3. "No creo que sea una coincidencia"

53 8 6
                                    

Estar rondando por el parque hizo que Harry conociera más de los humanos. Pudo ver a niños llorar porque sus madres no les compraban el helado que querían, o a perros correr y personas caminando mientras charlaban, pudo ver sus gestos y la forma en la que se expresaban. No era una duda que intentó imitar algunos movimientos, sin embargo; siendo muy rápido en aprender su habla y acento como pudo, remarcando mas su voz y dejando que sus ojos no fueran tan obvios en ver lo que la gente hacía para no incomodarlos.

Harry parecía muy encantado con la gente de la ciudad, había preguntado en donde estaba; no sabía que estaba en Londres, el mar era frío pero al ser una especie ya acostumbrada a su habitad natural no creyó que hubiera tanto frío en las tierras británicas. La gente lo miraba raro cuando lo veían, no era común ver a un hombre sin ropa de frío caminando en círculos por el parque.

De la tarde pasó a la noche; el frío comenzó a hacer efecto en su cuerpo. Habia encontrado unas mantas fuera de una especie de tienda enorme, se las había puesto alrededor de su cuerpo y por maravilla de la naturaleza encontró un pequeño callejón cerca de un edificio con un logotipo extraño y las palabras "Bar" remarcadas en colores neón. Sus rizos alborotados caían por su frente, sus dientes tiritando por el frío y la baja densidad del lugar húmedo en el que se encontraba. Risas y destellos de luces por los autos pasar arruinaban su sueño.

Alzo su mirada desconcertada al escuchar una voz familiar cerca. Dejo que sus mantas cayeran y así poder levantarse para echar un vistazo detrás de la pared.

"¿Estás seguro de querer tomar, Zed?"

"Muy seguro, vendí tres pinturas hoy y merezco celebrar esto con mis amigos".

Habían dos chicos más detrás de el, uno de ellos con un palillo que sacaba humo y el otro tenía el cabello amarillo, o como la gente se acostumbraba a decir: rubio.

Zayn sonrió mientras pasaba una de sus manos por su cabello desordenado, Harry lo miro detenidamente hasta que el rubio se dio cuenta de su presencia deteniéndose y empujando al otro chico.

"No me empujes, idiota", el rubio señaló con su dedo al pobre rizado que estaba delante de ellos, tímidamente, despegándose como si la pared de ladrillos fuera su muro.

"¿Lo conocen o porque  nos está mirando así?", Zayn frunció el ceño y se dio la vuelta para ver a quién le apuntaba su amigo, un jadeo escapando de sus labios cuando noto los ojos verdosos del contrario mirarlo con una sonrisa, notando como sus rizos se movían por el aire fresco de la noche.

Sus ojos se suavizaron considerablemente. Harry había caminado unos pasos hasta estar a un metro del grupo de tres. Zayn se movió, encarando a Harry quien ya se encontraba caminando hacia el más rápido.

Parecía que quería comerlo o era porque estaba muy emocionado de verlo.

"Lo conozco... ¿se acuerdan del chico raro con el que me tope antes del trabajo?"

"¿Es el?", Zayn asintió.

"¡Zayn!", la voz de Harry se hizo presente, un par de personas mirándolo extrañamente antes de pasar por su lado e ignorarlo. Zayn se detuvo abruptamente cuando sintió el par de brazos rodearlo.

"Hola, Harry", Zayn miro hacia abajo, la mata de pelo rizado rosando sus labios, el rostro de Harry se alzó para verlo, una risa suave deslizándose de sus labios cuando la barba de Zayn le hizo cosquillas su mejilla.

"Te extrañe", murmuró, tomando una de sus manos para ponerlas en sus propias mejillas, había visto como una pareja hacía lo que hacían, quería replicarlo con Zayn ahora que estaba ahí.

Zayn se rio nervioso, dando un paso atrás provocando que Harry casi se tropezara por la perdida de su cuerpo, su mano resbalando de su mejilla hasta caer a su costado.

𝐀𝐥𝐞𝐭𝐞𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝐜𝐨𝐫𝐚𝐳𝐨́𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora