7 | Verdad

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Aún no salía el sol, eran las seis de la mañana pero el pueblo ya estaba despierto. Algunos despejaban las calles de la nieve, otros despejaban los establos para sacar a sus animales a comer y Yoongi se encontraba arriba de un techo clavando la madera.

Mas la tierra comenzó a moverse de repente, la vibración se hizo más brusca y el miedo de la gente se volvió un caos. Un agujero se hizo a la mitad de la calle por donde salió una oscura criatura que cubrió todo el cielo.

—Diablos— murmuró Yoongi entre dientes cuando entendió lo que sucedía. Bajó rápido las escaleras tropezando en el último escalón pero la nieve atenuando la caída. Se levantó con agilidad y se echó a correr. Necesitaba llegar con Nyx cuanto antes.

Corría por los pasajes, ignorante de que la criatura lo observaba con especial interés. Unos cinco minutos más y estaría en su casa, sin embargo algo llamó su atención antes. Un grito de ayuda de una voz conocida.
La madre de los Kal se encontraba en el suelo a mitad de la calle, llorando, al parecer estaba herida. Se quedó atento, sin la remota idea de qué hacer. Nada podía destruir a esas bestias, solo Nyx podía acabar con esa pesadilla o esperar que el guardián Taehyung enfrentara su replica dentro de ella. Pero la madre era acechada y la cola de la criatura estaba lista para atacarla.

—¡Acá! ¡Por acá maldito monstruo! — fue lo único que se le ocurrió. Y no fue mucho más lo que pudo hacer. El monstruo lo envolvió con su cola de serpiente rápidamente y lo alzó en el aire. —¡Corra! ¡Rápido! — dijo a su suegra quien fue ayudada por un hombre que había visto la escena. "Vamos Nyx,despierta" pensó, aterrado. No quería que este fuera su fin, no quería abandonarla. Comenzó a sentir la presión en su pecho pero luego a la criatura mirando hacia atrás. Alguien lo distraía, posiblemente era ella, quería confiar en ello. Se vio en el aire luego, todo pasó en cámara lenta, hasta que impactó con el suelo, un sonido estrepitoso y luego el golpe en su cabeza terminó por quitarle la conciencia.

—YOONGI— despertó Nyx, sudando frío, desorientada. Yoongi estaba herido, era lo único que se le pasaba por la cabeza. Y cuando escuchó su voz fue recién el momento que notó que tres hombres estaban en la habitación. —¿Q-qué haces aquí? — pasó sus manos por su rostro esperando que siguiera siendo un sueño.

—Buenos días. Vine a buscarte— en eso miró a sus guardias quienes de inmediato pusieron un paño cubriendo su boca y nariz. Jimin jugaba con su amuleto entre las manos. Estaba acabada. Nyx intentó gritar pero eso solo la hacía respirar más el cloroformo. —Sabía que eras tú...

~•~

Volvió a esa blanca habitación donde había estado hace un mes. La mantenían amarrada y con una intravenosa donde inyectaban un somnífero.

—Debes poner de tu parte o sino nunca saldrás de aquí — le dijo Jimin quien caminaba con los brazos detrás de su espalda.

—¿Cómo está Yoongi? Necesito saber como está, por favor.

—Está bien— mintió — ahora concéntrate.

—¿Estás seguro?

Jimin rodó los ojos. Necesitaba terminar con esto lo antes posible. —Duérmanla— así que ordenó.

—¡No! ¡Espera! — pero el somnífero hacía efecto demasiado rápido, — no quiero... no...

La pesadilla se repetía, siempre la misma criatura, ella ocupaba el lugar de su madre y luego Yoongi cayendo de casi tres metros de altura.
La única diferencia era que ahí, en ese lugar, todo se quedaba en su mente, ningún portal era abierto, así que ninguna criatura amenazaba al pueblo.

Fueron días intentando de manipular su mente, de que ella tomara el control, de usar su portal como puerta hacia otros portales. Pero eran demasiados, era encontrar uno en un millón. Necesitaba de su ayuda para lograrlo, así que tendría que contarle la verdad.

Dromers ~ El comienzo | OT7Donde viven las historias. Descúbrelo ahora