3. Pasta de Moñitos.

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Un placer –contestó Poche con una sincera sonrisa

-Si me permite, puedo preguntarle a quién vino a visitar –Interrogó Maxi/Calle, aunque lo sabía bien y había escuchado las palabras de Poche.

-Yo, am, es una amiga... mi mejor amiga. Su nombre era Daniela, pero le decíamos Calle. –Dijo con nostalgia

-Cuando lo siento *en verdad lo lamento*

-Gracias. Y hábleme de tú, por favor-Claro y tú igual puedes hablarme de tú –le sonrió y a Poche  le encantó esa sonrisa que por una extraña razón se le hizo familiar. -Gracias. Y tú ¿a quién viniste a ver? Si puedo preguntar-A mis padres –mintió –Ellos murieron en un accidente cuando yo era pequeño *buena mentira Calle* pensó.

-Cuando lo lamento.-Gracias.

-Bueno, me tengo que ir. Fue un placer –En realidad Poche  no quería irse.

-El placer fue mío. –Maxi/Calle quería ofrecerle llevarla a casa, pero supuso que Poche  no aceptaría irse con un extraño y no quería asustarla.

Poche se encontraba en el salón del Glee club, junto con sus compañeros de coro esperando que el profesor Simon  llegara para empezar la clase. La morena platicaba con Sebastián, Johan  y Kim sobre lo que habían hecho en vacaciones. Laura y Evaluna se estaban haciendo cariñitos como siempre, al igual que Troy y Lucia. Los demás chicos platicaban también sobre sus vacaciones.

Simon apareció, pero no iba solo. –Chicos, atención. –Todos voltearon a verlo. Poche miró al acompañante de Simon  y su corazón comenzó a latir de prisa. –Este es Maxi, es nuevo en la escuela y se nos unirá. Espero que lo hagan sentir bienvenido. –dijo Simon. –Hola a todos. –Dijo Maxi/Calle, pensando en cuanto gusto le daba ver a sus amigos de nuevo. Quería abrazarlos a todos. –Hola –contestaron  todos. Comenzaron los murmullos sobre el chico nuevo. Juana comentó lo guapo que estaba y Sebastián concordó, mientras Johan  lo miraba serio. –Pero sólo tengo ojos para ti –le dijo Sebastián a Johan. Por alguna razón a Poche no le había gustado el comentario de Juana.

Maxi/Calle  le sonrió a Poche  y esta no pudo evitar devolverle la sonrisa. Maxi/Calle se fue a sentar a lado de ella. –Hola Poche.-Hola Maxi –le contestó la morena

-¿Se conocen? –Se metió Sebastián.

-Algo así –contestó Maxi/Calle

-Cuenten –pidió Sebastián.

-Nos conocimos en el cementerio, ¿contento? –Dijo Poche.

-¿En el cementerio? Qué extraño –comentó Sebastián

-Visitaba a Calle –dijo Poche con  tristeza y Sebastián  puso cara de 'la regué'

-Lo siento Poche –se disculpó el chico

-Olvídalo

Maxi/Calle se dio cuenta de cuánto, aún, afectaba a Poche su muerte y se sintió mal. Quería abrazarla y decirle que ahí estaba ella, que jamás la dejaría y que la amaba.

-¿Cómo estuvieron sus vacaciones chicos? –Preguntó Simon.

-Bien –respondieron todos.

-¿Alguien quiere cantar alguna canción? –Interrogó Simon-Yo –dijo Poche decidida después de unos segundos

-Bien Poche, te escuchamos

La morena se paró en medio del salón. –Como saben, la semana pasado se cumplieron seis meses que Calle nos dejó y quiero dedicarle esto. –Dijo dirigiéndose a sus amigos, quienes la veían tiernamente. Si bien a todos les dolió la partida de la ojos avellana, sabían que a Poche le había afectado más que a todos. Sabían cuanto había sufrido. A  Maxi/Calle se le encogió el corazón. –Esto es para ti –dijo la morena, mirando hacia arriba, al techo. Maxi/Calle  la miraba fijamente, tratando de no llorar. Poche les hizo la señal a los músicos y la música comenzó.

Aún en la muerte, te amare (Adaptación Cache)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora