos, como si no entendiera lo que acaba de pasar y volvió su atención a la taza de café.

"Debes estar bromeando..."

"Que esperabas tengo casi 19 años, que creías que gritaría como una cría...". ella lo volvió a mirar esta vez volteando la cabeza a un lado... "Y, primero que nada, ¿qué demonios haces aquí a esta hora un sábado por la mañana? ...". dijo ella mientras alzaba una ceja, el chico estaba por decir algo hasta que vieron cómo Shuichi quien se había mudado oficialmente a la casa del profesor entraba, Shinichi podía jurar que Haibara tiraba dagas con sus ojos hacia el hombre que acababa de entrar a la casa del profesor, aunque eso ya era una costumbre, podrían pasar los años y Ai jamás dejaría de mirar asi a Shuichi... además ambos vivian juntos... eso debía se pan de cada día.

"¡Buenos días!". dijo el hombre con una amplia sonrisa, mientras que Haibara hacia un movimiento con la cabeza a modo de respuesta el profesor y Shinichi le respondían.

Mientras que el profesor y Shuichi charlaban Conan miro fijamente a Haibara, y esta al notarlo empezó a hacer muecas raras con la cara a lo que Shinichi abría la boca exageradamente.

"¿Acabas de hacerme muecas con la cara?"

"Que esperabas, me miras de manera extraña..." dijo ella mientras se alejaba exageradamente. "¡Deja de mirarme!"

"Te he dicho alguna vez que eres rara."

"¡Disculpa!". se rio cínicamente "Tu eres el raro" dijo ella estrechando los ojos. "y no me respondiste que haces aquí un sábado por la mañana."

Conan iba a responderle, pero noto como se les acercaba Shuichi, y Haibara volteo a mirar al hombre con frialdad.

"Buenos días princesa" dijo el joven mientras miraba alternativamente a ambos chicos. "Kudo-kun."

"Retiro lo dicho...". dijo Haibara mientras ponía los ojos en blanco. "él es el más raro aquí." decía la chica tomando la taza en sus manos dispuesta a regresar a su a habitación, Shinichi la miraba con un tic nervioso en el ojo el juraba que el cualquier momento ella saldría a cazarlos para después utilizar objetos de tortura con ellos como conejillos de indias.

"Por cierto, me gusta cómo se ven tus pijamas..." dijo el chico de las gafas en voz alta, Shuichi solo retraía el rostro procesando lo que acaba de decir el niño, mientras que el profesor lo miraba con exasperación... buscar pelea a tempranas horas de la mañana, Haibara al escuchar esto paró en seco, sentía que el calor subía por sus mejillas.

"Ah... ¿disculpa dijiste algo?". pregunto la pelirroja mientras alzaba una ceja mirando al chico que tenia una sonrisa lobuna en el rostro.

"Dije que me gusta cómo se ven tus pijamas.". dijo el chico riéndose, Haibara llevaba por pijama una camiseta ni muy corta ni muy larga y unos pantaloncillos cortos con conejitos...

"¡Tú pervertido!". Haibara ahora lo volteaba a mirar con una cara seria que no mostraba ningún gesto...

"Y ahora dejaste de ser tierna para parecer un ogro." dijo el chico de nuevo mientras hacia un débil puchero, Shuichi quien estaba en una esquina tuvo que taparse la boca para que la chica no viera el intento del hombre por esconder su risa, y el profesor había desaparecido por arte de magia.

"¡Tu...tu...Aaaaahrg!" decía la chica mientras daba grandes pisadas hacia donde se encontraba el chico.

"Me vas a decir que me amas.". dijo el chico de gafas aun sin parar de reírse.

"¡Te voy a matar!". exclamó la chica mientras se quitaba la pantufla derecha para aventarla al chico que no paraba de reírse y había echado a correr, y detrás de él la pelirroja hecha una furia.

"¿Cree que debería detenerla?" preguntó el joven al profesor algo divertido, al ver la escena que tenía frente a sus ojos.

"No, déjalo ella se encargará.". dijo el profesor riéndose junto a él joven que estaba de pie a su lado.

XXX

HORAS MAS TARDE...

Ran se había ofrecido a llevar los disfraces a la casa del profesor, Haibara se encontraba colocando las decoraciones junto a Shuichi quien la cargaba sobre sus hombros.

"Ai-chan, Akai-san." saludo la chica entrando a la casa en compañía de Shinichi quien estaba disfrazado del conde Drácula.

"Hola Ran." saludaron ambos, mientras que esta les sonreía.

"Traje tu disfraz Ai-chan." dijo la chica aun con una sonrisa en el rostro.

"Oooh...". dijo ella mientras le hacía señas a Shuichi para que la dejara volver al suelo a lo que el joven obedientemente el bajo de sus hombros a la chica y esta empezaba a caminar hacia donde se encontraba Ran con los disfraces.

XXX

"Ridículo... tengo que quitarme esto" dijo la pelirroja mientras se miraba en el espejo.

"Ai-san te vez hermosa." dijo Ayumi emocionada.

"No."

"Si.". dijo Shinichi uniéndose a la discusión.

"No."

"Y Yo te dije que sí."

"Y a ti nadie te pido tu opinión."

"Hazle caso princesa...". dijo Shuichi esta vez quien llevaba un disfraz de lobo.

"Y a ti nadie te llamo para empezar.". dijo Haibara mientras estrechaba los ojos a lo que el joven se reía.

Haibara después de ese momento incómodo decidió bajar a la sala... se le antojaba algo dulce asi que decidió ir por una chocolatina cuando estaba por tomarla y al ver que no la alcanzaba decidió subirse a un taburete... no es que fuera muy baja, pero la tarrina con chocolates por alguna extraña razón se encontraba en la alacena de arriba donde claramente la ponía en desventaja, cuando estaba por bajar de este había pisado mal provocando que este se tambaleara con ella sobre el Shinichi quien estaba cerca noto lo que había ocurrido asi que decidió ir al rescate tomando a la chica en sus brazos.

Haibara no salía del asombro mientras sentía como se sonrojaba, los niños preocupados al ver como la niña estaba por caer suspiraron de alivio al ver que Shinichi la sostenía y Haibara no se pudo resistir.

"Me gustas..." dijo ella levemente en un susurro asombrándose a sí misma...

"Oh, así que era eso.". dijo el con un poco de arrogancia.

"Que no eso no era lo que..." Shinichi la callo con un beso en la frente.

"Qué te parece si la próxima tenemos una cita, princesa." dijo el chico mientras le guiñaba un ojo y el rostro de Ai se volvía gradualmente rojo.

"Que... yo... no"

"Vamos no te gustaría tener una cita, con tu fuerte caballero de armadura dorada." dijo el riéndose levemente mientras la tomaba desprevenida delante de todos para robarle un piquito...

Los niños se reían con fuerza mientras que los adultos veían como una la chica disfrazada de caperuza salía corriendo con un bastón de plástico tratando de alcanzar al conde Drácula que al notar la mirada de su chica hecho a correr como alma que lleva el diablo... era refrescante verla disfrutar de aquello en lo que en alguna época pasada no pudo disfrutar. Tenia amigos, amigas había decidido quedarse bajo la crianza del profesor quien la acogió como una hija.

No cabe duda que esta es una de esas oportunidades que ella no estaba dispuesta a echar a perder.

"¡Pervertido!"

"¡Yo también te quiero sabes!" dijo el chico entre risas.