011 (fin)

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las dulces mañanas jamás se hacen esperar cuando duermes en sábanas suaves y frescas, sabiendo con seguridad que despertarás en brazos que otorgan el calor del sol.

seungmin, un chico de cara primorosa, ojos llenos de brillo y actitud cálida como la de un cachorro que aprende de la vida.

hyunjin, un joven con apariencia semejante a un príncipe con sentido del humor, caballeroso y fiel atento a los deseos y necesidades de su adorable compañero de vida.

¿quienes podrían verse mejor, envueltos en mantas y despertando a la luz del sol?

pero el cuerpo humano a veces no quiere sueño, quiere vida.

-¡mis regalos! -gritó seungmin, sentándose de un brinco en la cama al despertar drásticamente. -¡mis regalos de navidad! ¡hyunjin!

sacudió a su novio, quien con suerte abrió un ojo con mucho esfuerzo, sin dejar pasar la oportunidad de hacer una cara de completa molestia al despertar de una manera tan brusca.

ese rostro gruñón no permaneció mucho tiempo, ya que al encontrarse con su niño, una sonrisa adormilada le nació.

-...¿que tus qué, amor? -preguntó con voz digna de anestesiado.

-tuve el sueño más loco... despertaba en navidad y... ¡no había regalos! ¡no había comprado regalos para ti! pero había una cosa peor, hyung, y es que... ¡tú no habías comprado regalos para mí! -lo sacudió otra vez, pero con más esfuerzo. -¿¡puedes creerlo!?

después se dejó caer rendido en la cama, no lo podía creer, pero agradeció que solo había sido un sueño.

uno no muy bonito.

-cariño, realmente me conmueve tu preocupación ante todo esto pero... -hizo un esfuerzo por abrir un poco más los ojos, aunque seguía demasiado dormido. -falta más de un mes para navidad, dulce.

-¿eso quiere decir que no te preocupas por tener mis regalos con anticipación?

-¡no! no digo eso seungminnie... ah, ¿desde cuando te volviste interesado?

-¡no lo soy! -cruzó los brazos y se armó un puchero, aún recostado en la cama. -es solo que se sintió muy real.

-¿tu sueño, amor?

-sí.

-¿y crees que hyunjin realmente olvidaría hacer de tu navidad algo super especial?

-no...

-claro que no. -se quitó de golpe las cobijas del cuerpo y se levantó euforicamente, un milagro para el cansancio que tenía. -aún así, mi cielo... -una vez de pie, le ofreció la mano a seungmin. -no voy a dejar que te quedes con ninguna inquietud. ¿vamos de compras navideñas?

el menor lo dudó un segundo, sintiendo confusión. se sentó en la cama, tomando la mano del más alto con cierto temblor. -¿a... ahora? ¿faltando tanto?

-¿no quieres? -una vez tomando su mano, lo jaló hacia su pecho, juntándolo a su cuerpo y poniendo su otra mano en la espalda baja del pequeño. -me parece un plan excelente. ¿una cita?

-¿u... una... -las palabras no le salían, su novio de hacía volar los nervios y enrojecer el rostro. -...cita? -hizo una cara de completa vergüenza, dejando escapar una sonrisa suave y tierna. -claro, ¿por qué no?

-excelente. -depositó un sutil beso en sus labios y otro en su frente, luego lo abrazó y finalmente lo soltó para caminar hacia la puerta. -entonces puedes prepararte para irnos, calentaré el baño, así puedes darte una ducha mientras hago algo de desayunar... ¿okay?

seungmin se quedó algo apantallado sobre la cama, con la boca entre abierta, logrando solamente asentir con la cabeza.

¿que tan lejos había llegado con tan solo haber tenido una boba pesadilla?

~

-debo confesarte que me da gusto que hayas tenido ese sueño decembrino adelantado. -caminaban de la mano adentrándose a un centro comercial, cubiertos con abrigos calientitos. ya era otoño y el frío era impresionante. -de cualquier manera adoro salir juntos.

-si te digo la verdad, no pensaba que me harías tanto caso. -explicó, soltando una risita traviesa.

-oh, amor mío, ¿cuando no te he hecho caso en algo? -entonces, hyunjin le entregó la mirada más repleta de amor que podía existir.

y seungmin solo pudo agachar la cabeza buscando ocultar la coloración en sus mejillas.

la mañana transcurrió divertida, llena de risas y besos pequeñitos en probadores y detrás de los anuncios, también abrazos fuertes y cálidos y lo más importante en esa misión: una ardua búsqueda del regalo perfecto para ambos, pero a escondidas del otro.

-me temo que deberás aguantar hasta navidad para ver lo que te conseguí, y vas a amarlo. -retó hyunjin, levantando las cejas de una manera juguetona.

-¿si? no me importa, porque haré lo mismo con tu regalo, no lo verás hasta que justo sea navidad. -se defendió seungmin, luciendo tierno en el intento de retar de la misma manera.

-no será un problema.

-¿realmente no quisieras ver tu regalo ya? ¿en este momento? ¡es increíble, hyung!

-lo estoy viendo, seungminnie. -con extrema delicadeza tomó el rostro de su bello novio, acariciando su piel y mirándolo con calidez. -mi regalo siempre has sido tú.

a veces las palabras eran el medio perfecto para hacer que las lágrimas de seungmin salieran con suave facilidad. no se hicieron esperar, y pronto todo su rostro se había convertido en la imagen de alguien que había caído por siempre en el profundo amor.

-no llores, mi cielo. -besó a su chico, limpiando esas lágrimas dulces con los dedos. -vamos a casa, ya es algo tarde y hace más frío, pero no te preocupes... te prepararé chocolate caliente, ¿bien?

pero su pequeño novio seguía inerte y en silencio, con unas cuantas lágrimas más saliendo y saliendo.

-hmm... -el más alto acarició su cabecita. -¿todo está bien, mi cariño?

-te amo, hyunjin.

a hwang se le armó en el rostro la sonrisa satisfecha de un ganador, y no esperó ni un segundo más para abrazar con toda su fuerza a su único amor.

-y yo a ti.

●●●

Gracias por el cariño... ♡

t e a  ; hyunminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora