─ 𝘼 𝙚𝙨𝙘𝙤𝙣𝙙𝙞𝙙𝙖𝙨 ─ Julián Álvarez

25: ʀᴇɪɴᴏ ᴜɴɪᴅᴏ

Por suerte ya habíamos llegado al aeropuerto de Reino Unido con Julián.

Nomás teníamos que esperar que venga el auto pasabamos por la cancha del City así él firmaba algo y después íbamos para casa.

— Sabes donde compré la casa? —respondió Julián hacíendo que yo lo quede mirando.

— En donde? —sonreí emocionada.

— En un country —dijo feliz hacíendo que a mí se me vaya la sonrisa— por qué cambiaste la cara?

— Porque...yo me siento incomoda así Juli —respondí eso hacíendo que a él se le abran los ojos como huevo frito.

— No, no amor...por qué, ¿qué te pasó? —hablo agarrandome de la cintura preocupado.

— Es que quedo muy mal yo Juli...quedo como una interesada o vividora —me mordí la uña mientras él se tranquilizaba y se reía con ternura.

— No digas eso lin, si lo hago es porque en verdad te amo —sonrió feliz encajandome un beso— yo no quiero que te sientas mal por eso, voy a jugar en una liga bastante grande Ava...yo quiero que vos seas mi Antonella —le mire los ojitos y vi como brillaban y cuando se reía se achinaban.

Ay mi amor, ¿Dónde firmo?

— Te amo Juli —lo volví a besar.

— Solo con que me dejes cogerte yo soy el hombre más feliz del mundo.

— Ay Julián, ibas bien —me reí con él.

— Pero en serio te digo, yo te quiero ver llena de lujos —me abrazó por la cintura— yo sé de donde venís y de donde vengo...

— Basta Julián, me haces llorar —respondí con lágrimas que amenazaban con salir.

Él se rió pero no pudimos estar más así porque llegó el auto.

Nos subimos y Julián me abrió la puerta trasera para sentarse conmigo.

Fuimos en camino a firmar unos papeles, va, él, yo no.

Él bajo del auto y me dejó un beso en la mejilla.

Yo me quede en el auto con el chofer mientras esperaba.

El chofer tendría como 26 años.

Encima esta re bueno, mamá.

Yo me acoste y como pude me dormi.

...

— Ava, amor...despertate —hablo Julián moviendome despacito el hombro— avita, levantate.

Yo me hice la dormida para ver que hacía.

Julián dio un paso atrás dejando ver al chofer que me quería hacer upa.

— ¡No, no! Soltala, la llevo yo —frunció el ceño hacíendo que él otro lo mire raro porque le hablo en español.

Julián me hizo upa y me llevo hasta adentro y me dejo en el sillón.

Se quedo un rato ahí hasta que yo me "levante".

— ¿Donde estamos? —me hice la boluda.

— Te despertaste —sonrió mientras dejaba un termo y un mate en la mesita de living.

— Por qué no querías que me haga upa el chico? —hable viendolo mientras cebaba un mate para él.

— Porque no Ava —tomó un poco del mate— cuando el chabón te iba a agarrar te quiso tocar todo el orto.

— Ay él —me reí— el celosin.

— Es lo mismo que yo esté bailando y se la apoye a una mina.

Dijo eso y se me cambio la cara.

No sé porque me gusta joderlo y no me la banco.

— Pero no te enojes —me sonrió mientras me sentaba en su regazo— bueno, voy a jugar un fifa.

Cuando dijo eso yo intente bajarme pero el no quiso.

— Quedate ahí.

— No, capaz no podes ver bien —hable inocente.

— Tengo dos hermosas vistas —dijo en doble sentido.

Estuvo jugando un rato y después se puso hablar con alguien.

— ¡Dale! —exclamó enojado— es offside, ¡Porque no me chupan el pingo vos y el árbitro puto!

— Por qué gritas tanto —pregunte con una voz dulce.

— Porque fue offside amor y le contaron el gol igual —me respondió con el mismo tono de voz.

Julián dejó todo de lado y paso sus manos por abajo de mi remera qué era de él.

— Te amo, gracias por acompañarme a todos lados.

— Me amas y me tenés más escondida que moto robada —dije riéndome hacíendo que a él no le dé gracía.

— A mí no me hace reír Ava...vos no sabes lo feo que es no poder presumirte o comentarte una foto diciendote lo mucho que te amo —respondió medio bajoneado mientras me abrazaba por la cintura.

— ¿Y por qué? —pregunte dudosa.

— Porque vos estas mal vista por la sociedad, lo mío es que las nenas son re celosas, un mal movimiento tuyo y te van a cancelar a la mierda —dejó un beso en mi cuello.

— Las fans —solte una sonrísa media esforzada.

Aunque yo quiera decir de todo no puedo decir nada, él tiene razón en todo lo que dijo.

— Son todos unos metidos, no tienen una vida divertida entonces apuntan a todos con el dedo.

— Qué raro que hables así —reí— te volviste muy poético.

—  Invitamos a Enzo? —agarró su celular y yo se lo saque enseguida.

— Si, ahora se toma el avión y viene —dije algo obvia.

Él rodó los ojos mientras entraba a instagram y le aparecía una publicación del club de river con el equipo abrazandose.

— Todas las gallinitas ahí —me empecé a reír.

— Anda bosterita boluda.

— Vos te harías de boca por mi? —se quedó en silencio.

La pensó un rato.

— No —negó— vos de river?

— No —respondí al instante.

— Vos sos más forra —se rió— al menos yo la pensé por vos.

— Y bueno, vos tenes que ser más vivo.

Estuvimos un rato hablando mientras recordabamos cosas del pasado.

— Con quién fue tu primera vez? —preguntó mirándome.

— Con vos.

— Igual ya sabía que era con Joaquín —dijo eso y se quedó pensando— ¿Qué? ¿Conmigo? No puede ser, conmigo no.

— Si bobo, fue con vos.

— Por eso me manchaste toda la cama de sangre —se rió— y vos me dijiste que estabas indispuesta.

— Bueno, bueno, ya esta —rode los ojos.

— Que descanso eras —se empezó a reír otra vez pero más tranquilo.

— Bue.

— ¿Bue? Bue la pija —respondió hacíendome a upa llevandome hasta la pieza— ahora por decir eso te hago un bebe.

Yo respire profundo y solte una risa hacíendo que el otro me de un saque en la nuca.

— Que pegas enfermito?

— Cállate y ponete en four —habló queríendose hacer el dominante pero al rato se empezó a reír.

— Qué atrevido se volvió el cordobés —empecé a reírme mientras obedecía.

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