Babys Everywhere All Around The World

First Steps

Para todos fue algo emocionante ver a Jisung desenvolverse con ellos dentro de su Little Space.

Si bien, ninguno tenía experiencia cuidando a niños, no había nada más estimulante que aprender sobre la marcha.

Jisung había probado ser un niño bastante educado y bien portado. Jugaba con Félix y Seungmin cuando no estaba ninguno de los mayores, aveces veía películas infantiles con Jeongin, hablando durante toda la película sobre lo fantástica que era la misma.

Cuando comía no hacía ningún salpicadero con la comida, siempre lavaba sus manitas y procuraba estar cerca de los mayores para que le ayudarán si tenía alguna dificultad.

Pero, luego de unas cuantas semanas, Hyunjin pudo notar el porque de tal comportamiento.

Cuando al fin pudo tener un momento a solas en la habitación del menor, procuro dejar informados a los demás que tomaría la siesta con el menor.

Camino con suavidad hasta la cama del menor, quien le sonreía de forma dulce.

—Sunggie. No te estás deslizando del todo ¿Verdad?- el jadeo angustiado que salió de los labios del menor le dió la respuesta—¿Por qué no lo haces, bebé?

Jisung solo pudo mirar sus manos mientras entrelazaba sus deditos con nerviosismo.

—¿Estoy en problemas?...

—No chiquito- Hyunjin no dudó en atraer el cuerpo del menor hacía él, en un abrazo suave y lleno de cariño—Pero te hace daño no entrar de forma correcta...

—Eso no...

—Hemos estado en contacto con el doctor Kim- Jisung soltó otro sonido frustrado sin atreverse a mirar a su mayor—No mientas bebé. Los bebés bonitos no mienten.

El cuerpo sobre él empezó a temblar en nerviosismo. Hyunjin se preocupo al no recibir ninguna respuesta del castaño durante ese momento.

—Me... Me da vergüenza...-sintio las manos de Jisung agarrarse con fuerza de su camisa.

—¿Por qué te da vergüenza Sunggie?- cómo pudo, alejó con suavidad el cuerpo de Jisung para poder inspeccionar su rostro.

—Es que... Ya hacen mucho por mi... Y... Y sé que no es normal...

—Es muy normal querer ser pequeño- acaricio su regordeta mejilla con suavidad mientras le sonreía dulcemente—Y a nosotros nos encanta cuidarte. Estoy seguro de que ninguno de los miembros te haría sentir mal si te dejas llevar por completo...

Jisung negó suavemente, evitando mirar al mayor.

—Sunggie...- el menor lo miró dudoso, con sus mejillas bastante sonrojadas y un adorable puchero en los labios—Te prometo que si te dejas llevar, yo mismo me encargaré de que estés seguro...

—¿Jinnie-hyung me va a cuidar?- Hyunjin celebro internamente al ver el brillo en los ojos del menor.

—Si bebé, yo te voy a cuidar...- dejo al menor acomodarse sobre él de forma que parecía un adorable koala. El mayor estiró su mano hasta el chupete que se encontraba en la mesita de noche junto a la cama antes de acomodarse en la misma con cuidado.

—Toma bebé...- deslizó la tetina del chupete con suavidad entre los labios del menor con mucha delicadeza.

Jisung lo recibió, sonriendo levemente mientras cerraba sus ojitos.

Tal vez, solo tal vez, debería dejarse llevar sin angustiarse por nada.

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Ser un little estaba probando ser más difícil de lo que él quería aceptar.

Jisung había aceptado por completo el deslizamiento de su conciencia a una más pequeña y a todo lo que está misma suponía.

Berrinches, más idas al baño, ya no comer solito. Tener toda la atención de sus hyungs y menores.

Y si. Eso iniciaba con los berrinches.

Jisung no dejaba de patalear y gritar en el sillón de la sala de estar. Soltaba lágrimas de enojo y balbuceos inentendibles que causaban que ninguno de sus cuidadores pudiese realmente ayudarlo en algo.

—Es que no entiendo ¿Que quiere?- Changbin prácticamente se arrancaba el cabello ante la desesperación de no poder calmar al menor. Adoraba a Sunggie, pero la situación lo sobrepasaba.

—¡Yo tampoco sé Changbin! ¡Creeme que ya habría hecho algo!- Hyunjin gritaba desesperado. El también llevaba cerca de media hora tratando de calmar a Jisung.

Ambos mayores habían sido encargados de procurar al menor en lo que los dos más grandes iban de compras de último momento.

Claramente nada salió bien.

—¡No puedo con esto! ¡¿Dónde se renuncia?!.

—¡No jodas Hyunjin! ¡No puedes renunciar! ¡No sin que Minho haya vuelto!

—¡No! ¡Yo no quiero morir, gracias!

—¡Pues yo tampoco!.

—¿Y ya lo llevaron al baño?- ambos guardaron silencio al oír la vocesita curiosa de Jeongin—Digo... Su pantalón está mojado asi que...

Ambos mayores miraron al menor que aún lloraba y entendieron la gravedad del asunto.

Ninguno había llevado al baño a Hannie y el menor se había hecho encima.

—Chan va a matarnos...

—¡¿Matarnos?! ¡Va a pulverizarnos para nunca más vernos la cara!-y una nueva discusión empezó. Haciendo suspirar a Jeongin, quien se acercó a Han para verlo fijamente.

—¿Bebé?- Jisung dejo de llorar al escuchar la voz tan suave y bonita de Jeongin, el otro menor no pudo más que sonreír ante tan adorable acto—¿Quieres que te cambien la ropita?

Jisung asintió varias veces, haciendo un adorable puchero que acentuaba sus redondas mejillas.

—Esta bien bebé- acercó su mano para acariciar con uno de sus dedos una de las esponjosas mejillas antes de mirar mal a los mayores—¿Que no oyeron? ¡El niño necesita un cambio urgente!

Ambos mayores de nuevo se quedaron unos segundos en shock antes de empezar a correr para llevarse a Jisung al baño para darle una ducha rápida.

Jeongin suspiro y los vio desaparecer por el pasillo con el bebé en brazos con cierta melancolía en la mirada.

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Cuando Christopher llegó a casa, todo estaba en un silencio para nada alentador.

Caminó con cuido por la sala, tratando de ver qué todo estuviese en orden. Camino sin hacer ruido por la casa hasta llegar a la habitación de Sunggie.

—Niño estate quieto ¡Ya no sé si te puse una manga o metí una pierna en el gorro!- tristemente, al llegar pudo escuchar los bajos sollozos del bebé de la casa mientras era -aparentemente- cambiado por sus mayores.

—¿Que carajos creen que hacen?- cuando abrió la puerta, la imagen no era mejor.

Jisung estaba con su espaldita desnuda en el piso frío, con sus piernas levantadas al aire mientras lloraba y pataleaba con toda la fuerza que podía reunir.

Hyunjin y Changbin soltaron al niño en cuanto escucharon la voz de Chan. Ambos completamente llenos de miedo y rezando internamente por un milagro.

Chris los miró a ambos con seriedad antes de bajar su mirada hacia Ji-Sung-, quien estiraba sus bracitos en su dirección aún llorando.

—Oh mi niño ¿Estos idiotas te trataron mal?- Chan empujó a Changbin de su camino para poder cargar al pobre bebé. Quien enseguida se agarró de el como un pequeño koala en busca de consuelo—De esto vamos a hablar después. Pero si Sunggie llega a enfermarse. Me encargaré de que Lee Know sepa de esto.

Changbin y Hyunjin solo pudieron asentir con un escalofrío cubriendo sus cuerpos.