Lucerys.
Después de la muerte de Criston, Aemond se apartó de absolutamente todos y no dejó que nadie se le acercara e incluso alguna vez me cerró la puerta en la cara.
Cada vez era más doloroso y a veces daban ganas de rendirme, acurrucarme en un costado con mi madre y olvidarme de algunas cosas.Pero no quería ser molesto, las cosas entre sus padres habían cambiado también, eran como una sombra de lo que fueron o quizás Daemon no cambió demasiado, su sed de sangre había crecido de una manera alarmante, sobre todo después de que Cregan se hubiera casi negado a traerle a los sacerdotes o lo que demonios sean, no obstante hicieron algún tipo de trato y a pasar se todo eso, el ambiente era demasiado para mi
Me senté con Aegon y Helaena, los cuales me regalaron una pequeña sonrisa, habían sido amables apesar de las circunstancias que se habían dado y de cierta manera...había sido culpa del difunto Larys.
Larys Strong...una persona que antiguamente no había presentado una amenaza en sí...se convirtió en nuestra peor pesadilla. Dolía pensar que ese hombre tuvo que ver con la muerte de Harwin. Ese hombre era mi padre biológico, alguien que nos cuido desde que éramos unos bebés, que cuido de madre cuando era necesario y dios perderlo y saber que había sido alguien de su propia familia quien lo mato fue impacte.
Trague saliva un tanto agobiado al darme cuenta de una cosa, si Aemond no hubiera sido envenenado quizás...las cosas hubieran acabado aún peor, una guerra, muertes...el echo de pensar que mi familia o Aemond peleasen en una guerra hasta la muerte era aterrador.
–Lucerys, debes calmarte un poco. –La voz dulce de Helaena se hizo presente. –Las cosas van a mejorar pronto...Criston estará en pie en cuestión de horas.
Sus palabras fueron un alivio para mí corazón, era un gran bálsamo para las heridas de todos. Solte un pequeño suspiro, deje caer mi cabeza en mis manos y escondí mi rostro allí, no tenía ganas de oír las burlas de Aegon o ver las sonrisilla misteriosa de la tía Helaena a pesar de que era algo que aliviaba de alguna manera.
Me quede de esa forma por un tiempo antes de sentir unos brazos abrazarme con cuidado. Al principio pensé en Helaena pero esos brazos eran musculosos y fuertes, así que opte por Daemon, así que levante la cabeza para ver Aegon y Helaena mirándome con una sonrisa enorme en sus cara, eso me aterro un poco y lentamente gire mi rostro.
Mi corazón comenzó a correr al ver el rostro medio dormido y angustiado de Aemond, me gire completamente y me lance que sus brazos.
–¡Eres un idiota! Estuve tan preocupado por ti. –Comente con dolor.
Aemond me abrazo con fuerza contra su pecho y escondió su rostro contra mi cuello. No pude evitar estremecerme un poco al sentir el aliento del mayor sobre la piel expuesta, me puso los pelos de punta pero por otro lado quería ver como se desarrollaba todo esto.
–Lo siento Luke...necesitaba pensar y quería hacerlo solo. No quería que te dolería o te sintieras solo. –Por cada palabra susurraba era un roce de sus labios en mi piel. –Te extrañe.
–Yo...también te extrañe. –Susurre de vuelta.
Lentamente me separe de él para colocar mis manos en sus mejillas y dejar una pequeña caricia, este se apoyo en mi toque como si estuviera hambriento por ese pequeño gesto. Lentamente le fui quitando ese parche que ocultaba aquel ojo mutilado, ese zafiro relucio y la mirada del mayor se hizo insegura cuando quedó al aire aquello de lo que se suponía que debía vergonzarse y que hasta ahora había logrado ocultar a Daemon, por mucho que este lo hubiera intentado ver.
–No tienes por qué esconderlo, eres hermoso como eres. ‐Susurre.
–¿No crees que es asqueroso? –Pregunto sorprendido.
–En absoluto. –Comente.
Con cuidado me puse de puntillas para dejar un beso en su cicatriz antes de bajar hasta sus labios. Pude oír el suspiro risueño de Helaena mientras Aegon susurraba.
–¿Es mi imaginación o todo el ambiente se ha vuelto de un color rosa cursi? ¡Ay! –Se quejo Aegon después de recibir un codazo de Helaena.
Ahora mismo no importaba sus comentarios, quizás después sentiríamos cierta vergüenza por esto pero solo quería disfrutar del contacto de sus labios sobre los míos o eso fue hasta que nos interrumpió la loca de Alicent.
–¡Separense ahora mismo! –El grito de la mujer nos hizo estremecernos y separarnos un poco, no obstante Aemond me puso detrás de él para protegerme. –Es una aberración el besar a otro hombre.
–¿Porqué lo sería? Me gusta Lucerys desde hace mucho tiempo, he tenido la oportunidad y la aproveche. –Contesta fríamente el mayor.
–Sabes que esto no esta permitido, seremos la comidilla de todo los siete reinos. –Comento Otto sin ocultar el asco.
‐No me avergüences más, hijo. Suelta a ese mocoso y ven conmigo. –Susurra Alicent con voz asquerosamente tierna.
–Mamá seamos flanco con esto, así termina todo esto y nos deja en paz. –Habló Aegon con cierto cansancio.
Daemon, Rhaenyra, Baela, Rhaena,Jacaerys, Rhaenys y Corly habían entrado en algún momento en la habitación ya que se encontraban observando todo esto.
–Queridisima madre, Aemond y a mi nos gustan los penes, no es complicado de entender, para ser más específicos, me gusta el pene de Jacaerys y mi hermanito el de Lucerys, no es complicado pero vaya, que si quieres puedo ser más gráfico. –Aegon fue directo al grano, haciendo que mi rostro y el de mi hermano cogiera un tono brillante rojizo.
–¡Aegon, hay niños delante! –Grito Rhaenyra.
–No, no, no. Que siga esta conversación esta muy interesante. –Comenta Baela la cual se sienta y observa todo con atención.
–Eso, eso. Querida esposa esta conversación es bastante ilustrativo para los niños~ –Comenta Daemon sentándose al lado de su hija y observar con la misma atención. Lleno de diversión y curiosidad.
De tal padre, tal hija.
Fin del capítulo.
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¡Hola a todos!
Ya esta aquí el nuevo capítulo de esta historia. Espero que sea de vuestro agrado y pues lamento la tardanza y faltas de ortografía. Hoy no iba a subir capítulo, ya que estaba con la migraña...pero quería dejaros un capitulito cortito aun que sea.Alicent cada vez me cae peor.
¡Criston vuelve al ruedo!
¡Gracias!
Buenas noches.
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°~○Family●~° (Lucemond and Jaegon)
FanfictionAemond no sabe que es sentirse en familia, tampoco lo hace sus hermanos, no obstante quiere saberlo antes de que una absurda guerra comenzará...al único que podría preguntar es a Criston Cole.