⛓️ 20

137 22 11
                                    

• ° •──•─•──•✟•──•─•──• ° •

Sixteenth wish.

Hyunjin no fue hasta la tarde-noche. Jeongin estaba nervioso, sabía que era el último deseo, los había estado contando desde el primer día. No tenía ninguna "pista" que lo ayude, si quiera, a pensar qué podría hacer.

— Jeonginnie.

— ¿Si?

— ¿No quieres salir?

— ¿Otra vez?

— Necesito preparar todo, creo que ya sabes que es el último día.

— Está bien.

Yang salió, hizo el mismo recorrido de ayer, por lugares sin gente. Tardó unas dos horas, para luego volver a casa. Subió a la habitación. Estaba iluminada con varias velas rojas y decoraciones rojas en general. Hwang se encontraba sentado al borde de la cama. Incluso habían sábanas limpias.

— Ven —Dijo el mayor.

Jeongin se acercó hasta él, quien hizo sentarlo en sus piernas, quedando enfrentados. Comenzaron a besarse, lento y suave, como si fuese el último. Minutos después, ambas camisetas desaparecieron. Era la primera vez que Yang veía el cuerpo del contrario.

— No te sorprendas. Me quieres, te quiero... teníamos que hacerlo en algún momento.

Hyunjin lo acostó posicionándose arriba de él. Siguió en su boca durante un par de minutos y luego bajó por su cuello y torso lentamente, depositando los besos más suaves. El menor enredó sus dedos en el cabello de Hwang gracias a la increíble sensación que estaba teniendo. Los hilos fríos de saliva que sentía cuando Hyunjin pasaba los besos de un lugar a otro lo volvían loco. Trataba de no jadear, ni siquiera un poco.

— Jeonginnie...

— ¿Mh?

— ¿Morirías por mi?

— Alguna vez te dije que estaría dispuesto a lo que sea, ahí tienes la respuesta, pero no pares.

Luego de unos minutos más de puros besos, gimió. Gimió de dolor al sentir un objeto metálico atravesar su abdomen. Un cuchillo de porte grande <que no entendía de dónde lo había sacado> estaba enterrado en él. No entendía qué había pasado. Las sábanas empezaron a mancharse, al igual que las manos <y la cara salpicada> de Hwang, quien se levantó y se dirigió hasta el escritorio. Sacó un arma de fuego, junto a una manzana. Una manzana roja.

— Las verdes no significan nada para mi. Las rojas... —Dio el primer mordisco— El rojo significa amor y pasión. La sangre es roja, y el único que me hizo sentir cosas eres tú, por eso me gusta tanto. El único que merece una manzana roja.

Tomó el arma y la posicionó en su sien. Esperó hasta antes del último suspiro de Jeongin, quien ya se encontraba agonizando.

— Yo también moriría por ti, Jeonginnie.

Finalmente apretó el gatillo, salpicando la cara del menor. Pocos segundos después, Jeongin también dejó de sufrir.
Ahora ambos tenían el "amor" del otro plasmando en sus rostros.

• ° •──•─•──•✟•──•─•──• ° •

16 Wishes // Stray Kids; HyunIn. [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora