Al parecer

Noviembre - Café sin azúcar

10 de noviembre

Hoy sentí celos, porque te ví sonreír, ví cómo lo mirabas y los celos se apoderaron de mi, sé que él puede darte algo que yo no, pero ¿Podrías llamar a eso amor? Lo dudo, él desea tu cuerpo, no tu sonrisa, él se enamoró de tu rostro, no de tu dulce risa, él anhela tus besos, no cuidarte y alejarte de excesos, él desea lo que puedes ofrecer y yo, yo estaré enamorada de ti hasta el fin.

Katherine, me miras con ternura, me abrazas, tus labios rodean mis mejillas hasta llegar a mis labios, pero... ¿Qué somos? ¿Qué es esto? ¿Soy solo un experimento para tu cruel ego?

Hace mucho tiempo que estás junto a mi, sé cómo ries y lo que te hace sufrir, me conoces como nadie, mi vergüenza y mi orgullo, conoces esa arrogancia que no admitiría ante los demás, pero ¿Me amas? ¿Me podrías amar? Lo dudo, tu belleza sin igual, tus dudas y tu claridad, cada uno me sonríe, pero con esa sonrisa que no me da paz, es esa, aquella que dedicas por piedad.

¿Te molestaría si me enamoro de ti? ¿Podrías aceptar este corazón? No creo, no deberías, yo no debería estar sintiendo este amor, temo que me lastimes, que te alejen de mi, temo perderte y no sabr más de ti, quiero amarte con mi alma, sostener tu mano hasta el fin, sueño vernos vestidas de blanco y caminar hacia ti.

Hueles como cereza, dulce, cálida, amarga, seca... ¿Podrías enamorarte de mi? Lo dudo, tienes tanto o más miedo que yo, porque sabes que esto está prohibido, que de ser amor, matará a una de las dos, probablemente yo.

Sabes a café sin azúcar, agrio, fuerte, caliente, avasallador, eres el café con la miel de tus ojos que no me van a mirar, eres el café que bebo, aunque sé que lentamente me va a matar, quiero seguir viendo esos bellos ojos, sentir que solo me ven a mi, aunque sé que ellos no serán míos, aunque sé que no estarás junto a mi.